Carlos Sainz: "Sé dónde estoy con Ferrari, Leclerc y Binotto, en igualdad de condiciones"

Cuando Michael Jordan se enteró de que la Fórmula 1 llegaba a Miami, llamó inmediatamente a los organizadores y pidió el mejor 'Vip Lounge' (zona exclusiva) que hubiera disponible. Gran aficionado a la Fórmula 1, pagó casi un millón de dólares para él y sus invitados. Que la Fórmula 1 está ganando terreno es una realidad palpable. En el Gran Premio de Australia, se levantaron a las siete de la mañana casi medio millón de personas para seguir la cobertura de 'Dazn', multiplicando por cuatro las audiencias precedentes. En algunas de las carreras de la presente temporada, se han alcanzado picos de un millón de espectadores en un canal de pago.

No extrañará que el Gran Premio de España se llene hasta la bandera, como en los mejores tiempos de Fernando Alonso. Pero, ahora, con dos pilotos españoles. Uno de ellos, en Ferrari y con opciones para la victoria. Carlos Sainz tiene, así, la ocasión idónea para matar varios pájaros de un tiro. El de esa primera y elusiva victoria, el principal. "En Barcelona siempre he ido rápido, es donde he conseguido mis mejores resultados, siempre ha habido publico apoyándome... No sé si tiene algo que ver, pero siempre me ha ido bien aquí. Me apetece pensar que es una presión buena y una motivación que en el pasado me ha ido muy bien y que quiero aprovechar este fin de semana", anticipaba Sainz ante los medios españoles. Pero también puede disparar al pájaro de su posición respecto a Charles Leclerc y Ferrari.

"Hay un punto que vas con el subconsciente"

El asistente de Ferrari le entregó a Sainz la gorra antes de afrontar las entrevistas televisivas de la mañana. El español la rechazó y no salió en ninguna de ellas con la gorra oficial. Parece que no le gusta llevarla, pocas veces se le puede ver con ella. Ya desde esa primera hora del jueves con las televisiones y luego con la prensa española, Sainz se mostraba relajado ante un fin de semana de alta presión. "Hace diez años, soñaba con estar aquí y, ahora, corro con un Ferrari que puede ganar. Era más difícil lo primero (llegar a la F1) que lo segundo", decía en una de las entrevistas, consciente de la oportunidad de ganar el Gran Premio de España.

Porque si un circuito puede ayudar a Sainz a ello podría ser precisamente Montmeló. Sainz explicaba por qué. "Es uno de los circuitos donde el año pasado comencé a ir muy rápido con el coche. He estado mirando datos para ver por qué iba rápido, qué sensación me daba el coche, y voy a intentar buscar esa misma sensación ahora. Y luego también hay cosas que estoy intentando cambiar en mi estilo de pilotaje y que sé que no funcionan con este coche, cosas que tengo que olvidarme de hacer, automatismos que estoy intentando cancelar de mi software y que me pueden dar otras ventajas con este coche. No es un proceso fácil, estoy intentando hacerlo y puede ser un buen circuito para probarlo porque me lo conozco muy bien y sé lo que tengo que cambiar con este coche para ir rápido".

Sainz aún tiene que pensar antes de entrar en algunas curvas, cuando en realidad un piloto maneja con el subconsciente más que con la parte racional. El español usa más el volante que Leclerc, este con menores 'inputs' por estilo personal. Ese estilo de Sainz juega en contra de la naturaleza del F1-75. "A la que te pones al límite en una vuelta de clasificación o 66 vueltas en carrera, llega un punto en el que vas con el subconsciente, vas en modo automático. Es donde digo yo que hay coches que en tu piloto automático sabes que vas perfecto, porque el coche hace justo lo que necesitas. Y luego hay coches, como me pasó otros años, en los que te subes y haces tus automatismos, pero al monoplaza no le gustan. Te tienes que adaptar y cambiar, es algo que he hecho bien en el pasado, me he adaptado bien a todos los coches, pero este se me está presentando un poco más difícil de lo esperado. De hecho, lo empecé a notar aquí en los test de pretemporada aquí. Es parte de la vida de un piloto de carreras, siempre hay coches favoritos y coches que te cuestan un poco más".

"Ese poco duele"

Otro de los temas recurrentes ante este Gran Premio son las evoluciones de Ferrari respecto a Red Bull. Básicamente, el equipo italiano trae un nuevo alerón y fondo plano. "No os voy a decir lo que traemos ni la cantidad de tiempo por vuelta que nos debería dar, porque son cosas de equipo, pero puedes traer tres décimas... y si los demás también las traen, pues dónde estás. Entonces, hay que tener un poco de paciencia para ver como van los 'upgrades' en los libres y luego ver lo que pasa. A veces traes una mejora y puedes seguir sacándole partido, entendiéndola durante las restantes carreras".

¿Podría ayudar a Sainz esta evolución de Montmeló a terminar de coger por la mano al al F1-75? "Mi primera impresión es que sí, pero hasta que no las sienta y las pruebe no sabría decir, pero sí sé que van en la dirección correcta, en lo que yo creo que necesito, aunque igual me estoy equivocando. He estado luchando por las 'poles', no es mucho de lo que estamos hablando, es poco, pero ese poco duele porque es lo que no te permite estar en la lucha por la victoria o conseguir esa primera 'pole'. Fastidia, por no decir otra palabra. Es en lo que llevo trabajando estas primeras carreras y espero encontrar lo antes posible".

Por último, Sainz desechaba cualquier preocupación de que a corto plazo deba ya subordinarse a Leclerc. Las reglas del juego se establecieron antes de empezar el campeonato, como reconocía el español, y sabe cuál es su situación a día de hoy. "Sé las reglas que hay y cuándo potencialmente puede empezar a haber favoritismos u órdenes de equipo. Pero sé que en la sexta carrera, con diecisiete por delante, seguimos en igualdad de condiciones, y estamos en una posición donde yo creo que puede pasar cualquier cosa. Por lo tanto, sé cuáles son mis opciones y por dónde pasa la relación de equipo que tenemos Charles, Mattia y yo. Y por eso no estoy para nada preocupado".