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La Fórmula E sigue divertida: emoción hasta el final y otro nuevo ganador, Buemi
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alguersuari quinto, el mejor español

La Fórmula E sigue divertida: emoción hasta el final y otro nuevo ganador, Buemi

Tercera carrera eléctrica y de nuevo divertida, entretenida, con igualdad desde el principio y hasta el final, y mucha variación en las posiciones.

Foto: Sebastien Buemi celebrando su primera victoria en la Fórmula E (REUTERS/Andres Stapff)
Sebastien Buemi celebrando su primera victoria en la Fórmula E (REUTERS/Andres Stapff)

Tercera carrera eléctrica y de nuevo divertida, entretenida, con igualdad desde el principio yhasta el final, y mucha variación en las posiciones. En gran parte, por el importante papel que juega el cambio de coche y el ‘Safety Car’, que salió a pista en cuatro ocasiones. Hasta siete monoplazas no acabaron una carrera en la que el ‘novato’ Jean-Eric Vergne mostró ser el más rápido pero que, sin embargo, no pudo terminar la prueba con problemas en el coche (quizás por no ahorrar batería). La victoria del e-prix de Punta del Este fue para el suizo Sebastien Buemi, que pudo rodar el último giro con cierta tranquilidad tras el abandono de Vergne.

Jaime Alguersuari fue el mejor español con un quinto puesto. Oriol Serviá fue noveno, y Antonio García, con problemas en el monoplaza y en su debut en la categoría, undécimo.

Desde la ‘pole’ salía un recién llegado a las carreras eléctricas, Jean-Eric Vergne, y detrás suyo Nelson Piquet Jr que con rapidez le adelantó en la primera curva. Pocas variaciones hasta que en la cuarta vuelta daba su primera entrada el coche de seguridad, esta vez por el accidente de Sam Bird, quien llegaba líder del campeonato a Uruguay. Tres vueltas más tarde se reanudaba la manga y se daba inicio a las batallas sobre la pista. Vergne se pegaba al monoplaza de Piquet, Alguersuari luchaba con Heidfeld y después con Di Grassi… por detrás, Oriol Serviá, Antonio García y sobre todo, Matthew Brabham remontaban posiciones.

Vuelta diez, y otro ‘Safety Car’. Todos a ahorrar batería. Brabham hasta ese momento era el piloto que más había remontado: siete puestos. A la mitad de la carrera comenzaba el festival de cambios de coches en el garaje, absolutamente todos fueron a boxes, decisión casi obligada por un nuevo coche de seguridad en pista, el tercero, y provocado por otro piloto, Sarrazín, que se subió al piano y terminó en el muro al perder el control del monoplaza. Nick Heidfeld fue el más rápido en cambiar su coche, un minuto exacto, lo que provocó que se convirtiera en el líder de la prueba.

Antonio García "suelto" dentro de su coche

Muchos cambios: Buemi era ahora segundo, Vergne tercero (quien preguntaba extrañado por la radio si los dos monoplazas de delante ya habían pasado a boxes) y Piquet cuarto. Alguersuari perdió cinco plazas y era décimo, justo detrás suya estaba Antonio García que a partir de aquí le comenzaronproblemas: “Carrera para el olvido, la estructura del asiento se rompió en el segundo coche, con lo que iba "suelto" dentro. Debería haber parado (?) Si”, manifestó en su Twitter el propio piloto. D’Ambrosio era séptimo ganando diez plazas, al igual que Brabham, noveno. No obstante, poco le duró el liderato a Heidfeld que fue sancionado con un ‘drive through’ por usar la máxima potencia de su monoplaza mayor tiempo del debido.

Vergne exprimía su batería y se acercaba a Buemi. No le hizo falta seguir exigiendo a su monoplaza ya que quedaba otro ‘Safety Car’ por salir, el cuarto, y de nuevo por otro piloto que se subía al piano, esta vez el ‘agraciado’ fue el joven Matthew Brabham, que se quedó desolado tras su accidente. El ganador en Punta del Este seguía en juego y sólo quedaban dos giros cuando el coche de seguridad se retiró de la pista. Para suerte de Buemi, Vergne tuvo que abandonar y el suizo pudo entrar a meta sin tener que defender su posición del francés. Segundo fue Nelson Piquet, y tercero Lucas Di Grassi, nuevo líder tras conseguir su tercer podio en tres carreras. Destacó también Bruno Senna, sexto remontando desde la última plaza.

La próxima cita será el año que viene en Buenos Aires, Argentina, el 10 de enero.

Tercera carrera eléctrica y de nuevo divertida, entretenida, con igualdad desde el principio yhasta el final, y mucha variación en las posiciones. En gran parte, por el importante papel que juega el cambio de coche y el ‘Safety Car’, que salió a pista en cuatro ocasiones. Hasta siete monoplazas no acabaron una carrera en la que el ‘novato’ Jean-Eric Vergne mostró ser el más rápido pero que, sin embargo, no pudo terminar la prueba con problemas en el coche (quizás por no ahorrar batería). La victoria del e-prix de Punta del Este fue para el suizo Sebastien Buemi, que pudo rodar el último giro con cierta tranquilidad tras el abandono de Vergne.

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