La F1 ahoga la radio y rescata el instinto de cada piloto en busca de "errores" en carrera
Desde la próxima carrera sólo se podrán dar determinadas pistas al piloto desde el box, quedando a su elección la elección de estrategias en los mapas de motor, por ejemplo
"Nos tendremos que valer por nosotros mismos en la mayoría de situaciones", "creo que tendremos situaciones en las que el piloto no sepa qué hacer ya que hay varias cosas que podemos hacer cuando hay problemas". Las palabras de Nico Rosberg y Felipe Nasr, respectivamente, responden al volantazo que ha dado la Fórmula 1 buscando la esencia de cada piloto.
Hace 15 años la radio comenzó a apoderarse de la cabeza, las manos y los pies de los pilotos. Esta ayuda externa inició un diseño de 'robots' en busca de carreras perfectas y una partida de cartas que se sabía cómo terminaría. Cada vez más, la agresividad comenzó a medirse, la imaginación se iba restringiendo, el instinto arrinconando… Sensaciones por números. Las órdenes desde el muro dictaban a la persona que estaba en el monoplaza lo que debía hacer. Hoy en día sigue siendo así pero desde este 20 de marzo, en Australia, se comprobará qué efectos produce la prohibición por parte de la FIA de un buen puñado de mensajes por radio, con la consiguiente disminución de órdenes.
“Habrá menor comprensión de lo que esté ocurriendo en el coche porque la radio tendrá menos presencia. Ocasionará más errores y mayor variabilidad en el resultado, que es importante para el deporte. Será menos predecible”. A priori, a Toto Wolff, responsable del todopoderoso Mercedes, le interesa que no se mueva nada de la actual F1, la cual tiene bajo control. Sin embargo, es consciente de la necesidad de realizar algunos cambios para que antes de comenzar una carrera ya se sepa quién la va a ganar. Seguramente el margen que posee Mercedes daría para que sus pilotos cometan algún que otro error…
Emoción en la imperfección
El diccionario realiza su definición como un “interés, generalmente expectante, con que se participa en algo que está ocurriendo”. La emoción es un anhelo en el Gran Circo y se espera encontrar una porción de ésta en la imperfección del hombre. Cuanto mayor sea el factor humano, menor predictibilidad. Desde esta temporada, se retrocede unos pasos en su obsesión por controlar absolutamente todo. Serán coches menos teledirigidos por un 'mando a distancia' y la intuición, sensibilidad e inteligencia del piloto acapararán una cuota mayor.
Esta búsqueda de la perfección y optimización en cada rincón de la Fórmula 1 -deporte de ingenieros- ha provocado avances revolucionarios y tecnológicos tangibles y beneficiosos para el coche de calle y la sociedad. También ha dado situaciones tan asombrosas como la reciente protagonizada este invierno por Toro Rosso, capaz de reconstruir el interior de su monoplaza en tres meses dando los primeros pasos de este proceso a ciegas y sólo con unas fotografías como guía. Sin embargo, en el apartado deportivo la mencionada búsqueda por la eficacia está reñida con la aparición del factor sorpresa, algo que diferencia a los pilotos de las máquinas (salvo si éstas sufren un fallo de fiabilidad) y que define la base del deporte, de una competición.
Wolff pone un ejemplo con los distintas “estrategias con el funcionamiento del motor (mapas de motor) que establece una diferencia sustancial de eficiencia. Si un piloto utiliza distintos mapas de motor en distintas etapas de la carrera provocará que haya diferencias entre los coches y menos optimización. Tirará abajo la mejor planificación antes de una carrera por la inteligencia y el instinto de hacer lo correcto en el momento oportuno”.
Algunos mensajes que sí son válidos
“El piloto debe conducir el coche solo y sin recibir ayuda”, es lo que indica el artículo 20.1 del reglamento. Tanto la FIA como la F1 esperan reforzar dicho punto con las siguientes medidas, que entrarán en vigor desde ya:
- Indicar un problema crítico en el coche propio o en el de un rival.
- Instrucción de entrar al pitlane para reparar o retirar el coche.
- Información de los comisarios (bandera roja o amarilla, salida abortada, instrucciones similares o información del control de carrera).
- Condiciones anormales de la pista: húmeda, aceite, partes de un coche...
- Instrucciones para cambiar posición con otros pilotos.
- Dar a entender que has recibido el mensaje del piloto.
- Detalle del tiempo por vuelta o sector.
- Tiempo por vuelta de un rival.
- Hueco con respecto a un rival.
- Orden para cambiar la manera de pilotaje (más fuerte, apretar...).
- Aviso de tráfico.
- Dar el espacio existente entre los coches en clasificación para mejorar la posición del coche durante una vuelta limpia.
- Elección del neumático en la próxima parada así como información de las gomas de un rival.
- Número de vueltas que un rival ha realizado en un set de neumáticos durante una carrera.
- Información sobre la estrategia de un rival.
- Infracciones de un rival.
- Notificar si se puede usar o no el DRS
- Cuándo entrar a boxes.
- Recordar los límites del trazado.
- Mensajes del control de carrera.
- Información respecto al daño del coche.
- Número de vueltas que restan.
- Información de pruebas durante los entrenamientos (mapas de motor, aerodinámica…).
- Información meteorológica.
"Nos tendremos que valer por nosotros mismos en la mayoría de situaciones", "creo que tendremos situaciones en las que el piloto no sepa qué hacer ya que hay varias cosas que podemos hacer cuando hay problemas". Las palabras de Nico Rosberg y Felipe Nasr, respectivamente, responden al volantazo que ha dado la Fórmula 1 buscando la esencia de cada piloto.
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