La pulla de Lewis Hamilton a Fernando Alonso enmascara (pero no borra) un problema serio

Lewis Hamilton publicó un vídeo en Instagram tras el Gran Premio de Singapur. Ahí aludió al desahogo de Fernando Alonso por la radio al entrar en línea de meta. Reacción inhabitual en el británico, y tampoco son frecuentes las puyas entre los pilotos de Fórmula 1 en las redes. ¿Producto de sus circunstancias personales y el difícil gran premio que sufrieron los dos pilotos de Ferrari? El equipo italiano tocó fondo en Marina Bay.

Hamilton también ha abierto un melón que podría verse obligado a catar en el futuro si Alonso u otro piloto le recogieran el guante porque, además, ha ofrecido algunas escenas y oportunidades esta temporada para el mismo juego. Una acción que camina a medias entre la cariñosa broma entre colegas o pulla a un rival histórico.

"18 años..."

Furioso por cómo Hamilton cortó las curvas en las dos últimas vueltas al quedarse sin frenos, Alonso repetía ese "I cannot fucking believe it! / ¡No puedo put… creerlo!" para denunciar que el comportamiento del británico no fuera castigado, aunque posteriormente los comisarios entraron en el asunto y sí terminó sancionado.

Cogiendo esa expresión de Alonso, Hamilton reunía fragmentos de una comedia británica, One Foot in the Grave, donde el protagonista repite una y otra vez esa exclamación en situaciones grotescas: “I cannot believe it! / ¡No lo puedo creer!". Además, Hamilton añadía a su vídeo: "18 años", los que lleva compitiendo con Alonso en la Fórmula 1. Tradicionalmente respetuoso con sus colegas y poco amigo de polemizar, Hamilton parecía querer parodiar o ridiculizar al asturiano.

No habían sido momentos fáciles para Lewis... Días antes de Singapur, el británico perdió a su perro Roscoe. "Personalmente, he recibido una enorme cantidad de apoyo y ha sido abrumador, así que permitirte recibirlo, permitirte espacio para llorar, para recordarte a ti mismo que cada día va a mejorar un poco”, explicaba para reflexionar sobre el proceso de duelo que estaba atravesando. En la Fórmula 1 recibió una cálida acogida.

Aun así, Hamilton obvió dedicar un buen resultado en Singapur a la memoria de su mascota, como muchos seguidores le sugerían, centrándose en el equipo y los aficionados. No hubiera podido elegir peor fin de semana en caso de lo primero, porque Ferrari protagonizó una de sus actuaciones más deprimentes de 2025.

El desastre de Ferrari

La segunda victoria de Mercedes resaltaba el retroceso del equipo italiano en 2025. Hay que remontarse a la última victoria lograda por Carlos Sainz en México 2024. Como espejo, Red Bull ha logrado cuatro victorias este año tras su crisis de rendimiento, incluida la de Monza, donde los monoplazas italianos ni siquiera olieron el podio. Por no hablar de la resurrección y dominio de McLaren en estos dos últimos años. Ferrari ha perdido la rueda de sus rivales.

Con Hamilton, sexto y séptimo el monegasco en la parrilla, empezó el sábado con su opinión sobre el SF25. “El coche ha sido increíblemente difícil de conducir desde el principio”, denunciaba. El domingo llegaría lo peor. "Desde la vuelta 8, todo se trató de controlar los frenos. Todos tienen que hacerlo hasta cierto punto en una pista como esta. Pero nosotros estábamos en la peor situación, y eso lo hace extremadamente difícil. Toda nuestra carrera fue muy complicada".

Charles Leclerc se mostró muy duro al terminar, rompiendo la etiqueta interna de cuestionar a Ferrari. “En este momento, sentimos que somos una especie de pasajeros del coche y no podemos sacar mucho más de ello”, lanzaba a los cuatro vientos. El monegasco ofrece crecientes muestras de frustración y desánimo, y en Marina Bay ya no se cortó.

Leclerc puso blanco sobre negro como pocas veces desde que accedió a Ferrari. "Dimos pasos adelante (en evoluciones) pero los demás también, así que la diferencia se mantuvo prácticamente igual, y luego Red Bull dio dos pasos adelante en una temporada. Ahora Mercedes parece haber dado este paso adelante y somos los únicos que no encontramos esa solución".

Leclerc, frustrado, no se corta

"Siento mucho lo que ha pasado todo el equipo, desde catering hasta marketing, pasando por los chicos del garaje y los ingenieros que vienen cada día”, se lamentaba Leclerc, confirmando la desorientación total de su equipo. “Este fin de semana lo dieron todo, pero el coche que tenemos, lamentablemente, no está al nivel de los que tenemos delante. Sobre todo porque han mejorado y no podemos igualarlos”.

Fichado Lewis Hamilton con cantidades astronómicas (aún sin podio vestido de rojo), renovado Fred Vasseur, ya incorporado en 2025 el nuevo director técnico Loic Serra, Ferrari repite el patrón. No importan sus medios, sus fichajes, la pasión de sus integrantes, el equipo italiano no solo ha perdido terreno en 2025, sino que podría terminar sin ninguna victoria, cuando el pasado año luchó por el título de Constructores hasta la última carrera con McLaren.

Fernando no es buen enemigo y no olvida

El pasado Gran Premio se vivió una de esas batallas que creíamos olvidadas entre dos viejos enemigos. Con el agravante de que Hamilton perdió totalmente sus frenos en las dos últimas vueltas, por lo que Alonso le recuperaba 47 segundos en ellas. Sin embargo, no pudo adelantarle porque el británico aceleró en las dos curvas finales para entrar en meta tras cortar repetidas veces el circuito, lo que propició la furiosa queja de Alonso. Era una acción ilegal a todas luces.

¿Reaccionó Hamilton exasperado ante la frustración por el desenlace en Marina Bay, y aún sensible por la pérdida de su mascota? "Después de una semana difícil, me siento bien de estar en casa", publicaba tras el gran premio. "Tuve tiempo para reflexionar sobre mi viaje desde Singapur, y mi principal emoción es la gratitud. El apoyo y el amor que he sentido desde la pérdida de Roscoe han sido un poderoso recordatorio de que, incluso cuando las cosas a veces parecen oscuras, hay mucho bien en el mundo. Solo hay que buscarlo".

“También estoy viendo lo positivo en la pista", explicaba sobre Ferrari y su complicada situación. "Los titulares de los medios solo cuentan una historia: cuando no hacemos las cosas del todo bien o cuando las cosas no salen como queremos. Pero en lo que me he centrado estos últimos meses es en la otra historia. En cómo responde este equipo cuando las cosas van mal. Cómo nos levantamos y volvemos a la carga". De momento, sin éxito y como Leclerc avisaba, sin visos de arreglo hasta el final de temporada.

A pesar de tan constructivo, Hamilton tuvo tiempo para el mensaje al asturiano. Es de suponer que después de 18 años ya conoce a su rival, pero debería saber que Fernando Alonso no es ni buen enemigo, ni tampoco olvida. Ya lo vivió.