"Puedo luchar por la victoria". Carlos Sainz echa el gancho a Leclerc y Red Bull

Había 21 vueltas por delante para aspirar a luchar por el Gran Premio de la Emilia-Romaña. Había que sobrevivir al siempre complicado embudo de la primera curva. Así, poco a poco, progresando sin forzar más de lo imprescindible, fueron cayendo sucesivamente Alonso, Magnussen, Ricciardo y finalmente Norris a poco del final. Objetivo cumplido para Carlos Sainz. Y lo más importante, logrado con sobriedad y sin fallo alguno. "Creo que hicimos el máximo hoy a tenor de como se desenvolvió hoy la carrera", explicó Carlos nada más bajarse del coche. "Yo sabía que tenía que ascender hasta la quinta o cuarta plaza y al acabar cuarto significa que estoy en el grupo para pelear el domingo en la carrera por todo. Creo que hice una sólida carrera y estoy listo para pelear en la carrera con cualquiera", afirmó el madrileño.

Preguntado si se sentía más cómodo en el coche a tenor de las dificultades que experimenta desde este inicio de temporada, Carlos afirmó que fallos como el del viernes demuestran que aún no tiene agarrado por la mano al 100% a su monoplaza, pero que cada vez se encuentra mejor. "Me alegra ver como desde fuera me dicen que me han visto hoy más cómodo, pero no estoy tan 'smooth operator' como me gustaría estar", afirmó bromeando el madrileño. Sin embargo, el objetivo se había logrado: salir junto con los dos Red Bull y su compañero de equipo, ofreciendo además a Ferrari mayores opciones estratégicas para la carrera. Al menos, Carlos Sainz podía respirar hoy más tranquilo.

El difícil coctel de neumáticos y lluvia

Respecto a las enseñanzas de la remontada y las opciones para la carrera, el piloto español reconocía que todo ayuda: "Es importante dar 20 vueltas constantes, sentir el comportamiento del coche en 'aire sucio', gestionar la degradación de los neumáticos que fue bastante alta, como pudimos ver, en el coche de mi compañero Leclerc, que sufrió más desgaste en el tren delantero que los RedBull". El desgaste de los neumáticos abre un escenario interesante. Es posible que monegasco y español lleven estrategias distintas, especialmente ante la posibilidad real de lluvia. Otra prueba de fuego para alejar fantasmas si consigue terminar sin errores en un escenario tan complejo como el que se presenta, tanto si se corre sobre mojado toda la prueba o una parte de la misma.

En principio, en cabeza partirán con el compuesto más blando si la pista seca al comienzo de la prueba. A partir de aquí, se decidirá si una o dos paradas, pero en la sprint la mayoría de los coches sufrían una caída importante de rendimiento a partir de la vuelta 15. La suavidad de conducción para arrancar esas dos o tres vueltas extras de vida resultará estratégicamente vital, lo que quizá podría favorecer algo más a Carlos que a su compañero de equipo Leclerc ante lo visto el sábado.

Sainz fue preguntado si sus problemas de adaptación derivaban de su particular estilo y, por tanto, necesitar cambiar su forma de conducir o que, por el contrario, se trata de simple tiempo de adaptación. "Es una mezcla de ambas, -recalcó el madrileño-. Por un lado, yo, como piloto tengo que adaptarme a técnicas y estilos a los que no estoy acostumbrado y, por otro lado, necesito algo más de tiempo de trabajo en las sesiones libres para poder probar diferentes cosas, pero no está siendo fácil".

Binotto, disculpa a Carlos pero también aviso

Su jefe, Mattia Binotto, coincide en el diagnóstico con Carlos, añadiendo quizá que debe dar también un cambio en cuanto a mentalidad. "No creo que haya problemas", -dijo Binotto-. "Ciertamente necesita adaptarse. Creo que ha cometido un par de errores que son importantes pero, sin embargo, creo que está mejorando, va cada vez más rápido y si miro su accidente de ayer, cuando conducía, realmente iba muy rápido. Y fue una pena, porque cuando se le fue el coche de las manos, creo que no era el momento adecuado para ir al límite, pero él lo sabe muy bien. Creo que es una cuestión de manejar la presión. Quizá por primera vez en su carrera tiene un coche ganador y simplemente necesita acostumbrarse a eso. Pero lo hará muy rápido porque sé lo inteligente y lo capaz que es para manejar la presión", concluyó el ingeniero suizo.

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No va a ser fácil doblegar a los RedBull en Imola, la casa de Ferrari, pero el primer gran premio italiano presenta una de esas oportunidades de oro únicas para que Sainz se gane el amor incondicional de los 'tifosi'. Desde la cuarta posición de la parrilla lograba meterse de nuevo en la pelea. Tras haber empezado el fin de semana torcido, con su gran remontada, ahora sin duda puede afirmar que 'hay carrera'.