Cuando Fernando Alonso entra en modo depredador es porque sabe que hay máquina

La racha de podios consecutivos que venía encadenando Fernando Alonso se cortó en la cuarta carrera de la temporada. El sábado, después de una jornada difícil, al acabar sexto en la carrera al sprint, el asturiano declaraba que un buen puesto en esas circunstancias sería acabar quinto. La mejora de una plaza sobre el pronóstico deja a las claras que la pieza de caza cobrada en Bakú está por encima de las expectativas. "Este fin de semana no éramos tan rápidos como habitualmente, y, aun así, acabamos a un segundo del podio". Así resumía el piloto de Aston, de la mejor manera posible, las razones para marcharse contento en dirección a Miami, la siguiente cita del calendario.

En estos momentos, Fernando es tercero en la clasificación del mundial de pilotos: 33 puntos por detrás del líder, Max Verstappen. Un bagaje excelente y una situación no vivida por el bicampeón mundial como mínimo desde hace una década. La carrera quedó sentenciada a su suerte en las primeras 15 vueltas, con la neutralización del pelotón y los primeros cambios de neumático. Una vez recuperadas las posiciones a Lewis Hamilton y Carlos Sainz, el asturiano se quedó en cuarta posición detrás de Charles Leclerc. El podio volvía a ser posible, pero, entre que el de Ferrari estuvo excelente y la falta de velocidad punta del Aston Martin, no hubo forma de conseguirlo.

Buen ritmo de carrera

"Estoy bastante feliz. Conseguimos tener ritmo al final en el sprint (del sábado) y demostramos que éramos aún más fuertes hoy. Fue un fin de semana complicado para nosotros y Ferrari tuvo, sin embargo, un fin de semana perfecto con dos pole positions y un coche superrápido. Creo que tenemos ser felices en general", explicó Alonso. No hay que olvidar que, aparte de las carencias del coche mostradas durante todo el fin de semana a causa de la recta más larga del calendario, la elección de neumáticos de Pirelli para este Gran Premio tampoco ayudó. El bajo ritmo de degradación de los Aston Martin, uno de sus tradicionales puntos fuertes, no pudo aprovecharse.

Pirelli quizá pecó de conservadurismo, porque pudo comprobarse que el neumático, de compuesto duro, tenía durabilidad sobrada no solamente para hacer dos terceras partes del Gran Premio, sino incluso la carrera completa si hubiera sido preciso. "Creo que Ferrari tuvo mucha suerte, porque en la primera parte (de la carrera) estaban sufriendo con los neumáticos y luego con los duros no tuvieron ninguna degradación, que es justo nuestro punto más fuerte en este momento", recalcaba Fernando. Los Red Bull siguen claramente por encima del resto, pero efectivamente es un dato muy alentador estar tan cerca de un coche que al menos a una vuelta demostró ser tan rápido o más que el dominador en este comienzo de temporada.

Precisamente con uno de los dos Ferrari, concretamente con el de Carlos Sainz, se dio una de las polémicas más significativas del fin de semana. Al igual que el sábado en la carrera al sprint, Carlos se defendió con mucha dureza de los intentos de adelantamiento de Fernando, durante el Gran Premio cedió su posición a su compatriota de forma totalmente limpia. Algo es evidente que ha debido de pasar en esta historia, porque el de Oviedo no escondió cierto malestar cuando tuvo que comparecer ante los micrófonos de DAZN, la emisora propietaria de la retransmisión de la Fórmula 1 para España.

Todo aclarado con Sainz

Sorprende, desde luego, que Fernando dijera mostrarse muy satisfecho y al mismo tiempo mantuviera su resquemor por acciones pertenecientes al día anterior, pero tampoco debe sorprendernos. Cuando el asturiano se pone en modo depredador, esto tampoco es algo que nuevo en él. Más allá de que tenga razones o no para estar molesto con algo que quizá vayamos averiguando con el tiempo, lo revelador del asunto es que la intensidad del asturiano se agudiza cuando sale de caza sabedor de que tiene a su alcance a presas importantes.

Alonso quiso aclarar que su relación con Carlos Sainz no se ha roto y despejó cualquier duda. "Hemos hablado antes del himno nacional previo a la carrera y todo está bien. A veces estas cosas pasan. Cuando ves el vídeo era menos de lo que yo pensaba ayer, todo está bien". Es evidente que, por el muy cercano nivel de competitividad de los Ferrari y los Aston Martin, Sainz y Alonso van a encontrarse muy a menudo en pista. Por eso es bueno que, cada vez que haya los inevitables roces, puedan hablarlo entre ambos con franqueza y la cosa no vaya a mayores.

Cuando finalmente se le pidió al bicampeón mundial que hiciera pronóstico sobre cómo se ve para la carrera del próximo fin de semana en Miami, Fernando no quiso despertar demasiadas expectativas: "Creo que Miami va a ser algo diferente una vez más. Todo va a estar relacionado con el tipo de pista. Creo que Mercedes, Ferrari y Aston Martin estamos tan juntos en cuanto a rendimiento que cada fin de semana será diferente, haciendo que uno de los equipos esté un poco por delante de los demás dependiendo de las características de cada coche. Aún no sé si Miami será bueno para nosotros o no, pero, si hace calor como debería ser y hay mucha degradación, normalmente es buena noticia para nosotros". El depredador sabe que hay máquina y, donde esta no llegue..., tiene la confianza de que llegará él.