Este es un fin de semana estresante para ser piloto en Ferrari

“Es el mejor jefe de equipo que he tenido nunca. Creo que es exactamente el hombre correcto para este puesto. Hace un gran trabajo”. Kimi Raikkonen, quien ha tenido de jefe a Domenicali, Boullier, Sauber o Dennis, ha halagado de esta manera a Maurizio Arrivabene en este GP de España. Su mensaje va para quien –presumiblemente desde Ferrari- haya filtrado a ‘Autosprint’ hace unos días que Sergio Marchionne tendría pensado sustituir al ex de Marlboro por el técnico James Allison. No ha sido el único en defenderle, Sebastian Vettel también le ha piropeado: “Está haciendo un muy buen trabajo. Lidera el equipo. Y por otro lado, es accesible a la gente. Pasa mucho tiempo en el equipo… no sólo aquí, también en Maranello”. Casualmente, esta filtración a la publicación italiana viene la misma semana que el presidente ferrarista instó a lograr “dos victorias en breve, empezando por Barcelona”.

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“Se ha hablado de James, también de Aldo Costa, pero olvidaron un nombre: Tyrion Lannister. ¡Este es el candidato real y estoy sorprendido de que no mencionaran su nombre!”. Arrivabene se lo tomó con humor y utilizó al personaje de la serie Juego de Tronos para indicar de una manera original que no iba a “hablar de rumores como ese”. Ciertamente, para un cargo como el de Ferrari, se hace extraño que un técnico liderase un cargo en el que la política juega un papel tan fundamental, además de la organización propia del equipo.

No se ha logrado el objetivo

“Sé que hay algunos rumores y algo de mierda últimamente, pero estoy muy, muy feliz de que esté con nosotros y no con nadie más”. Vettel fue prácticamente igual de contundente que su compañero finés. Ambos pilotos se mojaron y señalaron que la dirección actual en la Scuderia es la adecuada. Y todo ello admitiendo “no hemos conseguido los resultados que deberíamos tener”.

“Es genial ver que el presidente se preocupa y que está decepcionado y frustrado”, contraataca Vettel para dar la vuelta a la tortilla en esta espiral de presión por ser el segundo mejor equipo (no el primero). “No quiero comentar lo que ha salido en la prensa, pero sé perfectamente lo que me ha dicho a mí. Yo lo veo como algo más positivo respecto a lo que los medios llaman presión. Creo que es bueno que el presidente esté detrás de nosotros”. El asunto no es que sólo esté “detrás” de su equipo de Fórmula 1, sino que pide ganar en Barcelona… cada uno que lo califique “presión” o como desee.

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“Está lejos de ser un desastre”

“Nuestro objetivo es estar en la parte delantera con los dos coches. El equipo ha hecho un buen trabajo este invierno para prepararlo, pero no nos hemos colocado donde queremos ni hemos estado delante de Mercedes, por el momento. No obstante, no estamos tan lejos de ellos como los resultados sugieren. Está lejos de ser un desastre… Tratamos de complacer a nuestros fans, nuestro equipo y el presidente de Ferrari. Pero la carrera (en Barcelona) no decidirá la temporada si no ganamos el domingo”. Raikkonen matiza los deseos de su presidente sabiendo de ante mano que está difícil hacerlo realidad.

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Este viernes en Barcelona, los dos pilotos de Ferrari han peleado en pista con Mercedes, logrando un 1-2 en los primeros libres y un 2-4 en los segundos. En un circuito en el que el motor no es tan capital como en los tres grandes premios anteriores, la distancia parece haberse reducido, sobre todo con respecto a Rusia, en el que Mercedes fue inmensamente superior a Ferrari en carrera… y con problemas en ambos monoplazas.

¿Vio Marchionne la última carrera?

Toto Wolff, en una carta abierta para echar por tierra los rumores sobre un trato de favor a Rosberg sobre Hamilton, explicó las circunstancias de cada uno de sus coches en la prueba de Sochi, desnudando que sus W07 no iban al 100% cuando llegaron a meta. Indirectamente, supuso un ‘palo’ para Ferrari. En este contexto, las palabras de Marchionne sobre la necesidad de una “victoria” en Barcelona suenan a un impulso causado por las emociones o a que no siguió mucho la última carrera… La pista cambia y reduce distancias, pero la diferencia entre ambos equipos fue tan grande que sólo causas ajenas podrían alterar el orden actual de la F1.

“No ganar con Ferrari es muy estresante porque hay muchísima presión. Después de cinco años, y con la vista puesta en que serían siete sin ganar, no era feliz”, señaló recientemente Fernando Alonso en una entrevista con ‘As’, el mismo que en su tercera temporada comentó que “hay diferente presión mediática para Ferrari”. Esta es la peor parte de ser un piloto de Ferrari, como ya sabía Vettel y ahora está comprobándolo en primera persona.