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¿Chasis o motor? ¿Por dónde atravesó Ferrari el blindaje de los Mercedes?
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EL CAMBIO RADICAL DE UN 'CARRO DE POLOS' EN 2014

¿Chasis o motor? ¿Por dónde atravesó Ferrari el blindaje de los Mercedes?

Al margen de la actuación personal de Sebastian Vettel y la estrategia de Ferrari, el SF15T resultó desconcertantemente brillante frente al dominio de Mercedes tanto en chasis como en propulsor

Foto: Sebastian Vettel durante el GP de Malasia (Efe).
Sebastian Vettel durante el GP de Malasia (Efe).

“Mucha gente habla de la velocidad de los motores pero, finalmente, es el coche y el apoyo aerodinámico lo que puede marcar una gran diferencia”. La sorprendente y hasta desconcertante victoria de Ferrari en Malasia parece remover algunos de los paradigmas básicos que definen la Fórmula 1 híbrida si atendemos a Lewis Hamilton. ¿En qué quedamos entonces?

Un monoplaza eficaz y ganador nace de la conjunción de una serie de factores de distinta naturaleza. Sin embargo, el diferencial marcado por la unidad de potencia se ha recitado como un mantra cotidiano. Y Mercedes ha sido el más alabado por la parroquia. Sin embargo, el que fuera paria entre el equipo alemán y Red Bull el pasado año, superado también por Williams, parece haber sido tocado por una varita mágica. Pero, ¿dónde?

De un 'carro de polos' a un coche ganador

“Hoy, las reglas ponen el énfasis en el motor y son extremadamente restrictivas en el chasis” lamentaba este mismo mes de febrero Adrian Newey, quien indirectamente así justificaba su dedicación a otros menesteres más estimulantes para su genio creativo: “No quiero decir que no haya diferencias entre los coches, pero es muy difícil ganar una ventaja competitiva con reglas tan restrictivas”. Y escuchábamos a Dietrich Mateschitz pedir “40 a 50 cv” más a Renault “porque el chasis iba a ser bueno”. Entonces, ¿qué tecla están tocando en Maranello?

“Ferrari ha dado un gran salto, es magnífico ver la evolución y es tanto con el chasis como con el motor” explicaba también el propio Hamilton: “Ni yo ni Mercedes esperábamos que rodaran tan rápidos como fueron, han hecho un trabajo increíble y tienen muy buen ritmo. Sabíamos que habían dado un salto, pero no lo rápido que fueron para nosotros”. ¿Quién hubiera imaginado algo semejante sólo dos semanas atrás?

Volvamos, por ejemplo, la vista al Gran Premio de Estados Unidos 2014 con dos carreras para terminar la temporada. Alonso terminó a segundo y medio del mejor tiempo el sábado y Raikkonen a 1.7. Bajo la bandera final, a 1 minuto 36 segundos del ganador. Raikkonen fue doblado y terminó antepenúltimo. Cierto es que Ferrari ya había mandado meses atrás al F14T al cubo de la basura, metafóricamente hablando, y todo el músculo se aplicaba al SF15T. El monoplaza italiano siempre fue un ‘carro de polos’ híbrido que sólo consiguió dos podios en toda la temporada.

¿Qué le ha pasado al motor de Ferrari?

Ni chasis, ni motor en 2014. Mercedes se sacude ahora la cabeza ante el derechazo en el mentón de un rival inesperado en Sepang. Ese chasis extraordinario que ya era el W05 en 2014 -ahora W06- ha sido superado por el SF15T. La capacidad de completar una carrera con dos juegos de neumáticos de Ferrari no pudo ser igualada por Mercedes. Bondades del chasis, evidentemente. Además, en un circuito de tan largas rectas y curvas rapidísimas (como la chicane), parece que el propulsor alemán tampoco ayudó a marcar diferencias.

Se esperaba que Williams metiera la cadera a Ferrari en ese pelotón perseguidor de Mercedes. Claro que el equipo británico le estará haciendo una resonancia magnética al SF15T. Cabe considerar pues el análisis tras la cita de Albert Park de su director de operaciones, Rob Smedley: “Si ves a los dos equipos que han dado un gran salto, son Ferrari y Sauber. ¿Y cuál es el vínculo común? Está claro que la unidad de potencia de Ferrari, que ha dado un paso adelante”.

Smedley atribuía claramente al motor dicha progresión: “Al cien por cien. ¿Quién acabó quinto? Sauber. ¿Dónde estaba el año pasado? Es un equipo que no invierte y han mejorado mucho”. Con un remate final: “El año pasado éramos 12 a 15 km/h más rápidos que Ferrari. Ahora estamos casi iguales, quizás ellos un poco más rápidos que nosotros”. En los entrenamientos clasificatorios de Sepang, Bottas y Massa marcaron los dos primeros registros de punta, pero Vettel clavó la misma velocidad de brasileño (327.6). Tanto Hamilton como Rosberg marcaron 323 km/h de máxima.

Mercedes, derrotado con todas las de la ley

Puede que las tórridas condiciones ambientales y de asfalto hicieron converger el rendimiento del W06 y el SF15T en Sepang. Quizás Mercedes pudo afilar mejor su estrategia y diversificar con sus dos pilotos para buscar más opciones. La realidad es que el W06, Hamilton y Rosberg fueron abatidos en casi todas las áreas por primera vez desde 2014, sin mediar averías mecánicas o incidentes (como el de Spa) de por medio.

No deja de resultar llamativo que Mercedes, que contaba ya con el motor más competitivo en 2014, hubiera utilizado para iniciar este campeonato 25 de los 32 tokens disponibles para su evolución. ¿Y Ferrari, con sólo 22 hasta Australia, se ha acercado en un terreno en el que tanto se arrastraba el pasado año? ¿Ha conseguido también un chasis espectacular y eficaz con el neumático capaz de marcar diferencias de propulsores a pesar de las frustraciones de Adrian Newey? En definitiva, ¿ha logrado Ferrari agujerear el blindaje de los plateados panzer alemanes? El Gran Premio de Malasia nos deja muchas preguntas abiertas y es el mejor legado de la memorable primera victoria de Sebastian Vettel con Ferrari.

“Mucha gente habla de la velocidad de los motores pero, finalmente, es el coche y el apoyo aerodinámico lo que puede marcar una gran diferencia”. La sorprendente y hasta desconcertante victoria de Ferrari en Malasia parece remover algunos de los paradigmas básicos que definen la Fórmula 1 híbrida si atendemos a Lewis Hamilton. ¿En qué quedamos entonces?

Sebastian Vettel Red Bull
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