Alonso se emplea a fondo en el WEC: "Es una máquina más compleja de lo que se piensa"

Spa Francorchamps ha bautizado a Fernando Alonso en el Mundial de Resistencia (WEC), tras abrir fuego en la primera jornada de entrenamientos de las 6 Horas de Spa. Su primer contacto en los libres culminó con la primera posición provisional. "Solo eran los primeros libres. Fue la primera toma de contacto con el circuito", explicaba Alonso al término del día, “fue una vuelta limpia, pero no era crucial”.

Al final, el Toyota número7 (Mike Conway, Jose María López y Kamui Kobayashi) logró el mejor tiempo al cierre de la jornada, rebajando considerablemente los cronos de la primera tanda. Al término del día se confirma que, fiabilidad o incidentes al margen, Toyota parte como gran favorito para la primera victoria de la temporada.

Por ahora, ventaja Toyota

“Esta es la primera vez con todo el tráfico, con la pista llena de coches, así que vamos mejorando paso a paso". Alonso restaba importancia al 1.58.392 que lograba tras tomar el volante de su compañero Sebastian Buemi, superando en una décima al suizo, y 0.237 décimas al coche de Mike Conway. De hecho, en la segunda tanda el británico bajó al 1.56.172, casi dos segundos menos y superando al Toyota número 7 del español en casi siete décimas. El primer prototipo no híbrido fue el equipo Dragonspeed, a 2.6 segundos.

La categoría principal de los LMP1 se distinguen entre los híbridos, como el Toyota TS050 y el resto no híbridos, con diferentes chasis y motorizaciones. Los primeros tiene un peso mínimo de 878 kilos, por los 833 de los segundos. También difieren en la capacidad del depósito de combustible, que determina las vueltas de autonomía entre cada repostaje en boxes. El Toyota tiene 35.2 litros, por los 52,9 de los no híbridos, para compensar la generación de energía eléctrica de aquellos. Los organizadores del WEC ha establecido unas normas técnicas (Equivalence of Technology) para lograr una relativa equivalencia entre ambas subcategorías. En principio, parece que Toyota cuenta con una amplia ventaja sobre sus rivales no híbridos, que habrá de confirmarse este fin de semana.

"No son coches fáciles de gestionar"

Alonso aprovechó la primera jornada para aclimatarse en pista al TS050 Hybrid. “Aprendes en cada vuelta cosas diferentes, vemos dónde pasan los coches, y lo guardamos en la memoria para el sábado, para así entender cómo gestionar el tráfico y el equilibrio del coche", apuntaba. El piloto español también insistió en la dificultad que encierra el prototipo híbrido de Toyota, “una máquina muy compleja, más de lo que se podría pensar. Para entenderlo y utilizarlo correctamente tienes que profundizar en los detalles, ya que tiene muchos secretos y no resulta fácil gestionarlo. Aprendí muchas cosas en el simulador, como todos los botones del volante. Cuando ayer volví al hotel, antes de irme a dormir, tuve que estudiarme los documentos que el equipo nos había enviado a los pilotos para prepararnos lo mejor posible antes de los libres de este jueves”.

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Jonathan Llata

Alonso también se refirió a la experiencia de volver a cambiar de coche, como en las 500 Millas y las 24 Horas de Daytona, “y me he tenido que adaptar a diferentes estilos de conducción. Creo que todo el mundo en el WEC está acostumbrado a cambiar de categorías. Pero competir aquí con Toyota ha exigido un enfoque diferente, con más detalle, con una preparación adicional que hacer, por lo que se pasa mucho tiempo en el simulador, donde entrenamos el tráfico y las diferentes situaciones”.

El viernes tendrá lugar la sesión clasificatoria, que en el WEC tiene la particularidad de contar con la media de los cronos logrados por dos de los pilotos de cada coche, tiempos que conformarán la parrilla de salida.