Busto Arsizio declara ciudadano honorífico a Boateng tras los insultos racistas

El nuevo y último capítulo racista en el mundo del fútbol parece cerrarse con la coherencia y la sensibilidad que este tipo de casos requiere. Tras el bochornoso incidente de este jueves en el partido amistoso entre el AC Milan y el Pro Patria, donde una minoría de aficionados profirió insultos racistas en contra de los jugadores de color del conjunto rossonero, la primera autoridad municipal de la localidad de la provincia de Varese (norte de Italia) ha tomado la decisión de nombrar a Kevin Prince Boateng ciudadano honorífico del municipio lombardo.

El delantero ghanés, junto a sus compañeros Niang, Emanuelson y Muntari, soportó multitud de improperios en su contra hasta que tomó la decisión de abandonar el terreno de juego, actitud que fue respaldada por el resto del equipo y el cuerpo técnico milanistas. En defensa del grueso de la hinchada del Pro Patria, hay que indicar que la gran mayoría presente en el estadio aplaudió la acción del jugador. Incluso, el medio de comunicación local que retransmitía el encuentro afirmó que era “imposible continuar con el partido” en esas condiciones, por la actitud de “unos idiotas”.

 

A pesar de todo lo sucedido, el Milan aseguró que volverá a disputar su partido en Busto Arsizio. Opinan desde la entidad rossonera que no todos los aficionados de este equipo deben pagar por culpa de un grupo de ultras que no sabe comportarse. Así, y aún con la fecha por confirmar, Milan y Pro Patria concluirán este partido amistoso que dio comienzo el jueves.

La decisión de Gianluigi Farioli, alcalde de Busto Arsizio, cierra así un capítulo desagradable, refuerza la lucha contra el racismo que el fútbol viene llevando a cabo durante tantos años y reafirma la voluntad y el comportamiento de la gran mayoría de aficionados, no sólo del Pro Patria, sino del balompié en general para acabar con esta lacra. El respeto y la convivencia vuelven a imponerse a la exclusión y la intolerancia.