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Ferrari entrega de manera no oficial los títulos de 2015 a Mercedes
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DESCARTAN UNA EVOLUCIÓN HASTA EL GP DE ITALIA

Ferrari entrega de manera no oficial los títulos de 2015 a Mercedes

"Monza va a ser otro punto clave en el desarrollo del coche". Esta semana, Sergio Marchionne apuntó a la carrera de casa para dar un salto hacia delante. Hasta entonces, Mercedes puede seguir tranquilo

Foto: Rosberg y Hamilton junto al ferrarista Sebastian Vettel.
Rosberg y Hamilton junto al ferrarista Sebastian Vettel.

"Monzava a ser otro punto clave en el desarrollo del coche". Esta semana,SergioMarchionneapuntó a la carrera de casa para dar un salto hacia delante. En Canadá, circuito donde el motor ha mandado más que en ninguno de los otros seis de este 2015, Ferrari se quedó sin pisar el podio. En Italia,Monza, la catedral de la velocidad, el propulsor volverá a ser clave. Allí, laScuderiatratará de matar dos pájaros de un tiro: dar un paso hacia delante yborrar el mal sabor de boca del año pasado, cuandoFerrari tropezó calamitosamente delante de los suyos.E, indirectamente, deja entrever que su oposición a Mercedes será insuficiente como para pelearle el Mundial (Ferrari es la segunda escudería). Es una manera no oficial de dar por segundo año consecutivo plenos poderes a Mercedes para conquistar los dos títulos, como era previsible.

Que el presidente de Ferrari apunte al GP de Italia como el siguiente paso para elF15-Tsignifica que el equipo de la estrella, salvo involución, puede dar por hecho que logrará un nuevo doblete, en Constructores y Pilotos. Desde que el Gran Circo pisó Europa, la ventaja mediaentre el primer Mercedes y el primer Ferrari en clasificación es de en torno a 7 décimas, mientras que en dos de las cuatro primeras carrerasun monoplaza italiano se había colado entre los dos germanos. Un hecho que, unido a la victoria deVettelenMalasia, daba cierto margen de confianza para pensar que Ferrari podría pelearel título hasta el tramo final de la temporada.

Atendiendo a las palabras deMarchionne, la desventaja de los deMaranellocon respecto a los deBrackleyprevisiblemente se mantendrá, como poco, hasta que la Fórmula 1 aterrice en suelo italiano, cuando resten ocho pruebas. Aunque la última vez que laScuderiaanunció que traería mejoras fue paraMontmelóyperdió terreno en relación a Mercedes (llevó mejorasmás efectivas viendo el resultado).

"Dejar de ser segundo para siempre"​

Carrera a carrera se va confirmando la previsión deFernando Alonsoque recordó recientemente y no ha sentado del todo bien en su ex equipo, cuando se refirióa que abandonó Ferraripara "dejar de ser segundo para siempre".MaurizioArrivabene, ante estareflexión, respondió que el equipo está por encima de cualquier cosa. "Sé que lo que ha dicho no es políticamente correctopero no me importa", dijo.

En cualquier caso, ya han mejorado las sensaciones y resultados cosechados hace un año, cuando tocaron fondo en carreras como las deBahrein-"ver a un Ferrari así de lento me duele", espetabaMontezemolomientras abandonabaSakhirantes de que acabase la carrera- o la deMonza, donde Alonso abandonó a la mitad yKimiRaikkonencruzó la línea de meta en novena posición... a más de un minutodel ganador,Lewis Hamilton. Ese minuto de la deshonra, en teoría, no volverá a ocurrir en este 2015.

"Monzava a ser otro punto clave en el desarrollo del coche". Esta semana,SergioMarchionneapuntó a la carrera de casa para dar un salto hacia delante. En Canadá, circuito donde el motor ha mandado más que en ninguno de los otros seis de este 2015, Ferrari se quedó sin pisar el podio. En Italia,Monza, la catedral de la velocidad, el propulsor volverá a ser clave. Allí, laScuderiatratará de matar dos pájaros de un tiro: dar un paso hacia delante yborrar el mal sabor de boca del año pasado, cuandoFerrari tropezó calamitosamente delante de los suyos.E, indirectamente, deja entrever que su oposición a Mercedes será insuficiente como para pelearle el Mundial (Ferrari es la segunda escudería). Es una manera no oficial de dar por segundo año consecutivo plenos poderes a Mercedes para conquistar los dos títulos, como era previsible.

Fernando Alonso