El mejor viernes de Alonso desde que McLaren y Honda se juntaron en 2014

Las mayores ganancias llegan con las apuestas más inesperadas y con resultados de escasas posibilidades estadísticas. Podría ser el caso si nos atenemos a algunas pistas que dejaba la primera jornada del GP de Malasia. Entre esos resultados inesperados cabría incluir a Fernando Alonso.

Si acompañaran las circunstancias, el piloto español podría lograr esa sorpresa que acarició con la mano en Singapur, aquella del famoso puñetazo de frustración contra la pared tras la carrera. La singularidad de las condiciones en Sepang dan juego para arriesgar en las apuestas. Y las perspectivas meteorológicas para el domingo, en principio, podrían favorecer a un Alonso que completó uno de los mejores viernes de McLaren y Honda desde 2014.

¿Pocas cosas que cambiar en el monoplaza?

“No tenemos grandes cosas que cambiar de cara a mañana, así que eso suele ser positivo normalmente, veremos a ver qué podemos hacer”, explicaba el piloto español. Normalmente son señales esperanzadoras que un monoplaza ofrezca a su piloto buenas sensaciones desde el primer minuto. En pocas ocasiones se ha escuchado hablar así a Alonso con McLaren en los últimos tiempos. “Es pronto para ver, tenemos que analizar esta noche, porque cada tanda que he salido lo he hecho con una configuración diferente y ha ido bien en la primera, en la segunda y en la tercera”. Incluso terminando por delante de los dos Mercedes.

Ya el jueves Alonso no se mostraba 'a priori' tan pesimista como en otras ocasiones, quizás en la esperanza de que el MCL32 mostrara un buen nivel en Sepang. El equipo además se estaba satisfecho con el primer balance de las nuevas evoluciones en su monoplaza. “Probamos algunos componentes nuevos en el coche de Fernando hoy, y parece que han funcionado”, explicaba Éric Boullier. "Quizás expliquen las diferencias entre los dos pilotos, ya que el coche de Fernando estaba mejor adaptado a las características de este singular circuito”, añadió.

“La jornada ha sido positiva", remataba el español. "En los primeros libres intentamos probar un poco el coche para ver si funcionaba todo bien, seguramente salimos con la pista un poco menos mojada y nos colocamos terceros, que siempre es agradable”, explicaba respecto a la primera tanda, no del todo representativa para la jerarquía, aunque sí para catar el comportamiento del MCL32 en mojado. “Y luego, en la segunda sesión el coche siguió comportándose bien en condiciones de seco. En todas las tandas se ha comportado bien. Hay mucho grip en este circuito, también con los superblandos y es un poco más difícil tener la sensibilidad justa para ver los problemas”.

"No tenemos miedo a lo que venga"

Mercedes vivía uno de sus peores viernes desde 2014; Red Bull es muy rápido en agua, pero equivocaba su puesta a punto; Ferrari es muy competitivo en seco; varios monoplazas de mayor potencia terminaron por detrás del McLaren… Pero el piloto español no olvidaba la prudencia porque confía en que la reacción de los rivales recupere un esquema más tradicional tras los análisis de la noche del viernes. “Luego, Ferrari, Mercedes, Red Bull, Force India... La Q3 va a estar cara, como siempre, intentaremos estar ahí en la lucha por las últimas posiciones que dan acceso a la Q3 y a ver qué pasa a partir de ahí".

Que Alonso se mostrara particularmente confortable con su monoplaza da esperanzas si se produjeran las circunstancias favorables. De hechose esperan condiciones cambiantes en la carrera. Y es aquí donde una apuesta arriesgada podría aportar grandes dividendos. “Lo que mejor nos iría son las condiciones mixtas, suelen traer siempre más incertidumbre y lotería, y seguramente esto nos puede salir mejor que en seco o una carrera con normalidad absoluta”.

Para Alonso, en ese riesgo que aporte la meteorología está la oportunidad. “Entraremos justitos en la Q3, y para arañar algún puntito. Luego, si llueve, puedes perderlo todo o ganar mucho, y estamos en una posición en que no tenemos nada que perder. Hoy hemos probado en lluvia y en seco y en las dos nos hemos encontrado bien, así que no tenemos miedo a lo que venga”. Fernando Alonso ha logrado algunas de sus mejores actuaciones en Sepang.

Y aunque el jueves solo recordara la victoria con McLaren en 2007, la de 2012 con Ferrari es una de las mejores de toda su carrera deportiva. El monoplaza italiano de aquella temporada era un verdadero hierro en las primeros compases de la temporada, excepto en condiciones cambiantes. Como las que podrían darse el domingo en el GP de Malasia. Atreverse con la victoria es demasiado osado, pero quizás hoy valga la pena apostar algunos euros por ese podio que se escapó en Singapur