"Estamos llegando". Por qué puede esperarse cualquier resultado de Alonso en Interlagos

“¡Yesss!¡Yesss!”. Pocas veces se le han escuchado a Fernando Alonso muestras de satisfacción al término de unos entrenamientos en estos tres últimos años. Una de ellas fue este mismo año en Montmeló, donde se clasificó en séptima posición el sábado. Sin embargo, en el Gran Premio de Brasil saldrá sexto por la penalización de Daniel Ricciardo “Estamos llegando”, tuiteaba el piloto español al término de la sesión del sábado.

Alonso parte de la mejor posición de parrilla con McLaren-Honda –sexto–, aunque sin superar el tercer puesto logrado por Jenson Button en el Gran Premio de Austria de 2016, un resultado logrado en condiciones de pista cambiantes. Sobre el papel cabría plantear la posibilidad para uno de los mejores resultados con Honda a poco que Interlagos depare otra de esas carreras impredecibles que tanto acostumbra. " Es una fantástica posición para nosotros para conseguir puntos. Si empezamos sextos, hará las cosas más fáciles". En McLaren no pierden la esperanza, aunque Alonso intentó también curarse en salud, cuestión de lluvia o de falta de ella.

"¡Bien, veo que ahora no nos han adelantado!”

El equipo reconocía que el piloto español había logrado el “máximo absoluto” con el MCL32 para esta pista. Y el propio piloto ponía en su particular contexto la alegría que mostraba al terminar la sesión cuando el equipo le informó de su posición definitiva. “La vuelta había sido buena, pero nos ha pasado tantas veces que al acabar la vuelta miraba la pantalla y estaba séptimo, pero quedaban muchos coches por pasar, y luego cuando te dicen que al final eres P9 o P10 te da un bajón. Entonces, estaba esperando, esperando y dije: ¡Bien, veo que ahora no nos han adelantado!”.

“Fue buena la vuelta, no tengo queja, tuve una buena preparación, sin tráfico en la de salida”, explicó luego el español respecto al último giro del Q3. “Me quedé muy cerca de Checo (Sergio Pérez) pero también cerca los de detrás. Una décima puede cambiar dos o tres posiciones, estamos dentro de esa décima de los que están delante, así que tuvimos buena suerte hoy”.

Porque la sesión no fue tan fácil como parecía desde el exterior. "Buscabas el grip, veías las gotas en la visera aunque la pista parecía seca, perdías algo de confianza", explicaba el piloto español, "tenías que confiar en lo que hacían los neumáticos, pero en las rectas veías gotas en la visera, frenabas en el mismo punto, confiabas en que hubiera grip, pero aunque hubiera medio punto menos de adherencia, tú no lo sientes, y son dos décimas peor a la vuelta, que aquí en Brasil cambian las posiciones".

Suele llover en Interlagos, pero no en esta ocasión

“Su séptima posición (sexto de parrilla) fue el reflejo del ritmo del coche”, confirmó después Éric Boullier. “Ha estado entre los diez primeros durante todo el fin de semana, y una vez consiguió solucionar el subviraje que afectaba al equilibrio de su monoplaza, pudo mostrar todo nuestro potencial”, declaró el francés, aludiendo a los problemas de comportamiento del MCL32 del viernes, en el que los pilotos no habían conseguido completar la puesta a punto ideal. “Su resultado en los entrenamientos ha sido realmente brillante, se ha mostrado totalmente determinado este fin de semana, lanzando su monoplaza a esta pista con una pasión y una dedicación increíble”.

Alonso señalaba a la necesidad de lluvia para optimizar su posición para la carrera, pero Boullier se mostraba optimista con algunos de los datos recogidos el viernes. "Desde la sexta posición, y teniendo en cuenta el prometedor ritmo que mostramos el viernes en nuestras simulaciones de carrera, creo que podremos ofrecer un buen espectáculo mañana".

Sin embargo, la falta de lluvia que los pronósticos avanzan menguarán dichas opciones. “Mañana en seco será un pelín más complicado. Pero muy contento de cómo ha salido todo hoy, vamos a disfrutarlo y mañana que venga lo que sea”. Pero también recordaba que aunque la posición es buena para coger puntos, "será difícil con algunos coches rápidos que vendrán por detrás, sobre todo Ricciardo y Hamilton". "A ver qué se puede hacer. Un poco de lluvia sería bienvenida, somos más competitivos en condiciones húmedas", añadía Alonso. Salvo sorpresa, va a ser que no, nada de agua. Pero nunca hay que descartar la sorpresa de cualquier tipo en esta singular pista.