Bojan, el talento perdido del Barcelona y la enésima esperanza del Milan

El mismo día en el que cumplía 22 años, Bojan Krkic añadía un nuevo nivel a su expediente futbolístico. Después de deslumbrar en el Barcelona, su fútbol fue a parar a Roma de la mano de Luis Enrique y ahora aumenta su aventura italiana en el Milan, un equipo que necesita una reforma urgente. Este martes, como regalo de cumpleaños, se formalizaba la cesión de Bojan al equipo ‘rossonero’ en una operación a tres bandas entre los dos equipos italianos y el Barcelona después de que equipos como el Málaga o el Feyernood se interesaran por un jugador que un día se erigió como la gran esperanza del Barcelona, un equipo donde su chispa se fue apagando poco a poco. En Italia vive una segunda juventud y ahora tiene un reto en el que puede demostrar que su talento no se quedó en el banquillo del Camp Nou: Allegri le ha elegido para liderar a un Milan en horas bajas.

Bojan Krkic se cansó de romper records en el Barcelona. Su carrera en las categorías inferiores fue fulminante y allí dejó su particular sello marcando más de 800 goles. En un abrir y cerrar de ojos, el menudo delantero fue quemando etapas rompiendo el curso normal del ascenso desde la cantera hasta el primer equipo con el que debutó en abril de 2007. Bojan no tardó en demostrar su talento y se convirtió en el tercer jugador más joven de la historia azulgrana que vestía la camiseta del Barcelona y también fue el futbolista más prematuro a la hora de marcar. Con semejante carta de presentación, Bojan fue la única nota de color y positiva en una temporada negra para el Barcelona que tuvo que hacer el pasillo de campeón al Real Madrid en el Santiago Bernabéu después de ver al equipo madridista proclamarse campeón holgadamente.

Un año después todo cambió. La llegada de Pep Guardiola al banquillo del Camp Nou revolucionó el fútbol azulgrana. Bojan era consciente de que Messi era el dueño del ataque culé y siempre afirmó que estaba en el Barcelona para aprender pero el canterano veía como otros jugadores nacidos en La Masía como Pedro o Busquets pasaban por delante de él hasta asentarse en el once titular o disfrutaban de más minutos que él. A pesar de renovar primero hasta 2013 y después hasta 2015 con una cláusula de rescisión que aumentó desde los 80 a los 100 millones de euros, Bojan se había convertido en el último delantero y arropado por la ayuda y los consejos de Henry aguantó hasta tres temporadas en las que cumplió cuando Guardiola le concedió una oportunidad y cuando las lesiones se lo permitieron: en la temporada 2008/2009 firmó un total de 10 goles, una cifra que superó la siguiente campaña (11) a pesar de estar parado debido a una lesión; en su último curso como jugador del Barcelona su cuenta goleadora se redujo a 7 dianas.

De Barcelona a Roma

En aquel momento la salida de Bojan era un secreto a voces y en julio del año pasado se hizo oficial su fichaje por la Roma. Luis Enrique le quería en su proyecto y el joven delantero no se lo pensó y cambió Barcelona por la capital de Italia no sin antes dejar claro que el equipo que le formó como futbolista había sido injusto con él. Bojan aseguró que se iba del equipo azulgrana dolido por la falta de oportunidades y de confianza de Guardiola con el que el delantero no estaba de acuerdo en algunos aspectos. En el traspaso la Roma pagó 12 millones y se incluyó una cláusula en la que el Barcelona se veía obligado a repescar al jugador de cara a la temporada 2012/2013 algo que no sucederá porque la Roma ha cedido a Bojan al Milan y aunque Guardiola dijo en su día que el viaje del delantero era de ida y vuelta y el protagonista de la historia afirmó que hasta que Pep no saliese del Camp Nou, él no volvería, parece que de momento ese movimiento no se hará realidad.

Un Milan en horas bajas