Iker Casillas recupera los galones de mando de la Roja para no hundirse un poco más

“Ya veremos qué hacemos el lunes”, dijo Del Bosque tras la derrota sufrida por España ante Francia en París. El domingo anunció su titularidad en Valencia.De Gea jugó en Parísy Casillas lo hará en Valencia.La Roja inicia su camino hacia la Eurocopa 2016 y el seleccionador debíatomar una determinante decisión para saber si Iker continúa siendo el primero de su lista o el del Manchester United cogíael relevo con fuerza. Juega Casillas ante Macedonia.Una decisión que puede revitalizar al guardameta del Real Madrid o todo lo contrario.

Del Bosque vuelvea dar a Iker los galones de mando. De lo contrario, la frágil moral del porterohabría quedadomás que seriamente tocada. El seleccionador ya ha avisado al decir que “debemos ir rodando a De Gea”, pero sabiendo que una nueva suplencia -esta vez frente a Macedonia-del hasta ahora intocable, habría supuesto colocarle en una complicada situación ante los aficionados y los medios, pendientes desde hace mucho de cualquier detalle.

Casillas esperaba jugar ante Macedonia. Lo contrario no entraba en sus planes. Tras un duro Mundial, donde sus actuaciones no fueron las esperadas -“tal vez no estuve a mi nivel”, llegó a reconocer-, una suplencia en el Ciutat de Valencia habría supuestorecibir un golpe inesperado. Demasiado duro para un portero que desde hace mucho, desde que Mourinho le mandó al banquillo, no ha recuperado el nivel de antaño.

Del Bosque optó por De Gea en un partido, aunque amistoso, mucho más complicado de afrontar. Una Francia en plena fase de renovación con vistas a su Eurocopa era un enemigo más potente que Macedonia. Davidsacó nota ante los galos en un partido en el que tuvo que intervenir más de una vez. Por el contrario, el partido ante Macedoniase presenta más fácil de asumir para el guardameta elegido. En este caso Casillas.

Sin la confianza que comenzó a perder con Mourinho, cada partido supone un examen para Casillas, algo que se nota en el día a día del guardameta. Se siente vigilado de manera permanente, algo que en el vestuario del Real Madrid no ha pasado inadvertido.Su estado de ánimono es el mismo desdehace tiempo, algo que el propio Ancelotti detectó al aterrizar en el Real Madrid y que, junto al ‘informe’ de Villiam Vecchi, su preparador de porteros, fue clave para que el técnico italiano apostara por Diego López. Del Bosque, como Carlo, sabe que levantar el ánimo de Iker es fundamental para que recupere su mejor versión.

Tras el Mundial de Brasil, Casillas tenía decidido abandonar el Real Madrid, tal y como explicó al propio club. Sin embargo, no llegaron las ofertas que él esperaba y, además, los dirigentes madridistas le comunicaron que no le darían la carta de libertad, tal y como era su deseo. Así las cosas, y aunque esperaba estar a estas alturas lejos de Madrid, debió seguir vestido de blanco. Ha recuperado el estatus de titular con Ancelotti, pero sabe que Keylor Navas está al acecho y que una mala actuación puede devolverle al banquillo.

“Lleva año y medio en una situación incómoda. Le duele más perder la confianza del madridismo que no jugar”, dijo Del Bosque en Cuatro cuando se le preguntó por Casillas. En la final de la Supercopa de Europa ante el Sevilla recuperó buenas sensaciones, pero en la de España y en la derrota ante la Real Sociedad, sus actuaciones estuvieron rodeadas de comentarios y debates. Esos quele han hecho perder esa seguridad de otros tiempos.

Del Bosque, mientras, sabe que cualquier decisión que tome en estos momentos será debatida. Para bien o para mal. La portería de la Roja está ‘caliente’ y lo sabe. Se le está viendo más inquieto de lo habitual durante los últimos días, consciente de que la pésima imagen ofrecida por el equipo en el Mundial le ha colocado en el punto de mira cuando antes apenas se le discutía nada. Macedonia no se presenta, a priori, como rival de la suficiente categoría como para amargarle la noche. Ni a Vicente nia Iker...