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"Eso es vender el alma del Madrid... quitaron hasta la cruz de la corona"
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LA CRUZ EN MARRUECOS, REÑIDA CON LA RELIGIÓN

"Eso es vender el alma del Madrid... quitaron hasta la cruz de la corona"

En Marrakech, pisando tierra musulmana, un comentario de un aficionado de San Lorenzo saltó y fue pronunciado en alto tras notar presencia española

Foto: Acto de presentación de la tarjeta NBAD sin la cruz del escudo.
Acto de presentación de la tarjeta NBAD sin la cruz del escudo.

En la Grande Place de Marrakech, pisando tierra musulmana, un comentario de un aficionado de San Lorenzo saltó y fue pronunciado en alto tras notar presencia española: "Eso es vender el alma, quitaron hasta la cruz de la corona". Su dardo envenenado invita a la reflexión y señala la decisión que tomó la directiva del Real Madrid de omitir la mencionada cruz que sustenta la corona del escudo blanco en un acto con el banco NBAD, de Abu Dabi. El fan de San Lorenzo está comprobando estos días en el Mundial de Clubes cómo muchas de las réplicas no autorizadas -falsas- que se venden en países ‎musulmanes –Marruecos, por ejemplo- sustituyen la cruz por un punto, tres picos de una estrella o, directamente, la omiten. En definitiva, es tan habitual ver camisetas del Madrid sin la cruz que con ella. Con la Mezquita hemos topado.

En el acto que tuvo lugar el pasado 24 de noviembre con la entidad bancaria, la razón por la que el Real Madrid retiró su cruz del escudo fue puramente comercial, para no chocar con la cultura y religión musulmana de los clientes de dicho banco. No es sencilla tal toma de dicha decisión pero si se habla de universalidad, este tipo de acciones parecen inevitables y coherentes buscando que países que representan importantes enclaves estratégicos del Middle East, como Abu Dabi, no tengan ningún freno a la hora de invertir en el club merengue. La cuestión es, ¿hasta qué punto se pierde una porción de identidad del Madrid? ¿Se ha “vendido el alma” por este acuerdo? ¿Ha molestado a madridistas identificados con esa corona y su cruz? Difícil de medir, y menos sin ningún tipo de referéndum o similar.

En el caso del Madrid hay que fijarse a propósito porque no deja de ser un detalle. Más difícil lo tiene el otro ‘gigante’ español. La cruz de San Jorge en el escudo del FC Barcelona también incomoda en países musulmanes y llama mucho más la atención que en del Madrid, y es menos fácil de cubrir: la barra horizontal roja suele subirse o desaparecer y la vertical aparece casi en solitario (en alguna réplica africana se ha llegado a poner una media luna en su lugar...). Además, en este caso, no sólo el tamaño importa ya que el significado de la cruz para el club culé está muy arraigado con la identidad catalana -Sant Jordi es el patrón de Cataluña- y sería más complicado de suprimir, como hizo el Real Madrid.

Quizás el comentario de este fan de San Lorenzo iba con mala baba viendo cómo la Grande Place y Marrakech era un territorio conquistado por el Madrid. Su club no tiene ninguna cruz en el escudo así que no debe hacer ninguna maniobra comercial en ese sentido… y si la tuviera, resultaría extraño suprimirla siendo el actual Papa Francisco I socio y fanático de los Cuervos, además de llevar a un santo por nombre, claro. Con la Iglesia hemos topado.

En la Grande Place de Marrakech, pisando tierra musulmana, un comentario de un aficionado de San Lorenzo saltó y fue pronunciado en alto tras notar presencia española: "Eso es vender el alma, quitaron hasta la cruz de la corona". Su dardo envenenado invita a la reflexión y señala la decisión que tomó la directiva del Real Madrid de omitir la mencionada cruz que sustenta la corona del escudo blanco en un acto con el banco NBAD, de Abu Dabi. El fan de San Lorenzo está comprobando estos días en el Mundial de Clubes cómo muchas de las réplicas no autorizadas -falsas- que se venden en países ‎musulmanes –Marruecos, por ejemplo- sustituyen la cruz por un punto, tres picos de una estrella o, directamente, la omiten. En definitiva, es tan habitual ver camisetas del Madrid sin la cruz que con ella. Con la Mezquita hemos topado.

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