Ponferrada demuestra que España sigue sin un especialista de garantías contra el crono

La contrarreloj del Mundial de Ciclismo de Ponferrada dejó uno de los momentos más importantes de los últimos tiempos. No es habitual que Tony Martin, el mejor especialista contra el crono del pelotón mundial y ganador en las tres últimas ediciones del campeonato del mundo,no gane. La hazaña corrió a cargo de Bradley Wiggins, un superclase estrella de la pista hace una década y referencia en la carreteraen el último lustro que va camino de convertirse en una leyenda. En el lado opuesto, la actuación española: Jonathan Castroviejo finalizó 10º y Markel Irizar, 34º. Un resultado, aunque no lo parezca, aceptable, al menos por partede Castroviejo -que cumplió el objetivo de quedar entre los diez primeros, su mejor actuación en un Mundial-, pero que revelael difícil momento que atraviesa la especialidad en España.

Desde queIván Gutiérrez ganara la plata en el Mundial de Madrid 2005, la útima medalla de España en contrarreloj, solo tres veces un ciclista español ha terminado mejor que Castroviejo en Ponferrada: el propio Gutiérrez en el 2007 (7º), Luis León Sánchez en el 2010 (7º) y Alberto Contadoren el 2012 (9º), los tres sin opciones de alcanzar el podio. Analizando la diferencia de tiempo con el ganador, el resultado en El Bierzo es el mejor desdela plata de José Iván Gutiérrez en el 2005, cuando acabó a 23 segundos del australiano Michael Rogers.Castroviejo acabó a 1'44" de Wiggins, casi dos minutos menos que en el Mundial de Copenhague del 2011, donde fue 11º a 3'34". El de Ponferrada, con 12 ciclistas en menos de dos minutos, ha sido el más igualado desde el de Varese en el 2008, cuando hubo 17 corredores en ese mismo espacio de tiempo.“Las contrarrelojes han pasado a un segundo plano y tenía dudas, pero estoy muy contento”, declarótras llegar a metaCastroviejo, que comentó que quizá haya sido su mejor actuación en los mundiales.

A diferencia de lo que pasa en la ruta, donde durante la última década los problemas de la selección han llegado por un exceso de corredores con galones, el ciclismo español no tiene ahora mismo un especialista capaz de asomarse al podio de un Mundial de contrarreloj. No digamos ya de luchar con los gigantes que dominan la especialidad, inalcanzables para la inmensa mayoría del pelotón. No hay en España unTony Martin o un Fabian Cancellara, pero tampoco hay otro Iván Gutiérrez, el más regular de los últimos tiempos: fue cuatro veces campeón nacional y participó en siete mundiales seguidos (2004-2010).

Después de él, ningún otro ciclista ha conseguido asentarse como referencia contra el crono en España. Ni Alberto Contador, que nunca ha apostado por la contrarreloj a pesar de sus buenos resultados, ni Luis León Sánchez han conseguido brillar. En esa misma situación está Jonathan Castroviejo, la apuesta más fiable ahora mismo. En el Mundial bajó en casi un minuto el tiempo que realizó en el Campeonato de España que se disputó en el mismo circuito. El campeón entonces fue Alejandro Valverde, que está lejos de ser un especialista. Con su tiempo de entonces, 58 minutos, habría sido noveno del mundo.

Duelo de leyendas

Lejos quedan los tiempo de Abraham Olano y Miguel Indurain, medallistas mundiales y olímpicos en los noventa. Ahora, el dominio pertenece a Tony Martin, que el próximo año en Richmond (Estados Unidos) tendrá la oportunidad de resarcirse de su derrota a manos de Wiggins en Ponferrada. El británico anunció tras la carrera que a partir de ahora fijarásu atención en la pista para intentar ganar el oro en persecución en Río de Janeiro 2016. Pero antes, dos objetivos en el 2015: la París-Roubaix, en la que fue noveno este año, y el récord de la hora, batido hace una semana por Jens Voigt.

Si consigue todo lo que se ha propuesto, Wiggins se hará un hueco en la historia del ciclismo.Tras alcanzar la gloria en el 2012, con el triunfo en el Tour de Francia y el oro en la contrarreloj de los Juegos Olímpicos de Londres, la carrera del ciclista del Sky, uno de los corredores más singulares del pelotón, pareció entrar en una zona inderteminada. Un accidente en noviembre del 2012 complicó su preparación de la siguiente temporada, en la que muy pocas cosas le salieron bien.

El 2014, en cambio, lo encaró de manera totalmente diferente, con este Mundial entre ceja y ceja. "Para llegar a este título he trabajado desde junio", explicó. Por el camino, el título británico contrarreloj, la Vuelta a California y la ya nombrada gran actuación en el 'Infierno del Norte'. El oro de este miércoles se suma a sus 7 medallas olímpicas en pista (4 de oro), un Tour, un oro olímpico en carretera y otras dos platas mundiales contrarreloj.

"Cuando me han dicho que en la cima llevaba diez segundos a Martin me he cagado encima y he bajado a tope", dijo el británico, relajado y disfrutando de la victoria. Superar en la contrarreloj del Mundial a Tony Martin, que admitió estar cansado -"no soy una máquina", se excusó-, solo está al alcance de un par de elegidos, entre ellos el ciclista británico. Desde que debutara en el 2008 en Varese (tenía 23 años), donde quedó séptimo, Martin ha demostrado ser uno de los mejores especialistas contra el crono de todos los tiempos. El alemán, junto al suizo Fabian Cancellara, esel ciclista que más podios acumula en el Mundial contrarreloj: 6. Pero con una diferencia que lo convierte en único: con la plata de Ponferrada encadena seis años seguidos en el podio.