Es noticia
Crono y final: Hindley gana el Giro; Landa trinca podio
  1. Deportes
  2. Ciclismo
Última etapa del campeonato

Crono y final: Hindley gana el Giro; Landa trinca podio

Hubo tres españoles entre los 10 primeros: Juanpe López (décimo), Pello Bilbao (quinto) y Mikel Landa, que tocó el podio (tercero). Esta edición ha tenido muy pocos atractivos

Foto: Hindley es el ganador del Giro de Italia. (EFE/Maurizio Brambatti)
Hindley es el ganador del Giro de Italia. (EFE/Maurizio Brambatti)

'Se acabó el Giro de Italia, y es una de las mejores noticias que ha dejado. Lo que no es, seguro, una buena señal para esta competición. Edición sosa, pero sosa de cojones. Gala humorística con Los Morancos, Jaimito Borromeo, Félix el Gato y tu primo, el que hace monólogos. O peor. Habrá tiempo para analizar causas y razones, pero claro candidato a Giro más ramplón de entre todos los que he visto (y he visto uno que se jugaron Hesjedal y Purito Rodríguez, oigan).

La última crono, en Verona, es buen ejemplo de toda esta prueba. Precisamente lo más salvable fue el entorno, porque la Arena de Verona es uno de esos sitios que se te cuelan en la retina y ya no los puedes olvidar. Que la organización del Giro decidiera cubrir esa imagen tan icónica con una pantalla gigante dice demasiadas cosas...

Bueno, resumen en pocas palabras... Victoria para Matteo Sobrero. Buen contrarrelojista, campeón de Italia, salió centrado y a morir. Como era un esfuerzo de 20 minutos (pónganse el video de Milán 92 y lloren un ratito) tampoco parecía que pudieran darse distancias enormes. Con todo... 20 segundos a Arensman (activo las últimas jornadas), y cuarenta a Mathieu Van der Poel, que este mes a disputado todo por Italia, salvo Eurovisión y la Seria A. Cuarto fue Mollema, alguien que se mueve bastante sobre la bici, lo que nos da cierta idea de lo muy en serio que muchos se tomaron esta última etapa.

placeholder Mikel Landa finalizó tercero en el Giro de Italia. (EFE/Maurizio Brambatti)
Mikel Landa finalizó tercero en el Giro de Italia. (EFE/Maurizio Brambatti)

Carapaz y Hindlye, muy parejos

Los de la general, por ejemplo. O algunos. Hablemos de Mikel Landa. Que hizo el 76, amigos. Que perdió tres minutos en 17 kilómetros, que sacó casi seis kilómetros menos de media respecto a Sobrero. Tuvo que ir silbando, o haciendo fuerza para no hacerse caca por alguna enfermedad que haya cogido, porque si no... El tercer puesto lo tenía fijo, salvo caída, pero un esperpento así afea pelín el asunto. Que se ha ido hasta los tres minutos y medio con Hindley, y ayer por la tarde estaba en condiciones de atacar el Giro...

Carapaz y Hindley, por su parte, anduvieron muy parejos, como toda la carrera, salvo tres kilómetros en Fedaia. Así de duro, así de fuerte. Ambos en el entorno del minuto y medio, ambos perdiendo también demasiado. Todos los que nos han hablado de ritmos asesinos, medias inasumibles y pelotones rodando como nunca antes (justificando de esa forma la ausencia de ataques) deberían revisar un poco esta última crono. O se hizo de cachondeo o da cierta sensación atlética... baja. Vamos, que los eslovenos deben estar en casita (o en concentraciones de altura, esta gente siempre anda por concentraciones de altura) pelín chinaos, con sensación de que, joder, dos acelerones escogidos, guardar los otros días y me había llevado una maglia para la colección. Al menos eso es el feeling desde fuera, qué sabré yo, que salgan los pros a explicarnos el infierno de estas tres semanas. Pero... a mí me da en la nariz que de prestaciones atléticas este Giro anduvo a un nivel bajo, bajo, bajo...

(Dejando al margen Fedaia desde Malga Ciapela, que lo hicieron a toda hostia... si guardaron tres semanas para eso o se tocaron las gónadas 19 etapas yo ya no lo sé).

Quizá eso explica, en parte, la composición del Top Ten. Que es bien curioso, el Top Ten de este Giro. Es Top Ten y, a ratos, Master 30, Mister UK y “ese chico del que usted me habla pero no caigo en cómo es”. Antes de continuar... podíamos haber analizado la clasificación hace 24 horas, porque esta crono cambió solo un puesto entre los treinta primeros (enhorabuena a Juanpe, agraciado). Vamos, que distancia de cachondeo y desarrollo 'chichinabesco'.

placeholder Juanpe López sucedió a Contador en 'La maglia rosa' en esta edición. (EFE/Maurizio Brambatti)
Juanpe López sucedió a Contador en 'La maglia rosa' en esta edición. (EFE/Maurizio Brambatti)

La sorpresa de Juanpe

En fin. Que están los viejos. Nibali, por ejemplo, cuarto y hasta coqueteando algunos días con premios mayores (aunque de aquellas estaba por ahí Almeida, y todo parecía distinto). Atacó cuando pudo, penó la mayoría del tiempo. Fue un Nibali poco Nibali, pero es que Nibali llevaba sin ser Nibali casi un lustro, así que... Como despedida es chula, algo anónima para quien tanto amó los focos, pero chula. Lo echaremos de menos.

