La Quebrantahuesos, la carrera en la que compites "si compras un rasca y gana", suspendida

"Íbamos a salir a las 6 para estar allí a mediodía y recoger el dorsal, como hacemos siempre, pero…". Esto cuenta a El Confidencial Iván González, uno de los participantes de la Quebrantahuesos, una marca cicloturista en la que compiten alrededor de 12.000 personas. Y que fue suspendida a escasas 30 horas de su comienzo por la ola de calor que se espera este fin de semana en el Pirineo de Aragón.

"Debido a las condiciones climatológicas adversas previstas en el recorrido de las marchas Quebrantahuesos y Treparriscos para el próximo sábado, la organización, por responsabilidad y siguiendo las recomendaciones y los consejos de las autoridades españolas y francesas, ha decidido aplazar la edición 2022 prevista para este 18 de junio", rezó el comunicado. De momento, no se ha hablado de otra fecha, aunque parece que la organización ya busca una. "Durante los próximos días la organización estudiará la fecha más idónea para la celebración de la carrera".

La noticia no ha sentado nada bien a los participantes, que ya tenían planificado todo el fin de semana. De hecho, algunos realizan las reservas con un año de antelación. Lo explica González: "Nosotros somos de Talavera de la Reina (Toledo) y solemos ir seis a la marcha. Tres salen desde Madrid y otros tres salimos desde Talavera. Teníamos la casa alquilada desde el año pasado. También teníamos reservas de comidas y cenas en un par de sitio y todo preparado: maleta, wifi, nutrición, el certificado médico…". Justifican el enfado en el aviso tardío por parte de la organización. "Sabían con antelación las previsiones meteorológicas. Además, saben que llevamos toda la semana con la ola de calor, no entiendo por qué han esperado al último día para comunicarlo".

Poco margen de actuación

La información les llegó a apenas doce horas de salir: "La organización nos envió un mail con el comunicado a las cuatro y media del jueves. Y salíamos el viernes a las seis". Recibieron la noticia de que no se corría la carrera, pero nada acerca de la devolución del dinero.

La participación en la Quebrantahuesos va por sorteo. Para entrar en él, tienes que pagar cuatro euros. "Es como si compraras un rasca y gana por ese precio". Si te eligen, compites; si no, pierdes ese dinero. A ese importe, hay que añadirle 94 euros si no estás federado y 72 en caso de que sí lo estés. "En total, yo he pagado casi 100".

Los hosteleros se han visto afectados, ya que las reservas se han anulado casi todas. "Nosotros no hemos tenido problemas para anular en los restaurantes". El problema llega con los alojamientos, donde muchos corredores, como el caso de Iván, han dado una señal. "Estamos negociando para ver si nos dejan la casa en otra fecha o si nos devuelven el dinero".

Los extranjeros, los grandes perjudicados

Los españoles se han adaptado como han podido, porque muchos, al viajar en coche, aún no se habían desplazado. No es el caso de los extranjeros, a los que les ha pillado con los billetes de tren o avión. "Ese es el problema de suspenderla con tan poco tiempo de antelación, los desplazamientos. A esta carrera viene gente de todos los lugares: Canarias, Alemania, Austria… Somos 11.000 corredores y un gran porcentaje de extranjeros".

Los tres últimos años han sido para olvidar en esta carrera. En 2020, no se compitió por la irrupción del coronavirus. En 2021, las circunstancias no acompañaron. "El año pasado corrimos y hubo granizos y tormentas durante las ocho o nueve horas que duró la prueba". Este año, la suspensión ha llegado in extremis. "Si tenemos en cuenta las circunstancias del año pasado, es inexplicable que se suspenda en 2022 por la ola de calor".

La decepción llega hasta el punto de que algunos, como Iván, no correrán si cambian de fecha: "Se pierde el interés después de lo ocurrido el año pasado y este; se te quitan bastante las ganas…". Además, el reajuste de los calendarios es otro hándicap. "Tienes que cuadrar todo otra vez y eso es muy difícil. Además, tienes que estar preparado para la prueba porque son 200 kilómetros".