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Comienza la cuenta atrás para un Casillas que tiene las maletas preparadas para emigrar
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Comienza la cuenta atrás para un Casillas que tiene las maletas preparadas para emigrar

Seis meses tiene por delante Iker Casillas para cambiar su situación. Si no lo consigue, su salida del Real Madrid en el mes de junio está más que cantada

Foto: Casillas, durante un entrenamiento del Real Madrid (EFE)
Casillas, durante un entrenamiento del Real Madrid (EFE)

Hace poco más de un mes reconoció abiertamente que no era plenamente feliz. El frío banquillo de los suplentes está ‘matando’ a un tipo que siempre fue el número 1. Iker Casillas dijo sentirse “triste por no jugar. Cuando no juegas tanto, disfrutas de cada partido en el que participas, pero lo haces de distinta manera”. Pasan las semanas y no cambia nada en su vida. La cuenta atrás ha comenzado para un portero que de no cambiar nada, en junio hará las maletas para irse a otra parte.

Carlo Ancelotti no dudó en el mes de agosto. Aconsejado por su preparador de porteros, Villiam Vecchi, el técnico italiano apostó por Diego López ante la sorpresa general. El diagnóstico del asistente fue tan contundente, que el entrenador madridista no tuvo más remedio que sentar al siempre intocable, menos en la última etapa de Mourinho. Durante la pretemporada, a ojos del veterano entrenador de porteros, fue muy evidente que Diego estaba muy por delante de Iker.

Titular en Champions y Copa del Rey -ocho encuentros en total-, Casillas inicia el que puede ser último tramo como jugador del Real Madrid. Un año después de que Mourinho le sentara ante la sorpresa general en La Rosaleda para hacer jugar a Adan, poco ha cambiado en la vida del capitán, que empieza a tener claro que emigrar al extranjero es la solución.

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La Premier League aparece en el horizonte como destino más atractivo para Casillas. Una competición del agrado del guardameta, con especial mención para el Arsenal. El equipo de Wenger, inmerso en la lucha por el título desde que arrancó la competición, es el que más atracción le produce al guardameta. Una entidad de prestigio que ha dado un paso al frente esta temporada y una ciudad de un enorme atractivo para vivir.

La número 15 puede ser la última temporada en la vida de Iker como jugador de la primera plantilla del Real Madrid. El Arsenal se presenta como una opción muy sólida para el portero madrileño, dado que el Manchester City tiene a Víctor Valdés como objetivo a pesar del compromiso -que se puede romper sin problemas- que cerró con el Mónaco.

Desde hace tiempo, Arsene Wenger planea incorporar un guardameta al plantel del Arsenal. El nombre de Casillas aparece en su lista y al jugador, según ha reconocido en privado, esta opción es de su agrado. En Londres se encontraría con Özil y dos internacionales españoles, como Cazorla y Monreal, un motivo más para apostar por esta opción. El polaco Szczesny no convence a Wenger, que quiere un guardameta de nivel superior para continuar haciendo crecer al Arsenal.

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Casillas es plenamente consciente de que si nada cambia, ser titular en el Mundial no lo va a tener nada claro. Su presencia en la lista se puede dar por segura, pero si Víctor Valdés continúa rindiendo al mismo nivel cuando vuelva tras su lesión, tendrá como mínimo las mismas opciones que el hasta ahora intocable Iker para ser el elegido por Del Bosque.

Acostumbrado a disputar con el Real Madrid entre 45 y 55 partidos todas las temporadas, la pasada ya se quedó en 29 y en la presente su presencia se remite a la Champions y la Copa. Mientras el equipo esté con vida en ambas competiciones, Iker tendrá trabajo a la vista; si van mal dadas y el Madrid queda eliminado en ambas, un bajonazo de Diego López será su única oportunidad de tener protagonismo.

“Lucho por ser titular y no bajo los brazos. Tengo que pelear por estar en cada partido”, dice un abatido Casillas, que añade que “la decisión es del entrenador. Mi misión es ejercitarme a tope, pero el que decide es otro. Estoy encantado y me gusta el Real Madrid, pero tengo que ver si juego o no”. Es evidente que detrás de esas palabras se esconde un sentimiento de pesar tras cambiar su rol de manera radical de un momento a otro. La puerta de salida está más cerca en la vida de Casillas...

Hace poco más de un mes reconoció abiertamente que no era plenamente feliz. El frío banquillo de los suplentes está ‘matando’ a un tipo que siempre fue el número 1. Iker Casillas dijo sentirse “triste por no jugar. Cuando no juegas tanto, disfrutas de cada partido en el que participas, pero lo haces de distinta manera”. Pasan las semanas y no cambia nada en su vida. La cuenta atrás ha comenzado para un portero que de no cambiar nada, en junio hará las maletas para irse a otra parte.

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