George Russell, o cómo enterarte de que suples a Lewis Hamilton sentado en el baño
El piloto británico, que ocupará el puesto de Lewis Hamilton este fin de semana, ha contado algunos detalles de su frenético fichaje, que incluía las negociaciones con Williams
“Estaba en el baño en ese momento, lo cual fue un poco incómodo. Contesté el teléfono y me dijo: 'George, ¿estás en el baño?'. Yo estaba como... ¡Lo siento, estoy en el baño!". Al otro lado del teléfono se encontraba Toto Wolff. El responsable de Mercedes le preguntó a George Russell si estaba en el servicio. Este le respondió afirmativamente. Eran las dos de la mañana. A bocajarro, el dirigente austriaco le comunicó al británico que Lewis Hamilton había dado positivo en un test por COVID-19 y que había pensado en él como su sustituto. Así explicaba la curiosa situación el propio Russell, que este domingo tendrá en sus manos uno de los monoplazas más dominantes de todos los tiempos tras haber competido el resto de año con uno de los peores de la parrilla.
¿Crees que es posible ganar con un Mercedes en la primera?” le preguntaban a Carlos Sainz respecto a las posibilidades de George Russell este domingo, cuya carrera deportiva ha sido tutelada por Toto Wollf. “Sí, y más si es un Mercedes. Seguro”. Tras un largo silencio, el español remató: “es que yo creo que hay respuestas que son muy claras y que no hace falta enrollarse”.
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Toda la noche sin dormir
“Fue algo surrealista”, reconocía Russell. La fortuna puede actuar de un modo caprichoso e insospechado, incluso con los pilotos de Fórmula 1. Es más, puede aparecer en el momento más insospechado. Un buen ejemplo es el hasta ahora piloto de la escudería Williams, George Russell. Durante la rueda de prensa previa al Gran Premio de Sakhir, el británico ha detallado el peculiar modo de fraguarse su ‘fichaje’ por Mercedes. Nada de despachos, quizás en Brackley, sede británica de la escudería alemana. La situación casi rozaba lo cómico. Wolff llamó a las dos de la madrugada a Russell. "Dijo: 'Desafortunadamente, Lewis ha cogido COVID, lo está haciendo bien, está sano y se siente bien, que es lo más importante, pero queremos que conduzcas. Yo estaba como "Bien, está bien ...”, contaba el piloto británico. Tras finalizar la conversación y el resto de tareas que había quedado presuntamente interrumpidas en el baño, George se pasó la noche sin dormir.
Pero Russell necesitaba aún superar el escollo de Williams con lo que el equipo de Grove perdería a su estrella tres días antes de iniciarse el Gran Premio de Sakhir. De hecho, transcurrieron más de 24 horas y sesenta y cuatro llamadas hasta que se produjo la ‘fumata plateada`. "Estaba muy ansioso el martes esperando ver si era posible el acuerdo con el equipo”, explicaba Russell. Williams dio vía libre, con lo que evitaba cerrarle a Russell las puertas a otro equipo por segunda vez en una misma campaña. Pero ahora se trataba del coche del campeón del mundo. A principios de la presente temporada, cuando Mercedes estuvo pensando en Russell como aspirante para ocupar la plaza de Valtteri Bottas en 2021, los ingleses activaron una cláusula del contrato del corredor que les permitiría retenerle durante esa temporada.
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El elegido de Alonso
Pero no terminaban aquí las peripecias de la historia. Todo era apresurado para el británico, hasta las cuestiones más básicas. Como el casco. Tras conocerse la noticia, los padres de Russell quisieron que su hijo empleara un casco ‘talismán’ que tenían guardado en su domicilio. Pero cuando quisieron llevarlo a decorar con los nuevos colores del Mercedes, descubrieron que por su antigüedad incumplía los requisitos de seguridad exigidos por la FIA. Mercedes consiguió que en 24 horas se pintaran los cascos, se confeccionara el nuevo mono, y fuera todo enviado de Italia a Shakir. También explicaba que su asiento no era de este año sino de varios atrás, por su altura no encaja igual que Lewis Hamilton en el coche y tendrá que correr este fin de semana con botines de talla más pequeña a la suya para poder encajar mejor en la zona de los pedales
Al margen de las anécdotas, Russell tendrá este próximo domingo una oportunidad única, ya que será el cuarto piloto que tenga la oportunidad de conducir uno de los monoplazas alemanes desde 2014, que han ganado todos los campeonatos del mundo desde entonces. Y tendrá la oportunidad de confirmar los recientes elogios de Fernando Alonso. Preguntado el español por quién eligiría de entre los jóvenes pilotos, citó al británico. “Todos llegaron con una muy buena preparación y también a través de academias de pilotos que desarrollan el rendimiento y el talento, ayudándolos desde una edad muy temprana, y ahora están haciendo su trabajo.De todos ellos, George Russell es el que me sorprende cada fin de semana, cómo está pilotando el Williams sin errores. Estoy realmente sorprendido por su velocidad natural". Fue poco antes del Gran Premio de Emilia Romagna, donde Russell se estampó contra los raíles tras el coche de seguridad. Este fin de semana podría ganar su primer gran premio de Fórmula 1.
“Estaba en el baño en ese momento, lo cual fue un poco incómodo. Contesté el teléfono y me dijo: 'George, ¿estás en el baño?'. Yo estaba como... ¡Lo siento, estoy en el baño!". Al otro lado del teléfono se encontraba Toto Wolff. El responsable de Mercedes le preguntó a George Russell si estaba en el servicio. Este le respondió afirmativamente. Eran las dos de la mañana. A bocajarro, el dirigente austriaco le comunicó al británico que Lewis Hamilton había dado positivo en un test por COVID-19 y que había pensado en él como su sustituto. Así explicaba la curiosa situación el propio Russell, que este domingo tendrá en sus manos uno de los monoplazas más dominantes de todos los tiempos tras haber competido el resto de año con uno de los peores de la parrilla.