Ferrari ejerce de Ferrari y marca las diferencias con el espectacular SF90
En una gala más que una presentación, Ferrari desveló el nuevo SF90 con el que quiere recuperar por fin el título de la Fórmula 1 que se le resiste de 2007
Ferrari es… Ferrari, y volvió a recordarlo en un acto que fue más una gala que una presentación al uso en estos tiempos. La marca italiana se desmarcó así de la tónica general de sus rivales y quiso rodear de elegancia italiana y un punto de solemnidad a su nuevo SF90, bautizado así en honor al 90ª aniversario de la marca y vestido para semejante ocasión con un rojo mate inédito extraordinariamente atractivo. Un tono justificado también por ahorro de peso, según Mattia Binotto. El nuevo monoplaza se define como una evolución del SF71, pero también cuenta con agresivas soluciones para "elevar el nivel y ser tan extremos como hemos podido serlo", apuntó el máximo responsable del equipo, Mattia Binotto.
El acto contó con toda la plana mayor de Ferrari, incluyendo la presencia de John Elkann, 'chairman' de Fiat Chyrsler Automobiles, y de Piero Ferrari. Además, la presentación escenificaba el salto cualitativo en la presencia del nuevo esquema de patrocinio de Phillip Morris International para el equipo, el concepto 'Mission Winnow', que ha adquirido el estatus de ‘title sponsor’ al unirse oficialmente al nombre de Ferrari.
El evento comenzó con una soporífera intervención institucional de Luigi Camilleri, CEO de Ferrari. "La temporada pasada fue nuestro mejor año de la última década, pero no llegamos a culminar nuestros objetivos. No fue fácil de encajar, pero miramos al futuro con determinación y compromiso". Después de recordar a Raikkonen y Arribavene ("siempre formarán parte de la familia de Ferrari") y echar flores a sus pilotos, dio paso a Binotto en su primera presentación como responsable de Scuderia Gestione Sportiva. "Mattia ha estado en Ferrari casi un cuarto de siglo. Su ilustre carrera en este tiempo es buena prueba de sus excepcionales capacidades y habilidades de liderazgo", dijo de él Camilleri. "Conoce la Scuderia por dentro y por fuera, es un hombre de equipo, decisivo, con talento y determinación para marcar una gran diferencia a todos los niveles. Tengo toda la confianza en que liderará a la Scuderia a nuevas cotas".
Pero el momento estelar del acto fue la espectacular aparición del SF90 oculto debajo del escenario, para subir lentamente envuelto entre un juego de luces que realizaban su nuevo color mate. El SF90 podría haber ganado la competición estética en dura pugna con Mercedes. Se trata ahora de descubrir si también puede lograrlo sobre el asfalto. Y el propio Mattia Binotto dio algunas pistas iniciales sobre la filosofía del nuevo monoplaza italiano. "Hay cambios que son muy claros, como el alerón frontal, debido al cambio de reglamento. Pero si os fijáis en todos los detalles, hemos intentado ir más allá y ser innovadores", explicó, señalando al arco de seguridad, "muy estrecho y plano". "Y si veis la carrocería en la parte trasera, también es muy fina, gracias a un trabajo que no puede verse porque está en el interior, en lo que se refiere al posicionamiento de la unidad de potencia. Hay mucho esfuerzo detrás, y la forma final es el resultado de todo este esfuerzo. Me gusta".
"El equipo está preparado"
Al igual que Mercedes, se espera que un concepto ya ganador la pasada temporada mantenga un alto nivel de competitividad para luchar para la victoria gracias al refinamiento en diferentes apartados del SF90, como apuntó Binotto. Pero esa teórica rivalidad solo se comprobará en el asfalto. Sin embargo, en Ferrari se muestran optimistas para presentar batalla al equipo alemán y rematar la faena esta temporada.
"Todos estamos entusiasmados. Empiezas a ver el coche poco a poco a final del pasado año, y hoy ves cómo todo se une, pero hoy es el primer día que le ves realmente. Estoy entusiasmado, no estoy vestido adecuadamente, pero si pudiera me metería dentro ahora mismo", declaró Sebastian Vettel, con barba corta, traje y corbata con el escudo de Ferrari. "El equipo está preparado y va por el camino adecuado, y esperemos poder seguir progresando", añadió. Por su parte, Charles Leclerc, que recibía grandes elogios de Camillieri, reconoció que era un día emotivo y de orgullo para él. "No estoy nervioso. Para mí es una oportunidad estar junto a Sebastian, un cuádruple campeón, y puedo aprender mucho. Estoy seguro de que será una gran temporada y de que lo conseguiremos". Lástima que tanta elegancia quedara un poco tocada cuando todos los protagonistas se pusieron la gorra de Ferrari para la foto de familia.
Ferrari es… Ferrari, y volvió a recordarlo en un acto que fue más una gala que una presentación al uso en estos tiempos. La marca italiana se desmarcó así de la tónica general de sus rivales y quiso rodear de elegancia italiana y un punto de solemnidad a su nuevo SF90, bautizado así en honor al 90ª aniversario de la marca y vestido para semejante ocasión con un rojo mate inédito extraordinariamente atractivo. Un tono justificado también por ahorro de peso, según Mattia Binotto. El nuevo monoplaza se define como una evolución del SF71, pero también cuenta con agresivas soluciones para "elevar el nivel y ser tan extremos como hemos podido serlo", apuntó el máximo responsable del equipo, Mattia Binotto.