Mutu: de la cocaína al estimulante dietético

“Fue un error que no se debe repetir”. Eso dijo Adrian Mutu a los aficionados de la Juve durante su presentación en 2005 después de permanecer siete meses inactivo tras dar positivo por cocaína mientras era jugador del Chelsea (2004). Ayer, como jugador de la Fiorentina, volvió a dar positivo. Esta vez no fue por cocaína, sino por sibutramina, una sustancia que sirve para bajar de peso, que anula los efectos del hambre y estimula al cuerpo para que produzca un mayor gasto de energía.

 

Si cuando era jugador de Abrahimovic fue suspendido de la práctica deportiva durante siete meses por la Federación de Inglaterra, y la FIFA le impuso una multa de doce millones de euros que debía abonar al club inglés después de que éste le expulsara, ahora, por reincidencia, en Italia, con el CONI como juez, que es un organismo sumamente estricto y meticuloso contra el dopaje, le podrían caer de uno a cuatro años de suspensión.

Mutu es actualmente jugador de la Fiorentina. La afición italiana le quiere, sobre todo porque gracias a él pudieron olvidar la marcha de Luca Toni al Bayern de Munich. Además, en este mercado invernal, rechazó una oferta del Manchester City, asegurando que no le importaba “el dinero” porque prefería seguir en la ‘Fiore’.

Los seguidores del conjunto italiano, incluso, la directiva, no le odiarán por irse al fútbol inglés como pudo haber sido, sino por infringir la ley y dejar al equipo cojo, cuando además, era considerado uno de los mejores jugadores de la plantilla, de los más técnicos y que además tenían gol.

Y todo por una ‘dieta’, por intentar bajar de peso, porque no se antoja posible que una sustancia como la que consumió mejore considerablemente su rendimiento. Cuando fue presentado con la Juve, y los periodistas le preguntaron por el positivo de cocaína, Mutu respondió: “Estoy contento, porque finalmente mi vida tiene un sentido tras un mal periodo”.

Ahora, después de volver a dar positivo, debe sentirse triste. Y lo estará más cuando conozca la sanción económica que le impondrán, ya sea la FIFA o su propio club, o ambos. El jugador puede apelar, pero se antoja complicado que el Comité Olímpico Nacional de Italia, teniendo la muestra de metabolitos de sibutramina, recule.

Curiosamente, el día en el que le practicaron el control, marcó un gol y la Fiorentina ganó 2-1 al Bari. Adrian Mutu tiene 31 años, pesa 74 kilos, es delantero, ha marcado once goles en total en todas las competiciones. Ha jugado para el Hellas Verona, Parma, Chelsea, Juventus y Fiorentina. En Rumania es considerado como un héroe, aunque posiblemente dentro de poco quede en el olvido, siempre y cuando el CONI le aplique la sanción máxima.