La decisión de Topuria que revoluciona el futuro de la UFC y el calvario que quiere evitar
El luchador hispanogeorgiano tiene entre ceja y ceja vencer a Makhachev y alcanzar el doble cinturón que en su día lució McGregor. Al subir al peso ligero esquivaría un sacrificio muy duro
Ilia Topuria no se conforma con haber hecho historia en la categoría de peso pluma después de haber pasado por encima de (casi) toda la división. El Matador (16-0) anunció en El Partidazo de COPE que su siguiente reto en la UFC pasa por subir al peso ligero y enfrentar a Charles Oliveira, excampeón y protagonista de una auténtica batalla contra Michael Chandler en UFC 309 de la que salió vencedor.
El brasileño, a sus 35 años, todavía no ha respondido al reto del peleador hispanogeorgiano, pero Topuria le ha colocado entre la espalda y la pared. Charles Oliveira esperaba una última oportunidad para recuperar el cinturón de campeón del peso ligero de la UFC y ahora la decisión de Topuria ha sacudido los cimientos de la UFC hasta despertar un gran interés en sus aficionados.
El foco de debate se centra en ver si Topuria puede ser campeón en una división donde sus rivales serán más altos, más corpulentos y con una mayor envergadura. El título del peso ligero, ahora mismo en manos del daguestaní Islam Makhachev, podría cambiar de propietario el próximo mes de enero en UFC 311, cuando el ruso se mida a Arman Tsarukyan en Los Ángeles.
Pese a la voluntad de Topuria de dar el salto ya y ser doble campeón, objeto de deseo que nunca ha ocultado, la UFC tendrá la última palabra sobre sus próximos pasos. Topuria también deslizó que podría llegar a dejar vacante el cinturón del peso pluma para no paralizar la división, aunque no llegó a confirmarlo. Cabe recordar que solo unos pocos deportistas como Conor McGregor, Daniel Cormier, Amanda Nunes y Henry Cejudo han logrado ese doble hito en la compañía de Dana White.
¿Quién será el próximo rival de Topuria?
Después de haber noqueado a Alexander Volkanosvki para ganar el cetro del peso pluma y a Max Holloway para retenerlo, algo que nunca nadie había conseguido en la historia de la UFC, Topuria ha realizado varios movimientos interesantes. Y también ha recibido ofertas de peleas que se han caído por el camino, al menos de momento.
Volkanovski presionó al hispanogeorgiano y a la UFC públicamente para que se produjera una revancha y poder recuperar el cinturón. El escenario era propicio para que la UFC aterrizase en España y se celebrara una velada épica en el Santiago Bernabéu. Hasta hace pocos meses, esa era la pelea que se dibujaba en el horizonte para Topuria.
"Ha hecho lo suficiente para tener una revancha inmediata", declaró Holloway, mientras que el propio Volkanovski aseguró "quiero esa pelea. Puede ser en España porque según he escuchado... va a pasar. Aunque no será hasta más adelante", contó el que fuese campeón. Topuria recogió el guante en El Hormiguero y señaló que le motiva la idea de finalizar al australiano.
Sin embargo, la posibilidad de medirse a Islam Makhachev, campeón del peso ligero, planteó dudas. "Me motiva Makhachev. Ha sido noqueado, pero nunca ha sido finalizado, entonces ser el primero en finalizarlo me motiva. Está hecho ya", aseguró en el programa de Pablo Motos. El ruso, especialista en suelo, es el luchador más temible de toda la división en el grappling.
Por otra parte, los contendientes restantes del peso pluma no parecen motivar lo suficiente a Topuria. El ruso Moslar Evloev (19-0) fue al grano en una entrevista concedida a ESPN. "Topuria no necesita subir a otra categoría. Tengo un 9-0 en peso pluma, soy el siguiente. No creo que los rankings digan nada. Creo que soy el mejor y solo lo que necesito para el título es esa oportunidad".
"El infierno" de Topuria
Sin embargo, como en el caso de Diego Lopes, Topuria no está por la labor y tampoco le entusiasma volver a pasar por los durísimos cortes de peso, la peor pesadilla de cualquier luchador. Hasta ahora, Topuria no podía superar los 65,7 kilos de peso en la división y en ligero podría estirar hasta los 70,3 kilos, un peso más natural para sus 170 centímetros de altura.
El hispanogeorgiano, que suele rondar los 80 kilos de peso antes de empezar a prepararse para una pelea, llega a perder hasta 10 kilos en la semana del combate, para luego rebotar y recuperar ese peso. Un sacrificio nutricional basado en la deshidratación que pone al hispanogeorgiano al límite y le hace atravesar un "infierno", en sus propias palabras.
.@Topuriailia nos cuenta cómo es el difícil proceso de bajar peso previo a un combate #TopuriaEH pic.twitter.com/2EPpPpA8FZ
— El Hormiguero (@El_Hormiguero) November 14, 2024
"Se te marcan unas pautas alimentarias superestrictas. Hasta se mide la sal que tomas. El domingo tomo cuatro litros de agua, el lunes tomo seis, el martes ocho, el miércoles tomo diez y el jueves por la mañana corto, ya no tomo nada de agua", comentó en el podcast de The Wild Project. No obstante, y en caso de subir inmediatamente de división, el cambio de peso no sería un territorio por explorar para Topuria.
El peleador hispanogeorgiano ya disputó un combate en 2022 contra Jai Herbet en Londres, donde ganó por KO en el segundo asalto. A pesar de besar la lona en el primer asalto, cuando su rival le conectó una poderosa high kick, algo que muchos de sus siguientes rivales intentarían replicar, Topuria se rehizo con una remontada espectacular para alcanzar su 12ª victoria en la UFC. "Ya peleé en Londres en el ligero y me sentí supercómodo, porque no te tocan los recortes de peso. Será un viaje divertido. Hay más de uno que tiene la lengua que se le sale", explicó Ilia.
Ilia Topuria no se conforma con haber hecho historia en la categoría de peso pluma después de haber pasado por encima de (casi) toda la división. El Matador (16-0) anunció en El Partidazo de COPE que su siguiente reto en la UFC pasa por subir al peso ligero y enfrentar a Charles Oliveira, excampeón y protagonista de una auténtica batalla contra Michael Chandler en UFC 309 de la que salió vencedor.