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Mundial de Brasil 2014: el orgullo de un país, ¿la vergüenza del resto del 'Planeta Fútbol'?
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LAS OBRAS DE MEJORA SÓLO HAN EMPEZADO EN 9 DE LOS 49 PLANES PREVISTOS

Mundial de Brasil 2014: el orgullo de un país, ¿la vergüenza del resto del 'Planeta Fútbol'?

Si algún país a lo largo y ancho del 'Planeta Fútbol' sabe lo que significa un Mundial ese es, sin duda, Brasil. La 'verde-amarela' puede presumir

Foto: Mundial de Brasil 2014: el orgullo de un país, ¿la vergüenza del resto del 'Planeta Fútbol'?
Mundial de Brasil 2014: el orgullo de un país, ¿la vergüenza del resto del 'Planeta Fútbol'?

Si algún país a lo largo y ancho del 'Planeta Fútbol' sabe lo que significa un Mundial ese es, sin duda, Brasil. La 'verde-amarela' puede presumir de ser el único combinado que ha conseguido levantar cinco campeonatos a lo largo de su historia y, en 2014, después de más de 64 años, albergará de nuevo la Copa del Mundo. Sin embargo, las críticas no se han hecho esperar: el escaso avance de la construcción de las infraestructuras se ha convertido en el gran problema de la sede del próximo Mundial.

Su grandeza sobre el terreno de juego ha dado lugar a que en Brasil se viva el fútbol de manera muy especial. Por ello, la organización del Mundial de 2014 dentro de sus fronteras -la que será su segunda vez, tras el celebrado en 1950- está señalada en el calendario como una fecha a tener más que en cuenta. Por poner un ejemplo de la pasión que levanta, en el Mundial de 2006 y de 2010, el Banco Central de Brasil anunció que se cerraba el mercado durante las horas en las que su selección disputaba los encuentros del torneo.

Ahora, se convertirá en la nueva sede para 2014, pero el proyecto no marcha por el camino esperado. Brasil sabe que para poder potenciar la organización del evento debe mejorar en determinados aspectos, como son la disminución de la violencia en sus calles y el desarrollo de una red de transportes para facilitar el desplazamiento de los aficionados, de los que se calcula que, además de los hinchas del propio país, se desplazarán unos 600.000 extranjeros.

Pocos y escasos avances

En cuanto a la delicuencia, los datos de las últimas fechas reflejan que los niveles se mantienen con respecto a 2007, fecha en la que se nombró a Brasil como sede para 2014. Con a los  respecto a los transportes, la situación se ha estancado por completo: el país sudamericano anunció que llevaría a cabo 49 planes para la mejora de infraestructura, de los cuales sólo se han comenzado a llevar a cabo nueve, y se desconoce si llegarán a tiempo para la cita mundialista.

Además, la reforma del aeropuerto de Brasilia también marcha retrasada y en vista de la imposibilidad de cumplir los plazos ya se valora la posibilidad de llevar a cabo soluciones temporales. Si bien en un principio, la planificación de la por entonces candidatura brasileña daba mucha importancia a su mejora del transporte para llegar a convertirse en sede, ahora, una vez logrado el objetivo, parece haber pasado a un segundo plano.

 

Proponen declarar como festivos los días de partido

La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, aseguró que el transporte no puede ser considerado como una vía fundamental para considerar si el torneo tendrá éxito o no. Pero lo cierto es que desde su gobierno se están buscando soluciones a esta problemática. La ministra de Planificación, Miriam Belchior, ha sugerido que para evitar problemas de tráfico se declaren como días festivos aquellos en los que haya partido.

A poco más de dos años vista, Brasil sabe que debe darse excesiva prisa si quiere cumplir los plazos para albergar un Mundial que dé la talla. La pentacampeona, uno de los países que con más orgullo vive los títulos mundialistas, sabe que puede fracasar estrepitosamente en su organización, por lo que deberá trabajar contrarreloj para solucionar los escasos avances. De lo contrario, puede convertirse en uno de los peores campeonatos del mundo, organizativamente hablando.

 

De ser así, significaría un gran revés para Brasil, que es, sin duda, una de las selecciones de referencia en el fútbol. Además de haber conseguido cinco Mundiales (1958, 1962, 1970, 1994 y 2002), la 'seleçao' no se ha perdido nunca una fase final de estos campeonatos, siendo la única que posee este logro. Jugadores de la talla de Pelé, Vava, Didí, Garrincha, Zico, Rivelino, Sócrates, Romario o Ronaldo han vestido la camiseta del combinado brasileño, convirtiéndolo en la selección más grande de todos los tiempos.

Si algún país a lo largo y ancho del 'Planeta Fútbol' sabe lo que significa un Mundial ese es, sin duda, Brasil. La 'verde-amarela' puede presumir de ser el único combinado que ha conseguido levantar cinco campeonatos a lo largo de su historia y, en 2014, después de más de 64 años, albergará de nuevo la Copa del Mundo. Sin embargo, las críticas no se han hecho esperar: el escaso avance de la construcción de las infraestructuras se ha convertido en el gran problema de la sede del próximo Mundial.