Tito y Pep, divorcio anunciado del dúo que devolvió la grandeza al Barcelona

El Barcelona vive tiempos revueltos. Desde hacía mucho tiempo no se recordaba una situación institucional tan convulsa en el conjunto azulgrana, curiosamente en el momento que se antojaba más tranquilo en las últimas temporadas. La marcha de José Mourinho del banquillo del Real Madrid hacía presagiar una época de tranquilidad, al menos dialéctica, para el conjunto del Camp Nou, pero nada más lejos de la realidad: Pep Guardiola es el nuevo 'enemigo'.

Las tres temporadas de Mourinho como entrenador del conjunto blanco han dado lugar a continuos enfrentamientos con el 'eterno rival'. Declaraciones cruzadas, mensajes crípticos, acusaciones veladas y ataques continuos han tenido lugar entre ambas partes en tres campañas en las que la tensión entre ambos clubes se cortaba con cuchillo. El adiós del portugués hacía presagiar que el fútbol español recuperaría la normalidad, pero no ha durado demasiado.

Sólo dos días después de comenzar el nuevo curso entre los dos 'grandes', la tensión se masca en el ambiente. Y no precisamente por culpa de Carlo Ancelotti, que ha llegado al Real Madrid para devolver una calma perdida desde la llegada del portugués. El Barcelona se ha encontrado al enemigo en casa, yTito Vilanova no ha tardado en salir al paso de las críticas del que fuera exitoso entrenador del conjunto azulgrana hace dos temporadas.

La 'rajada' de Guardiola en la sala de prensa del Bayern de Múnich fue completamente inesperada en 'Can Barça'. El técnico del conjunto bávaro estuvo cerca decinco minutos explicando algo que se notaba tenía guardado dentro desde hacía mucho tiempo: Pep aseguró que estaba muy dolido con la directiva del Barcelona, a la que acusó directamente de haber utilizado la enfermedad de Tito para hacer daño al técnico de Santpedor.

La respuesta desde el Barcelona no se hizo esperar, y el propio Sandro Rosell le respondía escasas horas después. Pero lo que nadie esperaba, quizá ni siquiera el propio Guardiola, era que Tito tomara la palabra. En su primera rueda de prensa del nuevo curso, el entrenador del Barça, con voz serena pero firme, dijo todo lo que tenía que decir sin levantar el tono: "Era mi amigo, pero no estuvo acertado. El que necesitaba ayuda era yo", aseguró.

Un ataque inesperado en el Barcelona

Pep Guardiola ha puesto el dedo en la llaga con un tema complicado, una situación que no ha gustado lo más mínimo en el entorno del Barcelona. Ni tan siquiera el mordaz estilo de Mourinho, incluso hiriente en ocasiones, le hizo tocar tan delicada enfermedad más que para mandar ánimos a Tito. Que, además, toda esta situación se haya disparado tras unas declaraciones del idolatrado Guardiola, ha hecho la herida más profunda en el Camp Nou.

El adiós de Mourinho del panorama deportivo español de Mourinnho no ha devuelto la tranquilidad al Barcelona. La desaparición del 'enemigo número uno' no ha servido para calmar las aguas en el Barcelona. La ruptura entre Tito Vilanova y Pep Guardiola es total. Pasado y presente ya no se dan la mano en el conjunto azulgrana: de eternos amigos a rivales irreconciliables. Al Barça se la abre un nuevo e inesperado frente con el que fuera su gran ídolo.