McLaren encara Brasil con el recuerdo de una silla que es hoy más relevante que nunca

Cuando Fernando Alonso tuvo que retirarse de la sesión clasificatoria del sábado del Gran Premio de Brasil de 2015 y decidió, en un acto de espontaneidad poco común en la Fórmula 1, sentarse en una silla de un comisario que estaba estacionado cerca, poco imaginaba que dos años después esa imagen sería incluso más relevante. Tanto el asturiano como su compañero de equipo y todo McLaren esperan con ansias el fin de la asociación con Honda, que dará paso a Renault en 2018. Dos carreras más para sufrir, dos carreras en las que cerrar una difícil época con dignidad y con inercia para estar mejor el próximo año.

"Interlagos es la sede de uno de los grandes premios más dramáticos del año. Siempre hay incidentes y acción y la meteorología también juega un gran papel en el resultado. El circuito debería adaptarse mejor a nuestro coche mejor que los últimos dos trazados, por lo que esperamos tener mejores opciones en clasificación ya que la posición de salida es muy importante", explicaba Alonso sobre el lugar donde se celebra el GP de Brasil. Allí, cuando la lluvia hace acto de presencia, suele hacerlo con todas las de la ley y afectando al resultado de forma importante. La carrera de la pasada temporada fue un gran ejemplo de ello, aunque las previsiones para este fin de semana son aún inciertas.

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Lo que sí se espera es evitar una repetición de lo vivido el año pasado, con más espectáculo fuera de pista que dentro de él. Por lo menos, Alonso sigue valorando el circuito como un lugar especialmente divertido para competir, más allá de que lo sea para filmar a los demás coches con una cámara: "Interlagos es un circuito realmente divertido, con una vuelta corta pero fluida. Con los coches nuevos, este año la sentiremos incluso más rápida. En carrera, una buena salida de la última curva te ayuda en la recta de meta y te permite atacar en la primera curva". La ausencia de potencia en el motor japonés no ayudará a alcanzar el punto del que habla el bicampeón, que junto a Stoffel Vandoorne probablemente tenga que centrarse en lograr tener un coche que se comporte lo mejor posible en la zona con más curvas.

Mejor que en EEUU y México

A pesar de todo, Alonso es más optimista de cara al GP de Brasil que en las dos carreras previas: "Tras Estados Unidos y México, miramos a Brasil y Abu Dabi con mejores expectativas, ya que sabíamos que esos circuitos serían muy difíciles para nosotros. Aún así, México fue una sorpresa y fuimos mejor de lo que esperábamos. Si en Brasil podemos empezar la carrera desde la posición en la que deberíamos estar en clasificación, tendremos una buena oportunidad para sumar puntos", concluyó. Aunque no especifica la posición de partida que se busca en el equipo, es fácil entrever que el objetivo ideal sería lograr la séptima posición en parrilla.

Boullier muestra su admiración por un circuito especial con muchos desafíos por delante: "Es una de las pocas carreras de la temporada donde todo puede pasar y eso puede traer un GP desafiante para nuestros ingenieros, mecánicos y estrategas, por el drama que causan las condiciones climáticas en este circuito. La diferencia entre un resultado sólido con puntos y no lograrlo suele estar en el número de apuestas que los estrategas de cada equipo deben tomar dependiendo de la situación del tiempo. Esto hace que sea uno de los fines de semana más apasionantes del año. Encaramos el fin de semana con optimismo cauteloso. Sabemos que el circuito se adapta a los puntos fuertes de nuestro conjunto mejor que las últimas dos carreras", afirmó el francés. En McLaren no bajan los brazos, aún con su situación actual.

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Àlex García

Finalmente, Yusuke Hasegawa fue considerablemente más cauto en sus palabras, limitándose a mencionar los puntos clave del circuito de Interlagos. Para Honda, será otro fin de semana en el que intentar ganar la credibilidad perdida: "En México, acabamos con un ambiente positivo en el equipo con un importante punto en el campeonato obtenido por Fernando. Ahora buscamos mantener el impulso en Interlagos. El Autódromo José Carlos Pace de Interlagos es relativamente corto, aunque desafiante. Se trata de un circuito muy técnico, con cambios de elevación y donde adelantar es complicado. La configuración de la unidad de potencia será clave para asegurar una buena respuesta del motor a lo largo de la vuelta".