Larga vida al rey Fernando, que volvió a hacer de las suyas en Silverstone

Como piloto, el GP de Gran Bretaña nos dejó, para mí, dos momentos que llamaron la atención: el accidente de Raikkonen y el gran duelo Alonso-Vettel a final de la prueba.Lo que vimos en Silverstone fue un espejo de lo que está pasando este año en Ferrari. Kimi Raikkonen está sufriendo mas de la cuenta y comete errores a los que no nos tiene acostumbrados.Fernando Alonso se luce en cualquier circunstancia y, mas aun si cabe, antes las adversidades.

Y la presión se notó el otro día con la maniobra que hizo el finlandés. Kimi cometió un error muy habitual en las primeras vueltas de carrera cuando estás peleando en la mitad del 'pelotón'. Se salió por la escapatoria para no perder tiempo, pero regresó sin soltar gas.El peligro era que tras el golpe se quedóatravesado en mitad de la recta mientras todavía venían varios pilotos por detrás.

Yo cometí un error muy parecido en la GP2 en el año 2007 en Monza. El pobre Zuber se llevó la peor parte ya que colpeó bruscamente conmigo y partió el monocasco de su fórmula. Charlie Whiting me sancionó con cinco posiciones en la parrilla de la carrera siguiente una vez analizada mi telemetría.Lo raro es que Raikkonen no se hubiera llevado ninguna sanción porque la maniobra fue realmente peligrosa.

La dinámica fue diferente, pero un ejemplo de sus posibles consecuencias lo tenemos en el accidente que sufrió el italiano Alessandro Zanardi en Lausitzring, 2001 cuando se salió de la pista y volvió sin control a ella. Cruzado en medio de la pista otro monoplaza lanzado a toda velocidadle arrancó de cuajo el morro. Ya sabemos todos lo que le ocurrió… El italiano ha tenido el inmenso mérito en convertirse después en campeón de ciclismo paralímpico. Massa pudo haber embestido a Raikkonen de forma parecida, pero le vio a tiempo y reaccionó con unos reflejos increíbles. Realmente, hubo mucha suerte de que no ocurriera nada dramático.

Sacar petróleo de las profundidades

Si Kimi es la cruz en Ferrari,Fernando volvió a ser la cara de la moneda, y demostró quién es a poco que tenga por lo que luchar. Como piloto, debe ser frustrante su situación, sacándo petróleo de las profundidades de su coche. Es triste que pasar del quinto puesto se considere un éxito para un piloto como él.

Sinceramente, quien haya competido con un volante en las manos sabe hasta qué puntolo de Silverstone fue digno de admiración. En las primeras vueltas adelantó a ritmo de un piloto por vuelta. Daba igual cómo, buscaba cualquier trazada por el exterior, el interior, en curvas rápidas, en las medias o lentas, engañando y siendo audaz.Cuando ves a otros pilotos en acción, te das cuentala cantidad de recursos que puede tener Alonso.

Un Alonso bastante agresivo

Los mas excépticos podían pensar que es normal adelantar a los “de mitad de parrilla” pero ¿ Y duelo conVettel? El Red Bull es el coche con mayor carga aerodinámica de la parrilla y el Ferrari, uno de los que peor tracciona.Si sumamos ello el problema con la piedra en el alerón, que le restaba carga, y que llevaba neumáticos mucho mas usados durante varias vueltas, objetivamente estaba en inferioridad de condiciones. De ahí que tuviera más valor su actuación.

Sobre el papel, Fernando no debía tener ninguna opción frente a Vettel o, al menos, no las tenía para aguantar tanto tiempo. Primero ya le pegó una 'lijada’ impresionante en Copse, en séptimavelocidad, en una curva de casi fondo, por fuera.

Luego Fernando estuvo bastante agresivo.Nadie esperaba que alargara la salida de la curva de 'Brooklands'como lo hizo ni siquiera el propio Vettel. Había que escucharleluego a este en la radio, gritando que se hubieran chocado de no haberse quitado de enmedio. Pero fue maniobra limpia, no empujó a su rival, no se fue a por él deliberamente para impedirle el adelantamiento. Lo que hizo fue aprovechar la pista al máximo de forma implacable.

Cada uno aprovechó todos sus recursos

Al final, lucharon cuerpo a cuerpo hasta el último metro de la recta, se intimidaron dejándoseel mínimopero suficiente espacio entre ellos, sin moverse un milímetro, lo que no es nada fácil.Y Vettel pasó. Fue espectacular,un auténtico lujo poder ver en acción a dos campeones del mundo durante tantas vueltas.

Cuando eres piloto, valoras mejor que nadie el enorme virtuosismo de los dos. Por ejemplo, Anthony Davidson, piloto de Toyota en Le Mans y comentarista de Sky, hablaba maravillas de Fernando Alonso tras analizar desdediferentes ángulos del duelo. Y Vettel también estuvo magnífico, incluso cuando buscaba la ventaja yse salía de la pista.Porquecada uno aprovechó todos sus recursos en un duelo total.

En definitiva, Fernando sigue siendo el mejor piloto de la parrilla, y en Silverstone no hizo mas que ratificarlo. No ganará por falta de coche, pero los destellos de calidad que deja a la menor oportunidad son indiscutibles. Larga vida al rey… Ah, y un coche para ganar, por favor.