Ilia Topuria 'La Leyenda' y el problema de las promesas del jefe de la UFC

El Matador ya es La Leyenda, pero hay ganas de saber qué será de su futuro a corto plazo en la UFC (Ultimate Fighting Championship). Ilia Topuría ha consagrado las MMA (Artes Marciales Mixtas) en España como el nuevo deporte de moda. Una competición de contacto, violenta y con mucha, muchísima narrativa, que ha eclipsado a su primo lejano, el boxeo, otrora fue arte nacional. Y ahora todo el mundo se pregunta qué pasa con su campeón.

El hispanogeorgiano anunció, hace casi mes y medio, que dejaba vacante su cinturón de Peso Pluma, una división donde, francamente, parecía no tener demasiados retos —lo más atractivo, una revancha con Alex Volkanovski, al hombre al que derrotó hace un año para conquistar el título—. Lo hizo porque su idea era subir hasta el peso ligero, hasta 155 libras (70.3 kg), por las 145 libras (65.8 kg) del peso pluma, la división con más talento libra por libra de la UFC. Parecía que su movimiento respondía a una acción coordinada con Dana White, mandamás de la compañía, y, desde entonces, rumores, silencios y ofrecimientos sin concretarse.

Topuria tuvo un evento este fin de semana con la compañía española de MMA WOW, que ha apadrinado. Rodeado de figuras como Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la Comunidad de Madrid, o Pablo Motos, presentador de 'El Hormiguero', el peleador acudió a su cita con los focos para mostrar, de forma velada, su incertidumbre: "No tengo tan claro cuál va a ser mi siguiente combate, lo único que tengo claro y la palabra que tengo de parte de la UFC es que mi próximo combate va a ser por el título mundial. Así que sí, eso es lo único que sé. Después, si va a ser Islam [Makhachev], si va a ser Charles [Oliveira], no tengo ni idea... ".

El excampeón de peso pluma tenía intención de subir de peso y pelear por el de peso ligero, pero sin renunciar al pluma. Esto no cuadraba con la hoja de ruta de la UFC, ya que cambió su protocolo, impidiendo que hubiera campeones simultáneos de distintas categorías, como sí sucedió en el pasado. El motivo es sencillo: follow the money. Tener dos cinturones en la misma cintura obliga a menos defensas titulares y los eventos de la UFC necesitan Main Events para hacer más atractivas sus citas. "El cinturón está en juego. Esa ha sido la promesa por dejar el título vacante... Porque, vamos, si no lo hubiera retenido de la otra forma y lo hubiera hecho de otra forma. Siempre todo lo que me han prometido, me lo han cumplido", reflexionó Topuria.

Dana White, recientemente, también se ha pronunciado al respecto. El empresario tiene planes para Topuria y pide "un par de semanas" para que se concreten. El hispanogeorgiano es uno de sus principales activos, más aún con la polémica derrota de Alex Pereira hace pocas semanas por decisión dividida ante Magomed Ankalaev, y existe cierta inquietud en el pacto por su próxima lucha. Además, White había jugado con la idea de que UFC llegaría a España para un evento Pay Per View, algo que se ha enfriado en los últimos tiempos debido a los acuerdos de prime time en Estados Unidos de ESPN, como el propio Topuria confirmó.

La última palabra la tiene Makhachev

El escenario ideal, es decir, el que quiere tanto el aficionado como el espectador, es ver a Islam Makhachev poniendo en juego su cinturón de peso ligero ante Ilia Topuria. Libra por libra, probablemente sería el mejor combate que se pueda ver en la actualidad, y supondría un reto mayúsculo para el español: demostrar que subir de peso y las limitaciones de altura (1,78 de Islam por el 1,70 de Ilia) no son problema para derrotar al gran dominador de la categoría. Pero Makhachev tiene dudas. Obviamente, el peleador ruso se muestra bravo en sus apariciones públicas, pero la realidad es que sigue dando largas al ansiado combate.

Icono de las artes marciales mixtas, Makhachev tiene más que perder que ganar en el combate debido a la diferencia física entre ambos, y lo que más le atrae es ascender a Peso Welter (170 libras / 77,1 kilogramos) y ganar dicho cinturón. ¿El problema? El actual campeón es Belal Muhammad, luchador de origen palestino, compañero de entrenamiento del ruso e íntimo amigo. No quieren estar frente a frente en el octógono.

Todo podría cambiar el 11 de mayo, en UFC 315, cuando Belal pondrá en juego su título frente a Jack Della Maddalena. ¿Confía Islam en que su amigo retiene o renunciará a su cinturón de ligero para estar disponible en Welter en caso de una victoria de Maddalena? Topuria tiene clarísimo que, si Makhachev no acepta la pelea, la UFC le obligará a dejar su campeonato vacante. Más de un mes de espera no cuadra con los plazos.

En ese escenario, en el que el peso ligero necesita un nuevo rey para la corona huérfana, aparece el Ilia Topuria Vs. Charles Oliveira. Una leyenda del negocio que vuelve a las andadas. Ya son varios los piques protagonizados por ambos peleadores, con Topuria amenazante: "Charles, mejor no digas nada. Llevas 10 derrotas: 5 por nocaut, 4 por sumisión y 1 por decisión. Tú eres el contendiente, mientras que yo soy el campeón, el padre de toda la división. No he venido a pedir nada. Aquí, yo soy el que impone".

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Alfredo Pascual

Sería un combate grande para Topuria, pero que sabría a poco comparado con el de Makhachev. De buscar un rival de transición para Makhachev y obligar a Topuria a pelear contra Oliveira sin campeonato de por medio, Dana White habría roto su promesa al hispanogeorgiano.