La amenaza de Ferrari para poner en marcha el ventilador contra Mercedes y Honda

"En realidad (Fernando Alonso) está diciendo "sabéis qué chicos, olvidaos de 2021. No es que no seamos decentes, sino que se trata de 2022. Esta forma de pensar, de planificar con anticipación, de experiencia que en la Fórmula 1 se construye el éxito con años de anticipación y sacrificando años anteriores, ha ocurrido siempre en la historia del gran circo". Cyril Abiteboul se refería recientemente al planteamiento de Renault, recordando cómo Mercedes anticipó el actual reglamento con años de antelación mientras recogía discretos resultados en pista. Con tal lógica, ¿Debería aplicar Ferrari el mismo enfoque y sacrificar la próxima temporada? Aunque ¿Puede el icono de la Fórmula 1 permitirse semejante lujo?

La respuesta a la segunda cuestión indudablemente ha de ser negativa. Con la primera, varios factores condicionan el calamitoso estado de Ferrari, quinto clasificado con un SF1000 de velamen desarbolado, luchando con Renault, McLaren, y superado por Racing Point. Pero una estrategía como la de Renault nunca se reconocería públicamente desde Maranello. Entonces ¿Cómo recuperar el abismo que separa de Red Bull y Ferrari? Los cánones de funcionamiento en la Fórmula 1 juegan en contra del equipo italiano en el contexto actual. A no ser, por ejemplo, que Ferrari despliegue una ofensiva política y técnica fuera de las pistas. Quizás Mattia Binotto comenzó a insinuarlo en Hungaroring…

"Llevará tiempo y sufriremos"

En el Gran Premio de Estiria ningún monoplaza con motor italiano terminó entre los ocho primeros en cualquiera de las sesiones del fin de semana. El de Hungría resultó lacerante para Ferrari, con sus dos monoplazas doblados a pesar de la evolución aerodinámica introducida en una pista donde el factor potencia se amortigua. Leclerc se desfondaba con una estrategia errónea de neumáticos, mientras Vettel peleaba con Albon o Stroll con la lengua fuera. Ya queda contrastado el impacto de las directivas de la FIA ha desinflado el motor italiano -se habla en torno a 50 cv- con la derivada de noquear una concepción aerodinámica del SF1000 concebida para otras cifras de potencia.

En Estiria y Hungría Binotto lanzaba el mismo mensaje. “Lo he dicho varias veces, pero hay que repetirlo, estamos poniendo en pie los fundamentos de un proceso que debería llevar a un nuevo y duradero proceso ganador, llevará tiempo y sufriremos contratiempos como los de ahora en rendimiento y resultados, pero tenemos que reaccionar con determinación para volver arriba lo más pronto posible” Olvidado ya 2020 ¿Cómo lograrlo con semejante déficit frente a Mercedes y Red Bull? Cualquiera deduciría que Binotto se apunta a la línea de Alonso y Abiteboul ante la camisa de fuerza que atenaza a Ferrari en las nuevas circunstancias del coronavirus.

Por sintetizarlas: reducción del techo presupuestario a 145 millones para 2021. Congelación del chasis actual para la próxima temporada, salvo determinados elementos a través de un sistema de ‘token’. Bloqueo de evolución de motores y modificaciones, salvo elementos muy concretos para 2021. Reducciones en el tiempo disponible para uso de túnel de viento y banco de motores. A todas luces, resulta materialmente imposible en semejante contexto que Ferrari aspire en 2021 a la victoria en una simple carrera. A no ser que desde Maranello se consiga reconducir a corto plazo la situación…recuperando esos cv perdidos, o lanzando sus torpedos políticos contra sus rivales. Mattia Binotto pudo insinuar enigmáticamente al respecto en Hungaroring.

¿El ventilador en marcha?

“Creo que hay áreas en el reglamento que requieren algunas clarificaciones, es un proceso en marcha que siempre ha existido en el pasado, y existirá en el futuro” explicaba Binotto mientras reconocía que las recientes directivas de la FIA tocaban de lleno en los motores italianos. Pero, curiosamente, se ponía en funcionamiento el ventilador de la sospecha. “A través de esas directivas hemos tenido que adaptarnos. Pero no creo que haya sido solo el caso de Ferrari, viendo las entregas de potencia esta temporada, creo que la mayoría de los fabricantes se han tenido que adaptar. Nosotros hemos tenido que hacerlo y hemos perdido potencia”. Afirmación negada por varios pilotos en Hungaroring y, por supuesto, un furibundo e irónico Toto Wollf. Pero quizás Binotto hablaba también en clave para sus rivales y la FIA. “Como dije, todavía hay áreas del reglamento que tienen que ser clarificadas, y esperemos que se pueda hacer en el futuro al menos con suficiente claridad para asegurarnos de que todos entendemos lo mismo”. Boom. Toto Wolff montó en cólera.

¿Amenazaba Binotto con una operación contra Red Bull y Mercedes? ¿Podría el equipo italiano 'recuperar' prestaciones recuperando conceptos técnicos cuyo cuestionamiento ha supuesto el bajón de rendimiento con los motores? ¿Contraatacará en la FIA para 'clarificar' a fondo determinadas soluciones técnicas de sus rivales? “Hemos hecho desarrollos para esta temporada que no hemos podido introducir por el largo confinamiento, lo que no ha sido el caso para todos los fabricantes de motores. Intentaremos desarrollar tanto como podamos para el comienzo de la próxima temporada”. Pero si mientras tanto debilitas a tus rivales...

Cómo reconducir el presente

Ahora la prensa italiana recoge mensajes que suenan inspirados desde el seno de la Scuderia. Como que Ferrari cuente con el único motor 'limpio' en la actualidad. O que solo a través del espionaje interno se conocieron los sofisticados procedimientos técnicos utilizados por sus motoristas. Sin duda, el carpetazo secreto de la FIA revela un agujero negro en un polémico asunto que ha descolgado a la Scudería hasta la clase media de la Fórmula 1. Pero que también amenaza su horizonte a largo plazo porque los actuales motores bloquearán hasta 2025 con cambios limitados en cada temporada.

La reciente reestructuración del organigrama técnico de Maranello es un importante ladrillo en el edificio del proyecto a largo plazo que Binotto prepara para Ferrari, y del que formará parte Carlos Sainz. A corto plazo, el equipo necesita reconducir la actual situación para no sufrir una dolorosa y asfixiante travesía del desierto hasta 2022. Renault quizás se lo pueda permitir. Ferrari, no desde luego. “Siempre se nos da información por parte de los equipos, preocupados porque quizás alguien hace esto o aquello”, explica Nicolas Tombazis, uno de los responsables técnicos de la FIA, “recibimos de forma semanal comentarios al respecto. Un porcentaje de ellos pueden ser solo temores o paranoia, pero también hay otro en el que existen elementos de verdad, así que priorizamos con la probabilidad de que algo sea real”. Puede que ahora Ferrari pise a fondo al respecto.