Entre los viejos está también Pozzovivo, que debutó en 2005 con el Cerámica Panaria, oigan. Tiene 39 años, pero sobre la bici aparenta 72, porque corre contrahecho, con las piernas muy abiertas, la chepa colgante, los brazos desacompasaos. Lleva muchas operaciones en el cuerpo, y ya solo puede avanzar de esa forma (tampoco antes era un estilista, ¿eh?), pero resulta difícil mirarlo sin una cierta sonrisa de ternura en el rostro. Anduvo aquí como siempre... empezando fuerte y diluyéndose según pasaban los días. En Pozzovivo puedes confiar.

Undécimo hizo, y merece la pena apuntarse, Alejandro Valverde. 42 tacos, edad de estar hoy comiendo berberechos mientras miras la carrera por televisión. Pasa que Valverde sigue corriendo, porque le gusta, porque igual no sabe hacer otra cosa, porque tiene muchos churumbeles en casa... por lo que sea. Y rinde. Muy por encima de lo esperable, muy por debajo de lo que fue. Su Giro es anónimo, como el de todo Movistar (mención a Sosa, auténticamente horrible), y no puedes dejar de preguntarte si, joder, no hubiese rentado más escoger dos o tres etapas y haber asomado allí la cabezuca. En fin, tampoco vamos a cambiar la forma en que corre un tío que ganó en Envaliera allá por 2003, delante de Frigo, Osa, Piépoli, Mancebo, Cárdenas y Nozal...

placeholder Pello Bilbao finalizó en el quinto puesto. (EFE/Maurizio Brambatti)
Pello Bilbao finalizó en el quinto puesto. (EFE/Maurizio Brambatti)

El quinto puesto de Pello Bilbao

Un escalón intermedio en esto de la vejez lo ocupan Pello Bilbao y Jan Hirt. Hirt es un fondista nato, y acaba con buen morruco los últimos días, rondando los puestos buenos. Ganó en Aprica, además, que siempre luce. Compañero de Girmay y de Pozzovivo, menuda temporada la de su escuadra, no se lo pierdan...

Pello Bilbao hizo quinto, a nueve segundos de trincar el cuarto de Nibali. No le vimos mucho por la tele, la verdad. Baja muy bien, pero no probó bajando. Sube muy bien, pero tampoco probó subiendo. Dicen que a veces es un gregario de primera, pero gregarió más bien poco a Mikel Landa. No sé. Cayó escalando un puerto, pero tampoco es excusa...

Y luego quedan Buchmann y Carthy. Buchmann tiene el enorme mérito de haber ganado la carrera con su conjunto sin haber dado una pedalada de más. Top ten, un compañero de rosa y el cutis suavísimo de quien no ha chupado nada de aire. No llega a los extremos de cuando hizo cuarto en un Tour (sí, colegas, Buchmann hizo cuarto en un Tour), pero está bastante bien...

placeholder Carapaz y Hindlye, tras concluir el Giro. (EFE/Maurizio Brambatti)
Carapaz y Hindlye, tras concluir el Giro. (EFE/Maurizio Brambatti)

Un Giro poco atractivo

Y luego Carthy. Hugh Carthy. Bastante hizo no explotando en esas montañas de dios, Hugh Carthy. Que llevaba la cara rojísima, que se le desencajaba la quijadilla, que parecía a punto de morir, Hugh Carthy. Otro elemento misterioso, otro enigma por responder.

Nos falta Juan(m)pe López. Enorme Giro, al menos en cuanto a imagen. Diez días de rosa no son pocos (son más de los que tiene nadie este año, de hecho), y justifican el viajecito a Italia. Además, ha aguantado bastante bien las etapas finales (yo apostaba a que se dejaba media hora en alguna). Igual el cómo se ha corrido tiene algo que ver, pero es hablar por hablar. Enhorabuena al mozo.

Fuera quedan los que fuera quedaron. Bardet, que prometía mucho. Almeida, que es ese colega sufridor que todos tenemos, el que se aferra (a la grupetta, a una relación, al 4,75 que es un 5 pelao, al último chupito que jamás debimos pedir), parece que va a perder, pero nunca acabas por dejarlo lejos. Tom Dumoulin, totalmente fuera de onda para estos asuntos, preocupado por las fotos, las declaraciones filosóficas y los filtros de instagram. Miguel Ángel López, que vete tú a saber lo que le ocurrió a Miguel Ángel López, y cómo va a contar Miguel Ángel López (y el entorno de Miguel Ángel López) lo que le ocurrió a Miguel Ángel López. Y las apuestas personales de cada uno. Tobías Foss, que, en fin. Ciccone al menos recuperó algo. Arensman, activo tras hundirse. Valter, anónimo después de un 2021 para ilusionar. O Kelderman, que sí, pero no, pero sí, y finalmente no.

Todos ellos estuvieron allí, en Italia, y se irán de nuestros recuerdos como lágrimas en la lluvia.

Enhorabuena a quien merezca la enhorabuena.

Y gracias a todos ustedes.

'Se acabó el Giro de Italia, y es una de las mejores noticias que ha dejado. Lo que no es, seguro, una buena señal para esta competición. Edición sosa, pero sosa de cojones. Gala humorística con Los Morancos, Jaimito Borromeo, Félix el Gato y tu primo, el que hace monólogos. O peor. Habrá tiempo para analizar causas y razones, pero claro candidato a Giro más ramplón de entre todos los que he visto (y he visto uno que se jugaron Hesjedal y Purito Rodríguez, oigan).

Enric Mas
El redactor recomienda