Fran Ventoso: “En urgencias no se atrevieron a coserme hasta que llegara un cirujano”

Pudo ser mucho peor. Tanto, que pudo enterrar su carrera deportiva en décimas de segundo. Los frenos de disco, rodeados de polémica desde que aparecieron en el mundo del ciclismo de manera experimental, cobraron su primer mártir en la figura de Fran Ventoso. Durante la pasada edición de la París-Roubaix, disputada el pasado fin de semana, sintió el frío corte del polémico elemento en plena carrera, no en una montonera, tal y como se había informado en un principio. Según se ha sabido, porque el propio ciclista de Movistar lo explicó en una carta pública, el mecanismo desplegó todo su peligro mientras Ventoso estaba en pleno pedaleo, ejerciendo como una guillotina. El cortante plato le seccionó la carne cerca de una tibia, siendo evacuado de inmediato para ser trasladado a un centro hospitalario.

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El que mejor retrató la situación fue Purito Rodríguez, con un montaje fotográfico en el que comparaba los frenos de disco con un cortafiambres. Por desgracia es la cruda realidad a la que se enfrenta el pelotón, con un sistema que no está recubierto de protección alguna y que, ya no hay dudas, es una amenaza real. El ciclista de Movistar relata para El Confidencial el trágico y preocupante episodio. “Tuve suerte”, dice para empezar, teniendo claro que el ciclismo está en serio peligro a causa de este sistema de frenos que empezó a ser cuestionado desde el mismo momento que vio la luz. La carta pública que emitió quiere concienciar al mundo del ciclismo en pleno y sobre todo a sus compañeros, potenciales víctimas de los frenos de disco. “Hoy me ha tocado a mí, mañana… quién sabe”, resume el ciclista.

Esperando un cirujano

“Lo que me ha pasado es la cruda realidad, lo que le ha podido suceder a cualquiera desde que los frenos de disco empezaron a emplearse en algunas carreras el pasado año”, relata Ventoso. “Son tantas las zonas que te puede 'machetear' el disco… Yugular, carótida, tendones, nervios… Hablamos de lesiones de tal seriedad que pueden llegar a ser letales”, explica con cierta congoja. Y recuerda que percibió la gravedad real de su lesión en el mismo hospital en el que fue atendido: “En urgencias no se atrevieron a coserme hasta que llegara un cirujano”.

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“En un pelotón de unos 200 corredores podemos hablar de una auténtica carnicería”, comenta pensando en las grandes citas -Tour, Giro, Vuelta…- que se celebrarán durante los próximos meses. Fran Ventoso desvela que ha recibido “llamadas de diferentes compañeros para interesarse por mi estado, además de hacerme saber que están de acuerdo con mis planteamientos. No entendemos cómo hemos llegado a este punto, que se haya aprobado su uso en el ciclismo profesional”. “La inacción que he percibido con los frenos de disco es lo que me preocupa”, subraya el profesional de Movistar.

“Yo no tengo dudas: no quiero correr con frenos de disco ni en carreras donde los lleven otros compañeros”, destaca Ventoso, que desde el primer momento tuvo claro “que no me gustaban. Deberíamos tener más poder de decisión los ciclistas, que somos los que nos exponemos al peligro”. Y explica sobre la dura carta emitida que “la he escrito para concienciar a mis compañeros, ya que somos nosotros los que debemos elegir nuestro destino. No sé lo que pasará en el futuro, pero entiendo que en este momento debía actuar de esta manera”.

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“A mí nadie me ha preguntado mi opinión sobre los frenos de disco. Ni Unión Ciclista Internacional (UCI), ni Real Federación Española de Ciclismo (RFEC), por ejemplo”, critica Fran Ventoso. “En este sentido no llego a entender mi deporte”, remata el ciclista. “No tenemos ni voz ni voto, cuando somos los protagonistas”, señala, insistiendo en que “no he recibido ninguna notificación para expresar mi parecer sobre los frenos de disco”. “Que asociaciones de corredores hayan actuado de igual manera es lo que de verdad me parece más preocupante”, censura Ventoso.

400 cuchillas a 60 kilómetros por hora

También quiere dejar claro que no quiere enterrar para siempre este sistema: “No estoy en contra, pero sí en el escenario actual si estamos hablando de profesionales. Habría que recubrir los discos con alguna protección, hacerlo de otro material menos dañino, que sea más ancho… En fin, no sé, pero los actuales frenos de disco son un peligro para el ciclista. Ahora mismo es una locura su utilización”. El corredor español aconseja emplear bicicletas con este mecanismo “para rutas domingueras o de paseo, para salir en solitario o con algún amigo… Pero en nuestro terreno hablamos de 400 cuchillas a 60 kilómetros por hora. No lo veo...”.

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​A modo de resumen, tras dejar todo muy claro en su carta abierta, Fran Ventoso espera “que este episodio suponga un antes y un después. Desde luego, el que tuviera alguna duda sobre este asunto, seguro que ya no la tiene”. “Quiero agradecer el apoyo y comprensión de Movistar, mi equipo, que me ha permitido expresar libremente mi opinión. Les informé sobre mi idea de publicar un escrito y me han apoyado en esta iniciativa”, dice para acabar la primera víctima de los frenos de disco. Una cuestión de la que a buen seguro se seguirá hablando, y mucho, en el futuro.