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Max Verstappen no quiso pilotar "como una abuela" y partió por la mitad a Mercedes
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Sumó su primer triunfo de la temporada

Max Verstappen no quiso pilotar "como una abuela" y partió por la mitad a Mercedes

El holandés hizo caso omiso a las instrucciones por radio de Red Bull y atacó a los Mercedes de una forma espectacular gracias a una estrategia perfecta que comenzó en clasificación

Foto: Max Verstappen se comió a los Mercedes con una gestión de neumáticos espectacular. (Reuters)
Max Verstappen se comió a los Mercedes con una gestión de neumáticos espectacular. (Reuters)

“No voy a quedarme detrás pilotando como una abuela”. Max Verstappen está hecho de otra pasta y se llevó el Gran Premio 70 Aniversario de Fórmula 1 partiendo por la mitad a unos Mercedes que pensaban que no tenían rival este año. El holandés ya llegó a Silverstone con una mirada diferente. Dentro de él sabía que tenía una buena oportunidad de batir a los Mercedes, y en el momento que lo vio claro no quiso hacer concesiones. Hizo caso omiso a las instrucciones por radio de Red Bull y atacó de una forma espectacular gracias a una estrategia perfecta que comenzó en clasificación, un pilotaje excelso y a un monoplaza que es una máquina perfecta a la hora de gestionar los neumáticos. El único punto negro que se ha podido sacar del Mercedes esta temporada.

El holandés dio una lección a los Mercedes de una gestión de neumáticos y un ritmo exquisitos. Ha sido su primer triunfo este año, el noveno de su carrera deportiva. La jugada de clasificar a la Q3 con los duros funcionó a la perfección. "No he visto venir la victoria, después de la última tanda parecía que cuidábamos mucho los neumáticos, teníamos mucho ritmo con el coche. Ha sido gran resultado, gran día, estrategia correcta, todo como la seda, increíblemente feliz”, comentó tras la carrera.

placeholder Max Verstappen durante el Gran Premio 70 Aniversario de Fórmula 1. (EFE)
Max Verstappen durante el Gran Premio 70 Aniversario de Fórmula 1. (EFE)

Exhibición de Verstappen y Red Bull

Verstappen tan solo necesitó seis vueltas para comprobar que su estrategia podía ser la ganadora. "Hasta ahora no hemos tenido la oportunidad en todas las carreras de presionarlos, y pude ver que los estábamos presionando", dijo Verstappen. "Así que traté de poner la presión. Tenían que entrar en boxes, y a partir de ahí, pude hacer mi propio ritmo, y básicamente construí esa ventaja hasta el final", comentó.

La realidad es que en solo seis giros, los medios de los Mercedes se estaban viniendo abajo de forma dramática, mientras los duros del Red Bull iban cogiendo calor y ritmo. La distancia con los Mercedes se cerraba y ahí Verstappen dejó la frase de la carrera. El piloto holandés se estaba pegando al Mercedes de Hamilton demasiado y desde la radio le pidieron que cayera a más de un segundo para evitar el desgaste de las gomas. En ese momento el mejor ‘Mad Max’ soltó: "Esta es la única oportunidad de estar cerca de Mercedes, ¡no me quedaré atrás conduciendo como una abuela!". Por la presión y el tener los neumáticos destrozados, ambos Mercedes pararon y tras la parada de ambos todo cambió.

Los de Brackley montaron los duros en sus dos coches, pero cuando parecía que iban a recortar terreno al holandés con las gomas nuevas, fue imposible. ‘Mad Max’ empezó a volar y aumentar su ventaja de forma impresionante con unas ruedas 15 vueltas más viejas que las de sus rivales. En Mercedes ya vieron el peligro y así se lo comunicaban por radio a Hamilton. “Verstappen es un riesgo real”. Y vaya si lo fue. En la vuelta 27 entró a boxes y ya había conseguido salir por delante de Hamilton y pegado a Bottas. Era su oportunidad y se comió al finlandés en cuestión de segundos. Se ponía líder y lo tenía en su mano si el Red Bull mantenía el buen ritmo.

Con Bottas a tan solo dos segundos, llegó otro gran movimiento, pero esta vez de Red Bull. El holandés paró en boxes justo a la vez que Bottas, quien destrozó sus duros más de lo esperado. Con esta parada de ambos y poniendo los nuevos duros el finlandés tenía que derrotar al holandés en la pista, pero nada más lejos de la realidad. El número 33 empezó a volar en Silverstone de nuevo y fue dejando atrás a Bottas. Por delante Hamilton luchaba con sus neumáticos para alargar su parada y lanzar un ataque final. Pero para cuando quiso hacer su parada Verstappen ya estaba en su mundo y cabalgando hacia su primer triunfo de la temporada. Solo podía ser él quien acabara con el dominio de Mercedes. Verstappen tuvo tiempo hasta para bromear con su ingeniero de pista. Mismo mensaje que la semana pasada, pero al frente de la carrera: "No olvides de hidratarte, que seguro que te han sudado mucho las manos".

¿El mejor piloto de la parrilla?

Su exhibición en Silverstone y ser el único capaz de poner en duda la aplastante superioridad de Mercedes hace que el mundo de F1 se pregunte: ¿Es Verstappen el mejor piloto de la parrill actualmente? Evidentemente la estrategia de Red Bull para este fin de semana no hubiese sido tan exitosa sin un piloto de la categoría del holandés.

La realidad es que lo demostrado estos dos últimos años lo coloca como el piloto que más maximiza todas las oportunidades disponibles junto a Lewis Hamilton. Sería difícil decir que es mejor que Hamilton por todo lo que ha conseguido el inglés, pero si no llega a su nivel está claro que está muy cerca. La habilidad más subestimada de Verstappen es la gestión de los neumáticos y la utilizó hoy con maestría para situarse como líder en la carrera. La extensión de su primera parada, en particular, fue una clase magistral.

Al holandés se podría decir que solo necesita la maquinaria para ganar el gran número de victorias y títulos para colocarlo como los grandes de la historia de este deporte. Un duelo Hamilton – Verstappen a igualdad de condiciones sería el sueño de cualquier aficionado de la Fórmula 1. Y… ¿Quién ganaría? Difícil responder. Eso sí, la madurez que tanto le faltó a Max en el inicio de su carrera está empezando a entrar en juego y eso será clave también para su futuro en el gran circo.

“No voy a quedarme detrás pilotando como una abuela”. Max Verstappen está hecho de otra pasta y se llevó el Gran Premio 70 Aniversario de Fórmula 1 partiendo por la mitad a unos Mercedes que pensaban que no tenían rival este año. El holandés ya llegó a Silverstone con una mirada diferente. Dentro de él sabía que tenía una buena oportunidad de batir a los Mercedes, y en el momento que lo vio claro no quiso hacer concesiones. Hizo caso omiso a las instrucciones por radio de Red Bull y atacó de una forma espectacular gracias a una estrategia perfecta que comenzó en clasificación, un pilotaje excelso y a un monoplaza que es una máquina perfecta a la hora de gestionar los neumáticos. El único punto negro que se ha podido sacar del Mercedes esta temporada.

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