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De la Rosa, Glock y Kovalainen, cuando la experiencia es un grado
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ÚNICOS QUE OFRECEN EXPERIENCIA EN LUGAR DE UN FUERTE PATROCINIO

De la Rosa, Glock y Kovalainen, cuando la experiencia es un grado

Son tres tipos de puestos de trabajo que tienden a desaparecer. Y no porque se haya impuesto una reforma laboral en la Fórmula 1, sino porque

Foto: De la Rosa, Glock y Kovalainen, cuando la experiencia es un grado
De la Rosa, Glock y Kovalainen, cuando la experiencia es un grado

Son tres tipos de puestos de trabajo que tienden a desaparecer. Y no porque se haya impuesto una reforma laboral en la Fórmula 1, sino porque el hábito de sacar alguna rentabilidad económica por ceder un volante se ha vuelto a generalizar en la Fórmula 1. Pedro de la Rosa (HRT), Timo Glock (Marussia) y Heikki Kovalainen (Caterham)* ofrecen experiencia en lugar de patrocinio. Son tres casos excepcionales y, a la vez, necesarios para que los tres equipos ‘novatos’ crezcan con los sabios consejos de veteranos de guerra.

Pagar por correr en Fórmula 1 no es novedad. Es una práctica que se lleva realizando desde hace décadas y que ahora está en un punto álgido. Con la falta de patrocinios directos, las escuderías buscan a pilotos que los aporten. Williams, con Pastor Maldonado y Bruno Senna, es la que más tajada saca anualmente, cerca de 50 millones entre ambos.

Si De la Rosa aterrizó en HRT de cara a 2012  fue porque contaba con las garantías suficientes para cobrar su salario. Hace dos años, el equipo de José Ramón Carabante le hizo una oferta pero sin la seguridad total de que percibiría el montante acordado. El de McLaren, ante esta situación, prefirió quedarse en Woking. Para 2012, Narain Karthikeyan será el encargado de proporcionar el colchón económico de unos 8 millones de euros con la publicidad de Tata. El barcelonés pondrá al servicio de la escudería española sus conocimientos acumulados durante los trece años que lleva en el Gran Circo.

Petrov y la petroquímica Sibur

El ‘De la Rosa’ de Caterham es Heikki Kovalainen, a quien se le atribuye una buena parte del éxito del equipo propiedad de Tony Fernandes. El finés ha sido el encargado de evolucionar un monoplaza que ha sido el mejor de los tres nuevos. Su compañero Vitaly Petrov ha fichado gracias a Sibur, la mayor empresa petroquímica de Rusia y Europa del este. En Marussia, por su parte, han apostado por la continuidad de Timo Glock, uno de los pocos pilotos en toda la historia que pueden presumir de haber sumado puntos en su debut, hace ya nueve años. Como De la Rosa en su día. Su ‘pareja’, el novato Charles Pic, también ha tenido que desembolsar para estar ahí.

Salvo Caterham, HRT y Marussia, en ningún otro equipo prevalece la experiencia por delante de cualquier otra cualidad del piloto. Sahara Force India, compuesto por los jóvenes Paul Di Resta (25 años) y Nico Hulkenberg (24), pertenecen a Mercedes y se supone que existe un acuerdo para que la marca alemana les suministre componentes a un precio rebajado (motor, kers…). Por tanto, el equipo indio también recibe ventajas económicas por la alineación de sus pilotos, más allá de que sean considerados dos hombres de gran potencial.

En Sauber, tanto Sergio Pérez (Telmex, Cuervo, Interprotección, Claro…) como Kamui Kobayashi (NEC, Mitsubishi, Takata…) llevan dos años pilotando un Fórmula 1 gracias a empresas compatriotas suyas.

Cobrar por conducir, un privilegio

Las escuderías restantes son diferentes. Sus dos pilotos cobran por conducir y son los sponsors los que llaman a la puerta y no al revés. En Lotus, aunque indirectamente, la petrolera francesa Total usará la imagen de Romain Grosjean para hacer afición en su país. En McLaren, Vodafone hace lo propio con Jenson Button y Lewis Hamilton. La alemana Mercedes, con el mismo fin, eligió a sus compatriotas Michael Schumacher y Nico Rosberg para liderar el proyecto.

Red Bull, con dos equipos, es la que tiene una organización más compleja dentro de la F1. Su estructura se divide en tres estamentos principalmente: los pilotos canteranos, los de Toro Rosso y los que corren en Red Bull. En ella, el deportista y su entorno está 100% concentrado en el aspecto competitivo. No tienen necesidad, de buscar patrocinadores más allá de los personales. Reciben un sueldo desde el primer momento. Lo peor de este sistema es la presión a la que se vive sometido y que, cuando  se sale de su rueda, el piloto aterriza en la realidad económica de la Fórmula 1, como le ha pasado a Jaime Alguersuari.

*De la Rosa (41 años) ha corrido 86 grandes premios y va a disputar su decimocuarta temporada en 2012. Glock (cumplirá 30 años en marzo) ha iniciado 50 carreras y afronta su novena pretemporada. Kovalainen (30 años) lleva 51 pruebas en cuatro campañas.

Son tres tipos de puestos de trabajo que tienden a desaparecer. Y no porque se haya impuesto una reforma laboral en la Fórmula 1, sino porque el hábito de sacar alguna rentabilidad económica por ceder un volante se ha vuelto a generalizar en la Fórmula 1. Pedro de la Rosa (HRT), Timo Glock (Marussia) y Heikki Kovalainen (Caterham)* ofrecen experiencia en lugar de patrocinio. Son tres casos excepcionales y, a la vez, necesarios para que los tres equipos ‘novatos’ crezcan con los sabios consejos de veteranos de guerra.

Pedro Martínez de la Rosa