"Estúpido idiota": la 'higa' de Verstappen a Hamilton al ir a por lana y salir trasquilado

No fue un simple pique, sino en duelo de pistolas entre los dos aspirantes al campeonato. Max Verstappen eligió el momento, y Lewis Hamilton recogió el guante. O al revés. La anécdota quedará como otro de los momentos que simbolizarán el duelo entre ambos en 2021. Y la tensión sigue creciendo. "!Estúpido idiota!". No resulta frecuente escuchar tales insultos acompañados de una peineta entre dos pilotos que se disputan un título.

Ocurrió en la segunda sesión de libres, en un incidente de machos alfa en el que Lewis Hamilton quiso educar a su rival tras un rifirrafe entre ambos antes de comenzar la vuelta lanzada. Una provocación recibió otra. Quien viera el incidente con ojos neutrales podría considerarlo una chiquillada innecesaria. Pero no cuando tiene lugar entre quienes ya han acabado fuera de la pista en dos ocasiones por no ceder ni un milímetro en el asfalto esta temporada. Verstappen quiso jugar con el campeón, pero recibió su misma medicina.

De repente ambos pilotos aparecieron emparejados al comienzo de la recta, y ninguno cedió hasta el final de la misma, cuando Lewis Hamilton, que iba por dentro, dejó sin espacio al holandés, con lo que frustró su vuelta rápida. Fue entonces cuando le dedicó una ‘higa’ y el insulto a su rival. Pero Verstappen estaba recibiendo la misma medicina que antes quiso haber dado a su rival.

Como el conductor por la derecha

Pierre Gasly y Lewis Hamilton iban preparando su vuelta rápida, con Verstappen por detrás del británico. Este quiso buscar espacio respecto al francés en la frenada de una de las curvas finales y dejó un pequeño espacio entre ellos. Pero el holandés aprovechó la oportunidad para colarse por dentro en la curva 15 y superar al Mercedes. Como en las autopistas cuando rodando por el carril de la izquierda detrás de otro coche, otro conductor se mete desde la derecha y por delante en el escaso hueco disponible. No había necesidad para ello. Porque luego sería Verstappen quien a su vez debía que ralentizar su ritmo en la misma medida que Hamilton respecto a Gasly. Una pequeña ‘chulería’ que Hamilton no iba a dejar pasar.

Porque quizás el holandés no esperaba que Hamilton se iba a pegar a su estela en vez de dejar espacio a respecto al Red Bull. Verstappen se colocó en medio de la pista para afrontar la primera curva y ganar velocidad para comenzar su vuelta rápida, pero no contaba con el británico le hiciera una apurada de frenada propia de un duelo en carrera antes de entrar en la recta.

A continuación Hamilton abrió la trazada para desplazar fuera de la pista a Verstappen quien, encorajinado, siguió acelerando para ganar velocidad en la recta. Pero también Hamilton, quien incluso pegó su monoplaza al del holandés en una maniobra de clara intención intimidatoria. El conductor al que antes le había vacilado quien le adelantaba por la derecha ahora devolvía la maniobra. Ambos siguieron emparejados hasta que el británico dejó sin espacio a su rival, que perdió la posibilidad de realizar su vuelta lanzada.

"No entiendo qué ocurrió allí"

Semejante duelo resulta totalmente inusual en unos entrenamientos libres. A todas luces se trataba de un nuevo episodio para medir fuerzas y marcar territorio entre Hamilton y Verstappen. Este no necesitaba la maniobra que realizó previamente y Hamilton decidió que no iba a dejarla pasar. Como en Silverstone o Monza, psicológicamente ninguno iba a dejar que el otro le achantara o le tomara la medida. Como también en Austin. Si Verstappen había querido humillar a Hamilton se tuvo que tragar su jugada.

"Estábamos preparándonos para nuestras vueltas, así que no entiendo que ocurrió allí", contestaba el holandés al ser preguntando al respecto. Pero debía ser perfectamente consciente de lo que había ocurrido momentos antes, y que la maniobra de Hamilton respondía a la anterior suya, que no fue ni correcta ni necesaria. La reacción desairada de Verstappen, su frustración, ese dedo en alto y el insulto a su rival, demostraba quién había ganado y quién perdido. No está el horno para bollos en esta recta final de la lucha por el título. ¿Y si ambos salieran en primera línea este domingo?