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Glamour y la mejor tecnología: así son las tres mejores estaciones de Estados Unidos
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Vail, aspen y MAMMOTH MOUNTAIN

Glamour y la mejor tecnología: así son las tres mejores estaciones de Estados Unidos

Nieve de calidad, remontes de última generación, apre-ski de calidad, famosos y precios muy altos. Así son las tres mejores estaciones de Estados Unidos.

Foto: Fotos: aspen skiing company
Fotos: aspen skiing company

Nieve de gran calidad, remontes de última generación, apre-ski más que divertido con muchos famosos… y precios muy altos. Así son las tres mejores estaciones de esquí de Estados Unidos.

Unos se llevan la fama… y otros cardan la lana. Ese refrán tan español es aplicable cien por cien a la estación de Vail, no tan conocida como Aspen a este lado del Atlántico, pero que es, con diferencia, la mejor de toda América del Norte, como ha reconocido la revista Ski Magazine en 13 de los últimos 15 años. Quienes se decanten por Vail como destino turístico van a tenerlo todo al alcance: una estación de ensueño, remontes de última generación, una villa hecha hace 70 años a imagen y semejanza de los pueblos alpinos con mucha vida cuando se termina la jornada de nieve y un ambiente VIP del que pocos destinos pueden presumir.

La estación está dividida en zonas de pistas convencionales y otras completamente salvajes, que aquí serían fuera-pistas, pero que allí están marcados dentro de los límites, aunque con un aviso cuando vas a cruzar esa línea roja: “sólo expertos”. Son los llamados ‘Back Bowls’, o Valles de Atrás, unas inmensas franjas nevadas en las laderas de la montaña en estado completamente salvaje, ya que apenas son pisadas después de las nevadas. Miles de pinos son parte del decorado en el que hay que estar muy atento para no caer en alguna de las trampas naturales del trazado.

Pero no sólo hay esquí para profesionales. En Vail, casi el 10 por ciento de sus 195 kilómetros de pistas están dedicadas a los debutantes, que tienen a su disposición una de las mejores escuelas de esquí de todo Estados Unidos. Además, hay 4 snowparks y diversión para todos los gustos, aunque no para todos los bolsillos, ya que compiten con sus vecinos de Aspen por vender el forfait más caro del mundo. En Estados Unidos, comprar directamente en taquillas para el mismo día es realmente caro y Vail ha batido su récord vendiendo un forfait para el día de Navidad por la friolera de 160 dólares.

Después de esquiar, Vail es otro gran destino para practicar el apre-ski: bares, terrazas, tabernas y restaurantes se reparten a los aficionados que pueblan sus calles sin prisa por volver a hoteles y apartamentos. Aunque el resort cierra pronto (a las 15:30 se acaba la jornada de esquí), son muchos los que apuran hasta última hora para conocer el otro Vail. Y merece la pena.

Es, posiblemente, el destino más deseado de todo el mundo en cuanto a esquí se refiere. Si preguntas a cualquier aficionado dónde le gustaría ir al menos una vez en la vida, muchos te responderán que a Aspen, en Colorado. Conocido mundialmente por ser el destino de muchas de las ‘celebrities’ del país de las barras y estrellas, Aspen tiene todo lo que puedes desear: casi 500 kilómetros de pistas repartidas entre cuatro estaciones distintas, nieve en perfectas condiciones para practicar el esquí, un clima idóneo que genera nieve constantemente y un precioso pueblo turístico que atrae cada temporada a cientos de miles de personas.

El forfait de Aspen da derecho a esquiar en cuatro estaciones diferentes: Aspen, Aspen Highlands, Aspen Snowmass y Buttermilk. En total, 500 kilómetros de pistas para todos los niveles interconectadas por un ski-bus que te permite pasar una semana entera en este destino sin apenas repetir recorrido. Los más expertos disfrutarán como enanos con los 150 kilómetros de pistas negras, sobre todo ubicadas en Aspen Highlands, con vertiginosos descensos y fuera-pistas entre cientos de árboles, mientras que los noveles tienen en Buttermilk su destino idóneo: ambiente familiar, pistas muy anchas y bajadas con pendientes controladas para ir perfeccionando el estilo.

La montaña apenas baja del medio metro de espesor gracias a las condiciones climatológicas de la zona: tiempo muy frío y muy seco en un estado en el centro de Estados Unidos, Colorado, alejado de los dos océanos, lo que le resta humedad. No es casualidad que personajes como Antonio Banderas, Jack Nicholson, Michael Douglas, Kevin Costner, Paris Hilton o Roman Abramovich hayan elegido esta estación como su destino vacacional en invierno.

Si la montaña y sus pistas son formidables, el pueblo de Aspen lo es aún más. Con apenas 7000 habitantes, sus construcciones victorianas conforman un precioso pueblo de montaña que parece sacado de un cuento. Está orientado exclusivamente al visitante, de ahí que pese a sus escasas dimensiones, cuente con más de 100 restaurantes, 200 tiendas y todo tipo de servicios. El apres-ski debe comenzar en la falda de la montaña, en el famoso Ajax Tavern, y a partir de ahí alargarse hasta que aguanten las fuerzas.

Lejos de las montañas de Colorado y muy cerca del Parque Nacional de Yosemite, Mammoth Mountain es la estación más grande de California, pero también atrae a famosos como Vail y Aspen al ser el punto más alto para esquiar de todo el estado y contar con muy buena nieve junto a los remontes más modernos.

La estación tiene casi mil metros de desnivel, se puede esquiar desde comienzos de noviembre hasta bien entrado el mes de junio e incluso algún año ha estado abierto el día del 4 de julio, festivo en Estados Unidos. Por ello, es una de los resorts que más días al año permanece abierto en América. Mammoth Mountain está dirigida a un público familiar y al aficionado no excesivamente experto ya que tiene muchas pistas verdes y azules, más de la mitad de sus 150 bajadas. Sin embargo, eso no quiere decir que no tenga descensos complicados y desniveles naturales que hacen que bajar las faldas de la montaña sea una auténtica delicia.

Los habitantes de Los Ángeles la tienen como su montaña favorita y no es difícil cruzarse con una de las parejas de moda en Hollywood, la de Angelina Jolie y Brad Pitt, que se han hecho aquí su residencia de invierno. De hecho, la tranquilidad que se respira los días de diario se termina cuando llega el viernes y son muchos los californianos que se vienen a Mammoth Mountain a pasar el fin de semana. Además de por la nieve propiamente dicha, otra de las razones del éxito de esta estación es el apre-ski, muy divertido con bares, tabernas, restaurantes y clubes con DJ’s de moda sonando en directo para intentar reclutar a los más fiesteros.

Nieve de gran calidad, remontes de última generación, apre-ski más que divertido con muchos famosos… y precios muy altos. Así son las tres mejores estaciones de esquí de Estados Unidos.

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