De ver a su PSG rodeado de culés a ser apuñalado ¿por dos ultras al grito de Barça?

El plena movilización para acabar con la violencia en el fútbol, los Mossos d'Esquadra trabajan con la hipótesis de que los autores de la agresión a un seguidor del PSG en Barcelona son "aficionados radicales y violentos" que no habían planificado su asalto y que actuaron sin que previamente hubiera habido ningún episodio de animadversión entre ambas hinchadas. Así lo aseguró el portavoz de la policía catalana, el intendente Xavier Porcuna, quien insistió en que las dos agresiones con arma blanca que hubo en los alrededores del Camp Nou tras el partido de Champions no guardan relación entre ellas y las protagonizaron grupos diferentes.

La primera agresión ocurrió hacia las 23.00 horas en la calle Felipe de Paz, cuando dos seguidores radicales del FC Barcelona asaltaron por sorpresa a un grupo de aficionados del equipo parisino y apuñalaron por la espalda en el tórax a Adrien J., de 28 años, nacionalidad francesa y residente en Barcelona, que permanece hospitalizado fuera de peligro. Según las principales hipótesis con la que trabajan los Mossos, la agresión a este aficionado francés la llevaron a cabo dos "seguidores radicales y violentos del FC Barcelona", en palabras de Porcuna.

Los Mossos d'Esquadra sustentan esta teoría en las declaraciones de varios testigos, que afirmaron que los dos agresores profirieron gritos a favor del FC Barcelona antes de apuñalar al hincha galo, así como en los distintos medios de prueba que barajan los agentes, entre ellas las grabaciones de las cámaras de seguridad. Según Porcuna, no consta que hubiera habido ningún enfrentamiento ni pelea previa a esta agresión entre hinchas de ambos clubes, ya que durante el partido imperó el fair play entre ambas aficiones, que mantuvieron una actitud "ejemplar".

Por este motivo, los investigadores rechazan por ahora la hipótesis de que esta primera agresión estuviera motivada por una venganza tras riñas previas entre ambas aficiones. De hecho, los Mossos trabajan con la hipótesis de que las dos agresiones con arma blanca de anoche en los aledaños del Camp Nou fueron "episodios aislados" que no responden a la "animadversión entre aficiones rivales", según Porcuna.

El portavoz de la policía catalana destacó que tanto antes como durante el partido no hubo enfrentamientos ni tensión entre las aficiones del FC Barcelona y del Paris Sant Germain. Por este motivo, explicó que, pese a que el partido había sido declarado de alto riesgo -como todos los de la Champions-, se decidió no demorar media hora la salida de aficionados franceses del estadio azulgrana para que no coincidieran ambas hinchadas en la calle, como se hace cuando se prevé que pueda haber enfrentamientos.

Además, en el caso concreto de Adrien J., este vio el partido en la grada rodeado de aficionados culés, ya que compró su entrada en Barcelona, donde reside desde hace años, por lo que no se encontraba con el grueso de la expedición parisina, de la que la policía francesa también hacía un seguimiento "exhaustivo". La decisión de no retener media hora a los aficionados del PSG en el Camp Nou fue acordada entre los Mossos d'Esquadra, la policía francesa y los responsables de seguridad del FC Barcelona, según Porcuna.

Respecto a la segunda agresión, que ocurrió pocos minutos después en una zona cercana a la Avenida de Madrid, Porcuna explicó que siguen abiertas todas las hipótesis, pero que la principal es que pudo tratarse de un robo con violencia en el que los asaltantes -un grupo de entre tres y cinco personas- trataron de arrebatar el móvil a un hincha del PSG.

El joven que sufrió este navajazo, M.M., de 32 años, fue dado de alta el mismo miércoles en el Hospital de Bellvitge y regresó a Francia junto a las personas con las que se desplazó a ver el partido. Los Mossos d'Esquadra mantienen la investigación abierta para tratar de identificar y detener a los autores de ambas agresiones, que por el momento se desconoce si estuvieron en el estadio azulgrana siguiendo el partido de Champions.