¿Va de farol o no Red Bull para decir adiós a la Fórmula 1?

“Está elMuro de Jerusalen, donde te puedes poner delante y quejarte, quizás deberían ir allí”. Tras la contundente victoria de Mercedes en Melbourne, hubo un civilizado fuego cruzado entreToto Wolff y Christian Horner. El austríaco cerraba así su contundente respuesta al responsable deRedBull, que había pedido a la FIA que actuase según su potestad para igualar las prestaciones de los monoplazas.

Pero en una pinza perfectamente orquestada, Helmut Marko saltó a la palestra elevando el tiro y el calibre de la munición. “Evaluaremos la situación de nuevo, como cada año, y estudiaremos los costos e ingresos, y noestamos satisfechos podríamos contemplar la salida de la Fórmula 1”. ¿Va Red Bull de farol o busca remover una vez más las aguas políticas de la Fórmula 1?

El músculo del poder y el apoyo de Ecclestone

No es la primera vez que los austríacossacan su músculo de poder fáctico en la Fórmula 1 cuando la corriente no juega a su favor. Ya ocurrió, por ejemplo, en Barcelona 2013 ante el rendimiento de los neumáticosPirelli, cuando incluso llegó a intervenir Mr.“Primo Zumosol Mateschitz” directamente. “La Fórmula 1 ya no tiene nada que ver con las carreras clásicas”. Antes se habíaentrevistado con BernieEcclestone en Montmeló. Causa y efecto o no de su rara intervención pública y privada,los compuestos italianos se modificaron a mitad de aquellatemporada.

También el pasado año Horner y Marko intervinieron activamente proponiendo diferentes alternativasde nuevos motores para la Fórmula 1. Pero al margen de las especulaciones,puede que Marko ponga el dedo en la llaga económica que se está abriendo en el cuerpo de Red Bull. Porque el año pasado, el equipo austríaco quizás tuvo que abrirla cartera generosamente para apoyar a Renault en laevolución deuna unidad de potencia que ni siquiera rodó en pretemporada.

¿Cuánto costó la temporada pasada?

Aún no se conocen los resultados de 2014 y tampoco los equiposabren sus libros de cuentas en las redes sociales. Pero Dieter Rencken,periodista más especializado entemas económicos de la Fórmula 1, llevó a cabo una investigación según la cual elpresupuesto estimado de Red Bull en 2013 alcanzó casi340 millones de euros. De este, los patrocinadores aportaban casi 112, la FOM unos 140, con otros 56 millones por diferentesconceptos. Red Bull completóde su bolsillo 63 millones de euros. El beneficio del equipo austríaco alcanzó los 21 millones en un año con doble título mundial, que también consiguió desde 2010.

Pero en 2014Red Bull logró resultados másmodestosy,presumiblemente, quizás también lo fueronsus ingresos por este concepto.Si la factura de la nueva tecnología híbrida alcanza entre cuarenta y cincuenta millones por temporada, y también este año Renault ha empezado con gripe,quizás a Red Bull ya empiece a no cuadrarlelas cuentas tras las correspondientesauditorias de retorno mediático y financiero.

Normalmente, cuando Red Bull ha metido presión política, ha tenido moderado o relativo éxito.“Quién sabe si al final dirán adiós o no -declaraba Ecclestone al respecto-.Dieter (Mateschitz) es alguiendeportivo y no creo que quieran parar porque esté siendo batido, es más probable que pare si estuviera ganando”. Puede que en Red Bull acepten perder hasta cierto punto, pero no si la cartera ya duele. Ya saben, como en el chiste, no es cuestión también de tener queponer la cama.