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2014, el año en que el fútbol perdió quilates: el once de los mejores futbolistas retirados
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2014, el año en que el fútbol perdió quilates: el once de los mejores futbolistas retirados

El futbolista tiene fecha de caducidad, aunque hay jugadores que no deberían retirarse nunca. Aquí repasamos los que dijeron adiós en 2014

Nunca es fácil despedirse de un jugador para siempre. Las retiradas son siempre duras, pero este 2014 ha sido especialmente traumático para el fútbol clásico. Muchos grandes jugadores nos han abandonado para no volver (no se espera que Verón regrese de nuevo), y otros hicieron amagos de irse y siguieron, como Rogério Ceni y Di Natale. Varias leyendas de esto del balompié empezaron a vivir fuera de los terrenos de juego, lejos delos goles y las entradas. Podemos formar un once sensacional que ganaría muchos de los torneos que todos estos 'cracks' ganaron en sus carreras. Y se queda fuera, por mera elección, Mauro Camoranesi, otro que dijo adiós.

El jugador más viejo en jugar un Mundial dijo adiós al fútbol precisamente en Brasil, después de colaborar mínimapero históricamenteen la clasificación de Colombia para los cuartos de final, donde cayeron contra los anfitriones. Con 43 años, dijo adiós tras 24 años de carrera empezada y finalizada en el Deportivo Cali. Jugó en el Real Zaragoza y triunfó, sobre todo, en Independiente y Galatasaray.

El inmortal capitán del Inter de Milán acabó una carrera que no parecía tener fin el pasado mes de mayo. Una rotura del tendón de Aquiles le apartó casi un año, cuando estaba llegando a los 40, pero se retó a sí mismo a volver al menos una vez más, para poder despedirse del Meazza y la que fue su afición durante 19 años. Lo consiguió y terminó algo que había culminado cuatro años antes en el Bernabéu, al levantar la tercera Copa de Europa del Inter.

Las continuas lesiones hicieron a Carles Puyol dejar demasiado pronto los campos de fútbol y cambiarlos por los despachos. Ningún capitán del Barça ha levantado tantos títulos como él, y entre ellos están tres Champions League, que pocos pueden decir eso. Uno de esos del legendario y exclusivo club de losOne Club Men. Eso sí, no pudo cumplir sudeseode jugar en el Milan. No todo pudo ser perfecto.

ElGringofue defensa del Manchester United, París Saint-Germainy del Real Madrid, pero puede que su mejor nivel fuera aquel que dio en el Real Valladolid, en la etapa que lo hizo saltar a la fama mundial. Se retiró enÑuls, el club de su corazón, donde empezó y desde donde llegó a España. Se marcha con la espinita de haber estado en varios grandes del fútbol europeo, pero sin poder ganar con ellos ningún título internacional.

Una de lasniñitasde Pep Guardiola en el Barça junto a Seydou Keita. Un símbolo de la institución culé durante muchos años que luchó ante las adversidades del cáncer y al que venció. No se retiró cuando se lo diagnosticaron, sino que quería volver a ser jugador de fútbol, y desde que volvió hace ya dos años. Dos Copas de Europa con Guardiola y muy pocos goles, pero todos importantes, sobre todo el que marcó en la Copa del Rey en el Bernabéu al Real Madrid. Un héroe del fútbol moderno.

Podríamos haber escrito esto hace tiempo sobre laBrujita. Se retiró en 2012 pero nunca se fue del todo, porque no podía abandonar durante mucho tiempo a su Estudiantes de la Plata. No volvió a Argentina para jubilarse, sino que lideró a su equipo hacia la conquista de América en 2009 y estuvo muy cerca de ser también campeón del mundo contra el Barça. Una carrera entre los más grandes clubes del mundo y una diestra prodigiosa.

Probablemente, el mejor lanzador de faltas del fútbol moderno. El público general se quedará con David Beckham, con Messi, con Cristiano Ronaldo, pero nadie lanzaba los libres directos como el chico de Pernambuco. Nunca jugó en un grande europeo porque fue feliz, muy feliz, en el mejor Olympique de Lyon de la historia. Un así, quizás su mayor éxito fuera cuando era poco más que un niño: ser campeón de la Libertadores con Vasco da Gama. Allí empezó a perforar escuadras y no paró ni siquiera en Qatar. Sólo las lesiones nos impidieron ver más a Juninho.

Resulta raro hablar de la retirada de Seedorf cuando durante este 2014 ya se ha sentado en uno de los banquillos con más solera del fútbol, en del Milan. Fue precisamente fichar como técnicorossonerolo que hizo colgar las botas al holandés de Surinam. No fue una experiencia especialmente buena, no lo iba a ser y se sabía, porque entrenar a este Milan es casi un suicidio garantizado, pero hizo lo que pudo para estar debutando. Este chaval tiene cuatro Copas de Europa y una ristra de títulos interminable. El gran error de Lorenzo Sanz.

Giggs ganó 37 títulos. Resume bastante bien la carrera del que puede ser el mejor jugador (o al menos el más importante) de la historia del Manchester United. Nunca jugó un Mundial o una Eurocopa (sí unos Juegos Olímpicos), pero no por ello pierde valor. Más de 1.000 partidos como profesional, todos esos títulos levantados y una ristra de récords que difícilmente alguien superará jamás.

Sí, Rivaldo aún seguía jugando. Estuvo tanto tiempo perdido por el submundo del fútbol más extraño que cualquiera podía haberle perdido la pista hace más de un lustro. Pero Rivaldo sólo paró de jugar este año, cuando ya había debutado su hijo en el equipo que él preside en Brasil, el Mogi Mirim. Hace doce años que dejó el Barcelona, parece una eternidad. Fue en el club en el que alcanzó la perfección futbolística, del que se fue a Japón para ser campeón del mundo con Brasil, pero se tuvo que ir al Milan para ser campeón de Europa.

Puede que sea el que más clase tenía de todos estos once. Era la elegancia hecha delantero. Elegancia y efectividad, porque lo que intentaba Henry siempre tenía un objetivo: el gol. Eso sí, si podía ser bonito, elegante, de highlights, pues mejor, porque eso era lo que se le daba mejor que a nadie: marcar goles espectaculares con una aparente sencillez pasmosa. Lo ganó todo con Francia y con el Barça delSextete, pero en ningún sitio es tan querido como en Londres, donde hay una estatua espectacular enfrente del Emirates.

Nunca es fácil despedirse de un jugador para siempre. Las retiradas son siempre duras, pero este 2014 ha sido especialmente traumático para el fútbol clásico. Muchos grandes jugadores nos han abandonado para no volver (no se espera que Verón regrese de nuevo), y otros hicieron amagos de irse y siguieron, como Rogério Ceni y Di Natale. Varias leyendas de esto del balompié empezaron a vivir fuera de los terrenos de juego, lejos delos goles y las entradas. Podemos formar un once sensacional que ganaría muchos de los torneos que todos estos 'cracks' ganaron en sus carreras. Y se queda fuera, por mera elección, Mauro Camoranesi, otro que dijo adiós.

Carles Puyol
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