El Real Madrid exige un inmediato cambio arbitral y apunta a Sánchez Arminio

El Real Madrid quiere una revolución en el sistema arbitral. Tal y como adelantó El Confidencial está semana, Florentino Pérez y el resto de directivos abogan por una metamorfosis total del estamento arbitral. El objetivo, claro está, es Victoriano Sánchez Arminio, su proceder y maneras a la hora de preparar y designar a los colegiados de cada partido.

Por el Bernabéu ha indignado lo sucedido con el caso Cristiano Ronaldo. Pese a ello, tampoco ha sorprendido ni la actuación de Ayza Gómez ni las posteriores decisiones de los diferentes comités. El Real Madrid sabe que está en inferioridad, de ahí que quieran un cambio drástico en todo el proceder arbitral. El alejamiento federativo es evidente. El último acercamiento se produjo con el indulto de Del Nido, pero el club blanco camina por otra senda muy diferente a la que marcan desde la Ciudad del Fútbol de las Rozas.

Las quejas blancas van desde la designación, pasando por la formación y, sobre todo, al oscurantismo que, según el Real Madrid, persigue a los árbitros españoles. Respetan a los árbitros pero quieren eliminar la potestad de que sea Sanchez Arminio el que designe en todos y cada uno de los partidos y decida ascensos y descensos. Quieren sorteo puro y duro o con algunas condiciones, pero nunca designación a dedo. Incluso, pretende que se elimine la prohibición de que un colegiado pite a un equipo de su ciudad.

Otro de los aspectos que preocupan es el silencio y misterio que rodea a los árbitros. Según el club blanco, la transparencia ayudaría a la mejora de sus actuaciones, a ser más profesionales, otro de los objetivos que el Real Madrid planteará en breve a la federación.

En la zona noble del Bernabéu piensan que el nivel arbitral no es malo, pero que deben dar un paso adelante para ser profesionales al ciento por ciento, lo que ayudaría a terminar con errores o interpretaciones fallidas, algo en lo que se ha visto afectado el Real Madrid en el partido ante el Athletic, al menos así piensan.

Respecto a lo sucedido con la sanción a Cristiano Ronaldo nada ha sorprendido, pero ha indignado el hecho de que se castigue a Ayza Gómez, asumiendo sus errores a la hora de redactar el acta, y se mantenga la sanción al portugués. Nadie lo entiende y por el Bernabéu menos aún.