McLaren, la 'mano lenta' de la Fórmula 1 que puede costarle caro a Carlos Sainz y Norris

Andreas Seidl y Carlos Sainz coincidían en el análisis final del Gran Premio de Hungría: “La carrera se había terminado en la primera parada en boxes”. El español ha puntuado en las tres citas, pero la última se cerró con un premio de consolación con poco sabor. “En teoría esta iba a ser la peor carrera para nuestro coche, aún es pronto en la temporada, pero hemos podido luchar con los Renault, los Ferrari y creo que los Racing Point no estaban muy lejos en términos de ritmo”. Seidl buscaba la cara iluminada de la luna, pero McLaren salía derrotado en Hungaroring ante sus rivales directos y también ante otros que no lo son esta temporada, cuando hasta un Haas superaba a Sainz y Lando Norris.

Aunque el español exonerara a su equipo en la última cita, las paradas en boxes están abriendo una vía de agua en McLaren como factor potencialmente desequilibrante en la extraordinaria igualdad con sus rivales directos. Según la leyenda urbana, el famoso guitarrista Eric Clapton era conocido como 'Slow Hand' (Mano Lenta, en castellano) por su tranquilidad para cambiar la cuerda de la guitarra cuando se le rompían durante los conciertos. Las estadísticas confirman que, por el momento, McLaren es el 'Slow Hand' de la Fórmula 1 con los neumáticos, flanco débil que debilita su prometedor inicio de campeonato. En Hungaroring de nuevo ejerció como tal.

"Culpa de las circunstancias"

El viento del GP de Hungría empezó a soplar a favor de Sainz desde antes de la salida. La lluvia permitió quitarse la china en el zapato de los neumáticos más blandos, de gran degradación en el MCL35. Luego, su magnífica arrancada casi le permite superar a Bottas pero, encajonado por dentro y en zona húmeda, fue adelantado por Ricciardo al salir de la primera curva. El viento seguía soplando en las velas del español cuando le devolvía la maniobra al australiano. Hasta que los boxes y no la pista menguaban nuevamente la cosecha de puntos del español.

En esta ocasión el piloto liberaba a sus mecánicos, aunque quizás sus ingenieros se retrasaran para quitar los intermedios ante la rápida reacción de numerosos rivales. “En el pit stop hemos tenido mala suerte. Antes de la parada estaba por delante de Ricciardo, estaba muy justito con los Haas, una parada normal nos hubiera puesto por delante. Fue una parada larga, insisto, no por culpa del equipo sino por las circunstancias, hemos perdido esas tres posiciones”. Las imágenes mostraban a un piloto esperando luz verde una vez sustituidos los neumáticos. Varios monoplazas habían entrado a la vez. Pero alguno que lo había hecho por detrás, como Ricciardo, se habìa subido a un tren que Sainz solo veía pasar. Aunque sin llegar al desastre del Red Bull Ring, los mecánicos de McLaren confirmaban su tendencia en el actual curso: operan entre los más lentos de la parrilla.

Los más lentos en boxes

Para empezar, hasta Hungría ninguna de las paradas de McLaren estaba entre las diez mejores del campeonato. Por ejemplo, en el Gran Premio de Austria, la media del equipo británico fue de 3.6 segundos ¿Renault? 2.7 segundos. ¿Red Bull? 2.3. Había que remontarse hasta la decimotercera y cuarta posición para encontrar la mejor parada de sus pilotos. En la segunda, Norris y Sainz fueron penúltimos y antepenúltimos.

En el Gran Premio de Estiria, McLaren subió su media hasta los 4.6 segundos, mientras que el equipo francés seguía en 2.8 y Red Bull en 2.1 ¿Racing Point? 2.8 y 3.4 respectivamente. La de Norris fue decimoctava, y la mejor de Sainz (para montar gomas blandas a final de carrera) fue la duodécima, por encima de los tres segundos. Al término de las dos primeras carreras, McLaren ocupaba el último puesto en la clasificación por equipos, configurada con los puntos según los tiempos logrados. Antes de Hungría era el único equipo con el casillero a cero. Pero en Hungaroring, McLaren fue de nuevo el más lento, y bajar de los tres segundos se antoja todo un reto. Williams ganó con 2.0 segundos. Renault, cuarto, con 2.5. Racing Point, 2.7. Haas, 3,1. McLaren...3.6. Quizás no resultara tan extraño que Sainz viera parado pasar el tren de sus rivales ante sí.

“El equipo no me ha podido sacar y hemos tenido otros cinco o seis segundos que me hubieran puesto por delante de los Haas y Ricciardo, a partir de aquí estábamos en el once y doce”. En carrera, Sainz confirmó un ritmo superior al Renault de Ricciardo y al Haas de Magnussen. Pero los mecánicos de McLaren no proporcionaron esas décimas suficientes que le permitieran salir por delante del australiano, al que había adelantado en la primera vuelta. Al margen de la menor o mayor fortuna en Hungaroring, las paradas en boxes son tarea pendiente para McLaren.

Tercero en el campeonato

“Teníamos más ritmo del que hemos mostrado, creo que acertamos con Carlos en el momento adecuado, pero se formó un tren en el pit lane, no pudo salir y perdió posiciones cruciales. Aquí en Budapest, donde no se puede adelantar, hemos perdido un buen resultado, ya que podíamos haber terminado por donde estaba Vettel”, confirmaba Andreas Seidl, que será consciente de la necesidad de mejorar sustancialmente en este terreno. De lo contrario, sus pilotos seguirán perdiendo puntos en 2020 como en las dos últimas carreras. La pugna con Renault, Racing Point e incluso Ferrari ya está prendiendo fuego.

McLaren termina este primer ciclo con 41 puntos, magnífico balance provisional que mejora por el momento su posición final en 2019. Pero en la cara oculta de la luna también figuran algunas de las carencias del MCL35 delatadas en Hungaroring. Que Carlos Sainz no tiene aún por la mano a su monoplaza los sábados, aunque puntúa en cada carrera, algo que firmaría cualquier rival de la clase media. Ahora llega Silverstone, pista que será más favorable para el monoplaza británico, según Andreas Seidl. Con que "Mano Lenta" mejore su ritmo en boxes...