Adebayor, el hombre feliz que vio la muerte muy de cerca

Enmanuel Adebayor (26 años) se ha convertido en la imagen del Real Madrid. Desde que llegó es el único jugador que se ha sentado delante de los medios de comunicáción para hablar. Lo hizo el día de su presentación, en rueda de prensa posterior y ayer en un acto de Adidas. Sólo habla el africano, el resto de madridistas, secuestrados. Incluso, y por si había alguna duda, el africano ocupa la portada de la web blanca. Desde el 30 de diciembre, ningún jugador se sienta en la sala de prensa de Valdebebas para hablar ante los medios y, no lo olviden, para comunicarse con los seguidores madridistas. Curiosa política.

 

Adebayor es un hombre feliz. Se le nota. No para de sonreir y no lo hace porque juegue en el Real Madrid o porque todo le va de cara desde el momento en el que apareció por España. Dice que tiene muchos motivos para ello. El primero es el que hace referencia a su modo de vida. "Cualquier africano que vive en Europa ya tiene motivos para ser feliz. Por eso sonrío, por eso me muestro contento. No tengo motivos para estar de otra manera. Nací feliz", afirma el hombre que se calza las botas más ligeras del mercado, las Adidas F-50. Pesan 150 gramos y  las presentó en público en la mañana del miércoles.

 

El hoy delantero del Real Madrid vivió hace poco más de un año un episodio muy duro, de esos que te marcan para toda la vida. El autobús de la selección de Togo fue tiroteado a su llegada a Angola para la disputa de la Copa América. "Sigo escuchando los disparos. Es algo que no se me ha olvidado. Todavía me asusto cuando  de repente suena algo inesperado. A mi cabeza vienen las escenas que vivimos. Los disparos no terminaban nunca y ver a tus compañeros muertos e incuso heridos es algo que nunca podrá desaparecer de mi cabeza. Estuvieron disparándonos durante 30 minutos y lo único que podíamos hacer era pedirle a Dios que nos mantuviera con vida. Y lo hizo. Ví cómo uno de mis compañeros caía. Tenía un balazo en el cuerpo. Estaba llorando y a punto de perder el conocimiento. Veíamos la muerte cara a cara. Nunca pensé que tendría que pasar por una experiencia como esa. Y todavía no sabemos por qué ocurrió".

 

El ex del Manchester City reconoce que todavía no ha superado lo sucedido. "Estoy contento por estar con vida, de estar aquí. Por suerte tengo dos piernas y puedo jugar al fútbol. A veces, cuando escucho ruidos fuertes, creo que son balas. Ya lo he superado y ahora estoy aquí para trabajar", comenta tras relatar cómo siete miembros de la selección de Togo resultaron heridos, dos de los cuales (conductor del autobús y jefe de prensa) fallecieron.

 

Podría quedarse por 15 millones

 

Adebayor llegó al Real Madrid en calidad de temporero. Por delante tiene cuatro meses para ganarse la confianza de Florentino Pérez y compañía. Lo mejor para él es que ha llegado respaldado por Mourinho y dado el poder deportivo que ha adquirido el portugués, todo hace indicar que podría continuar en el club blanco a cambio de 15 milllones de euros. El togolés huye de cualquier tipo de polémica y, sobre todo, de una batalla con Benzema. "No he venido a buscarme enemigos ni a molestar a nadie. Llevo dos goles, pero no sé cuántos marcaré. Lo que quiero es que el Real Madrid gane la Champions y a difrutar de la oportunidad de jugar en este club, de vivir en esta ciudad, de disfrutar del sol y de la comida de aquí. No he hablado con Benzema del tema de la titularidad de uno u otro. Hablo mucho con él, pero no de eso. Por cierto, también hablo mucho con Iker y con Sergio Ramos, en inglés por supuesto".

 

Lo que sí parece tener claro el delantero es dónde está y lo que representa el Real Madrid. Al menos respeta los símbolos. "Raúl es historia del fútbol y no me extraña que siga marcando goles. Es de los mejores y siempre le he admirado. Cuando jugamos con el Mónaco en Champions ante el Real Madrid, el pedí a Morientes que me consiguiera la camiseta de Raúl. Me la llevé y ahora está colgada en mi casa en Togo. Le admiro. Lo ha sido todo en el fútbol".