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Javalambre y Valdelinares: las estaciones más fáciles de España están en Teruel
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NI UNA PISTA NEGRA EN 30 KILÓMETROS DE NIEVE

Javalambre y Valdelinares: las estaciones más fáciles de España están en Teruel

En dos estaciones que suman 28 kilómetros esquiables no hay una sola pista negra y las rojas se pueden contar con los dedos de una mano.

Foto: Vista general de la estación de Javalambre
Vista general de la estación de Javalambre

En dos estaciones que suman 28 kilómetros esquiables no hay una sola pista negra y las rojas se pueden contar con los dedos de una mano. El resto, azules y verdes. O, lo que es lo mismo, el sueño de todo esquiador que empieza a dar sus primeros pasos por el blanco elemento. La nieve de Teruel también existe y, para los no palilleros, cada estación dispone de un snowpark.

Separadas por apenas 70 kilómetros, Javalambre y Valdelinares son las dos estaciones de esquí de Teruel y la referencia para los aficionados del norte de la Comunidad Valenciana que buscan pistas cercanas. Aramon, la empresa que gestiona ambas estaciones (también las de Cerler, Formigal y Panticosa) ha unificado los forfaits, por lo que comprando el pase de una estación podrás esquiar en ambas. No es útil para un solo día, pero sí para los abonos de temporada, ya que puedes elegir dónde está la mejor nieve en cada subida a la montaña.

Los precios no son baratos, ya que esquiar en fin de semana (temporada alta) cuesta 33 euros diarios. Demasiado para estaciones que, por separado, apenas llegan a los 14 kilómetros. Sin embargo, durante la semana (temporada baja), los precios se reducen hasta los 20 euros, una cifra que sí aporta valor a la escapada. Para los aficionados que llegan desde provincias cercanas existe un ‘Bus Blanco’, con salidas programadas desde Cuenca, Valencia y otras ciudades, al precio de 41 euros en los que se incluye el forfait diario. A favor de la estación queda el dato de que hay descuentos para grupos, familias numerosas, personas con discapacidad o que dispongan de carné joven.

Valdelinares ha aumentado en casi seis kilómetros sus zonas esquiables en los últimos años gracias a su ampliación con tres nuevas pistas: ‘Bujarones’, verde de casi 2 kilómetros y muy sencilla de bajar; ‘Monegro’, azul de 2 kilómetros y medio que discurre por el extremo norte de la estación y ‘La Chaparrilla’, una roja de 1300 metros que corta a Monegro y que es la más difícil de las tres. Además, la ‘Pista del Bosque’ se ha ensanchado y ha pasado de nivel rojo a azul, manteniendo su desnivel y longitud de casi un kilómetro.

Esta estación es un paraíso para los debutantes que se sentirán como en casa si están dando sus primeros pasos sobre la nieve o se lanzan por las pistas después de aprender las nociones básicas, porque el resto son dos pistas rojas, Tajera y El Bolaje, en el extremo sur, y pistas azules y verdes hasta completar 14 kilómetros esquiables, todos ellos dotados de sistema de innivación.

Javalambre está dividido en dos sectores: Sabina (con base a 1850 metros) y Lapiaz (a 1650), con un techo de 2000 metros. Sus condiciones climatológicas, sin embargo, son difíciles ya que durante muchos días de la temporada se viven jornadas muy cálidas y con nieve húmeda, lo que dificulta los trabajos de pisado con las máquinas. Para ello, todas las pistas de la estación cuentan con sistema de innivación que llevan funcionando desde varias semanas antes de que comience la temporada para que la nieve esté cada día en las mejores condiciones posibles.

La mayor novedad de la estación en los últimos tiempos es el traslado del Snowpark a la pista de Amanaderos, donde los amantes de esta disciplina tendrán mejores posibilidades y diversión garantizada. Esa pista de Amanaderos (azul) y la de El muro (roja) son las más demandadas por los habituales de Javalambre, que tiene además una pista azul llamada Vuelta a Casa en la que podrás cruzar la estación de lado a lado.

Ni en Javalambre ni en Valdelinares existe la posibilidad de dormir a pie de pista, pero en ambos casos hay opciones recomendables apenas a 10 minutos. En el primer caso, la localidad más cercana es Camarena de la Sierra, un pequeño y pintoresco pueblo de apenas 160 habitantes. Ahí, el Hotel Esmeralda es la mejor opción, con un precio de 60 euros por habitación doble con el desayuno incluido. Para los que buscan algo más económico, el Albergue de Montaña de Camarena ofrece camas en habitación compartida desde 15 euros y habitaciones dobles por 40. Eso sí, si quieres ocupar las habitaciones dobles, cuádruples o para 6 personas, tendrás que pasar (y pagar) un mínimo de dos noches.

En el caso de Valdelinares, el propio pueblo homónimo está a 9 kilómetros y ahí es famoso Casa Vicenta, un hostal familiar en el que dormir en temporada alta cuesta 65 euros por habitación doble con desayuno y 90 si lo que reservamos es la media pensión. Por el otro lado está La Virgen de la Vega, a unos 12 kilómetros de la estación, donde el Hostal Villa María es la opción indicada: un Hotel-Apartamento muy bien equipado y donde se puede dormir en temporada alta por 70 euros la habitación doble, con el desayuno incluido.

Si el día no acompaña, las sierras de Javalambre y Gúdar son perfectas para la práctica de senderismo y barranquismo, para hacer rutas quads o practicar la bicicleta de montaña. Los expertos en este último deporte tienen en Camarena de la Sierra una prueba muy conocida, la Mata-Hombres, con 82 kilómetros de subidas y bajadas por las montañas entre preciosos paisajes naturales.

En cuanto a la gastronomía de la zona, el jamón de Teruel requiere una degustación obligada, así como el resto de sus famosos embutidos. También tiene fama el cordero criado en la sierra y en muchas fondas y restaurantes se podrán degustar gachas y migas a base de harina de trigo, habituales en la alimentación de pastores y gente del campo.

En dos estaciones que suman 28 kilómetros esquiables no hay una sola pista negra y las rojas se pueden contar con los dedos de una mano. El resto, azules y verdes. O, lo que es lo mismo, el sueño de todo esquiador que empieza a dar sus primeros pasos por el blanco elemento. La nieve de Teruel también existe y, para los no palilleros, cada estación dispone de un snowpark.

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