Alonso: "Uno de los mejores chasis del campeonato", pero con puntas de risa
Tanto en los entrenamientos libres como en clasificatorios, el MCL32 se mezclaba en mitad de la tabla. Pero al final le ha tocado a Alonso la mala fortuna que se ceba en Vandoorne
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“Bueno, aquí estamos muy cerca uno de otros, las posiciones rondaban entre el doce y el quince, en este gran premio se ha demostrado que, de largo, tenemos uno de los mejores chasis del campeonato”. Fernando Alonso suele hablar claro, y cabe pensar que lo hace también cuando así se refiere al MCL32. De hecho, tanto el viernes como el sábado, estaba cerca de otros monoplazas a pesar del gran diferencial de potencia. Hasta que se rompió el motor otra vez. Esta vez le tocó al piloto español.
De momento, lo vivido por ahora en este Gran Premio de Baréin confirmaba otra vez esas señales de hasta qué punto McLaren podría dar un importante salto en la parrilla de acertar el fabricante nipón con su unidad de potencia. Habrá que esperar. Pero un monoplaza es un paquete completo, y uno de los eslabones se sigue rompiendo. Literalmente hablando. Lo peor es que el motor roto en el Q2 también puede condicionar la repetición de sus actuaciones en Australia y China, según el piloto español.
Algún día le tenía que tocar a Alonso
“Esta vez le ha pasado a él (Vandoorne), ha sido el azar, y no porque hayamos hecho algo diferente. Así que también estamos expuestos a estos problemas”, explicaba Alonso de forma premonitoria el viernes, cuando otro nuevo picotazo fue a la misma cresta del piloto belga, que en estas tres carreras se estaba llevando la peor parte en términos de fiabilidad en lo que a la unidad de potencia nipona se refiere, porque los abandonos del español llegaron del chasis. Algún día le tenía que tocar. Y fue ayer, como a Sainz en la última curva. Con la fortuna de que el abandono del Toro Rosso salvaba al español de quedar ahogado en el Q1, como su compañero.
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Al margen de este golpe de fortuna, Alonso se mostraba satisfecho, de ahí sus comentarios sobre el chasis. Y del motor. “La vuelta (primero del Q2) era buena, hasta la última curva era medio segundo más rápido que en el Q1, y al acelerar…”, explicaba Alonso, “creo que teníamos la posibilidad de lograr un par de posiciones mejores que la que tenemos ahora, podíamos haber repetido ese doce, trece o catorce en la parrilla, dependiendo de los demás. Pero al salir de la última curva se rompió el motor y ya entré despacio en el pit lane”.
Yusuke Hasegawa no podía asegurar por la tarde si los problemas de Alonso eran los mismos que el día anterior en el monoplaza de Vandoorne, que ha sufrido otro fin de semana para olvidar por una paupérrima fiabilidad que le están dejando apenas sin kilometraje mínimo a bordo del MCL2 en estas tres primeras carreras. Pero en un mismo fin de semana, con la de Alonso, Honda lleva tres roturas de MGU-H, llevándose por el camino también la cámara de combustión en el monoplaza del español
Los primeros, por la cola
Los datos de velocidades máximas en Shakir volvían a dar pistas sobre el análisis de Alonso con el MCL32. En la velocidades máximas del 'speed trap', los dos pilotos de McLaren erán últimos y penúltimos. Dos de los parciales intermedios también eran cerrados por la cola por Alonso y Vandoorne respectivamente. Ericsson era el último en el primero, con el piloto español antepenúltimo. De aquí los piropos del español a su chasis.
Lo peor para Alonso son los dos hándicaps que afronta en esta carrera para intentar colocarse en los puntos. Por un lado, su retrasada posición de salida, decimoquinto, un puesto por delante de Carlos Sainz. “Espero una carrera difícil, ya lo era, pero ahora un poquito más”, confiando de nuevo en que se complique el panorama en la primera curva para “ver qué pasa delante nuestro. La salida siempre es complicada aquí, siempre hace falta ayuda de los demás, mañana más que nunca”.
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Un motor que sale 'virgen' para la carrera
Pero, sobre todo, Alonso se mostraba resignado ante la necesidad de contar con un motor totalmente nuevo para la carrera, que sale ‘crudo’ a la pista. “No hay posibilidad de calibrar el motor, así que no haremos la carrera con toda la potencia normal disponible, que es poquita, así que tenemos la carrera complicada. El motor es nuevo, y la primera vuelta que das es la de formación. Esperemos que den con los reglajes, pero siempre es bueno tener una sesión para calibrarlo de la mejor manera posible”.
"Los chicos en el garaje trabajan día y noche para preparar el coche, seguimos cambiando cosas, seguimos probando las evoluciones, hay mucho trabajo detrás cada fin de semana, pero no tenemos una unidad de potencia competitiva para estar delante". Y, sobre todo, hay que cambiarlas una y otra vez. Definitivamente, los mecánicos de McLaren se están ganando el sueldo esta temporada.
“Bueno, aquí estamos muy cerca uno de otros, las posiciones rondaban entre el doce y el quince, en este gran premio se ha demostrado que, de largo, tenemos uno de los mejores chasis del campeonato”. Fernando Alonso suele hablar claro, y cabe pensar que lo hace también cuando así se refiere al MCL32. De hecho, tanto el viernes como el sábado, estaba cerca de otros monoplazas a pesar del gran diferencial de potencia. Hasta que se rompió el motor otra vez. Esta vez le tocó al piloto español.