El Barcelona y su Masía señalados por 'robar' niños a otros equipos
FIFA y algunos equipos españoles como Celta y Valencia han dado un toque al Barcelona por su comportamiento en los fichajes que hace para su cantera.
FIFA y algunos equipos españoles como Celta y Valencia han dado un toque al Barcelona por su comportamiento en los fichajes que hace para su cantera. Algunos equipos han llegado a denunciar la situación ante el máximo organismo del fútbol mundial, lo que ha llevado a FIFA a retirar el pase de cinco jugadores y a los dos equipos anteriormente citados a solicitar a los dirigentes azulgrana que respeten a sus jugadores y el código que impera entre los equipos de la LFP y que la entidad azulgrana no parece respetar, tal y como está quedando demostrando.
La Masía ha producido cantidad y calidad en los últimos años. El método de trabajo ha llevado a la cantera azulgrana a producir jugadores con talento y a que muchos de ellos aparezcan por el primer equipo, llevando al Barcelona a las conquistas más altas. Nadie pone en duda del éxito de la gestión, pero en las últimas semanas han aparecido problemas que señalan y ponen en duda la labor de captación del Barcelona.
Primero fue con el coreano Lee Seung Woo, para después recibir la prohibición de alinear a cuatro canteranos más de diferentes nacionalidades. FIFA se lo ha prohibido tras recibir denuncias de distintas federaciones implicadas en el tema. Después fueron los también coreanos Paik Seung-Ho, Jang Gyeolhee (Cadete B), el francés Theo Chendri (Cadete A), el nigeriano-holandés Bobby Adekanye (Infantil A) y el camerunés Patrice Sousia (Infantil A). FIFA, debido a denuncias interpuestas por dos federaciones, pone en duda la manera en la que estos jugadores llegaron a La Masía.
Celta y Valencia son los clubes españoles que más han alzado la voz en contra del proceder del Valencia. En el caso del equipo gallego la indignación llegó cuando los dirigentes azulgrana invitaron a Barcelona a los padres del internacional juvenil Yelco, cuando estaba negociando con el Celta la renovación. El movimiento indignó a los dirigentes gallegos, que pidieron al Barcelona respeto hacia sus jóvenes jugadores.
El Valencia ha sido el otro equipo que se sintió perjudicado por el movimiento hecho y que terminó con dos alevines en La Masía (Enric y Abel). Manuel Llorente llamó personalmente a Sandro Rosell para que terminara con estos fichajes que llegan a través de ofrecimiento de trabajo a los padres y que se vienen repitiendo en los últimos años. El Málaga también se quejó de las negociaciones mantenidas a espalda de sus dirigentes para el fichaje de Brahim. La respuesta azulgrana en todos los casos ha sido siempre la misma y hace referencia a que su conducta respeta las normas establecidas y que, además, da a los chavales una completa formación tanto en lo deportivo como en lo académico, algo que no comparten los otros equipos implicados.
La clave de los movimientos que realiza el Barcelona y otros muchos equipos está en el artículo 19 del reglamento de FIFA. El citado artículo indica que "las transferencias internacionales se permiten sólo cuando el jugador alcanza la edad de 18 años, con excepciones si los padres cambian de domicilio a un nuevo país por razones que nada tienen que ver con el fútbol; transferencias dentro de la Unión Europea si el jugador tiene entre 16 y 18 años y si el jugador vive en su hogar a una distancia menor de 50 km de la frontera, y el club de la asociación vecina está también a una distancia menor de 50 km de la misma frontera”. Las denuncias versas sobre los supuestos cambios de domicilio, ya que al parecer los equipos que han presentado la dimisión han demostrado que el Barcelona es el que está detrás de esos 'nuevos' trabajos de los padres.
El recurso realizado por la entidad azulgrana habla de la educación que da a los chavales, tal y como hemos dicho antes, y del derecho que tienen los jóvenes en la Unión Europea a estudiar donde quiera siempre bajo el cuidado de un tutor, algo que no sucede con el fútbol. El problema con el que se está encontrando el Barcelona es que repite en el tiempo y en la forma sus actuaciones y hay más de un equipo esperando para actuar contra sus intereses.
Lo cierto es que La Masía se ha ido poblando de jugadores extranjeros. El mejor ejemplo es el juvenil A en el que figuran siete jugadores nacidos más allá de la frontera española o los cuatro del juvenil B, los cinco del cadete A o los cinco del cadete B.
FIFA y algunos equipos españoles como Celta y Valencia han dado un toque al Barcelona por su comportamiento en los fichajes que hace para su cantera. Algunos equipos han llegado a denunciar la situación ante el máximo organismo del fútbol mundial, lo que ha llevado a FIFA a retirar el pase de cinco jugadores y a los dos equipos anteriormente citados a solicitar a los dirigentes azulgrana que respeten a sus jugadores y el código que impera entre los equipos de la LFP y que la entidad azulgrana no parece respetar, tal y como está quedando demostrando.