Es noticia
Bienvenidos a la noche más hetero del año: Topuria y "un paleto" le plantan cara al Clásico
  1. Deportes
  2. Boxeo y Artes Marciales
qué tiene la ufc que nos vuelve locos

Bienvenidos a la noche más hetero del año: Topuria y "un paleto" le plantan cara al Clásico

La pelea del hispanogeorgiano en Abu Dabi ha captado un interés por los deportes de combate que no se veía en los últimos treinta años

Foto: Topuria, durante la presentación de su documental. (EFE)
Topuria, durante la presentación de su documental. (EFE)
EC EXCLUSIVO Artículo solo para suscriptores

No pasa un año sin que, con motivo del Día del Orgullo Gay, alguien salga en las redes sociales reclamando un Día del Orgullo Hetero. Por fin sus plegarias han sido escuchadas, porque esta noche la España hetero vive su Eurovisión, con un memorable programa doble que incluye fútbol (Madrid-Barça) y guantazos (Topuria contra Max Holloway).

Bienvenidos al festival de la testosterona.

A priori parecen eventos desiguales, en tanto que el fútbol sigue siendo un auto sacramental en nuestro país, mientras que los deportes de combate hace décadas que están en retroceso. Sin embargo, en esta ocasión es distinto. Hace unos días, cuando se supo que el Clásico podía coincidir en horario con la pelea de Topuria, fueron miles los aficionados que pusieron el grito en el cielo. Incluso Topuria, visiblemente molesto en rueda de prensa, agradeció el "apoyo" a la LaLiga y amenazó (en broma) con noquear a Javier Tebas.

Finalmente será la UFC, promotora del combate de Ilia, la que se allane: habrá parones en la velada para asegurarse de que el georgiano-español no comience a pelear antes del final del partido del Bernabéu.

Hay que remontarse hasta el verano de 1991 para encontrar un combate que paralizase España como lo está haciendo ahora Topuria. Fue una noche de julio cuando Poli Díaz, también conocido como El Potro de Vallecas o los puños del felipismo, se enfrentó al norteamericano Pernell Whitakker por el cinturón de campeón del mundo. Poli perdió aquella pelea, pero descubrió a su regreso que se había convertido en un icono nacional: "Después de aquel combate, estuve en varias ciudades y todo el rato me paraban por la calle, comentando algún golpe, algún asalto. ¡Y eso que fue un combate de madrugada aquí! Puse a España a trasnochar. Ahí me dije, 'joder Poli, la que has liado, ojalá haber ganado por esta gente... y por mí claro'. No pudo ser, el árbitro no me dejó ganar", comentaba Díaz a este periódico en 2020.

Foto:
TE PUEDE INTERESAR
"Hola, me llamo Poli Díaz y pego hostias como tranvías"
Alfredo Pascual Fotografía: Carmen Castellón José María Stampa Jost

Los deportes de combate nunca volvieron a ser lo mismo después de aquella noche. Y no fue por calidad: durante los siguientes años, España gozó de campeones más completos y, en general, mejores que Poli Díaz, como Javier Castillejo, Joana Pastrana o Sergio 'Maravilla' Martínez que, sin ser español, hace décadas que se instaló en Madrid. Ninguno consiguió la popularidad de la que goza Topuria, cuyos combates jamás se han televisado en abierto, porque el georgiano, como Poli, viene con un relato bajo el brazo.

Poli fue la esperanza del arrabal, el caballero blanco de una generación de españoles que tuvo que migrar a las grandes ciudades en los años 60 para hacinarse en infraviviendas techadas antes del amanecer. El Potro marcaba el camino para salir del gueto: entrena fuerte y aléjate de las drogas. Incluso el Emérito se declaró fan del púgil vallecano, que en algún momento confundió los términos y acabó drogándose fuerte y alejándose de los entrenamientos.

Ilia representa al hombre desacomplejado, bravucón y seguro de sí mismo, que no duda en plantarte un guantazo si la situación lo requiere

Por su parte, Topuria es un símbolo trasversal que va más allá de las clases sociales o la edad. En un escenario de deconstrucción masculina y nuevas sensibilidades, Ilia representa al hombre desacomplejado, un tipo duro, bravucón y seguro de sí mismo, que no duda en plantarte un guantazo si la situación lo requiere. Como muestra, un botón: el jueves, en la rueda de prensa previa al combate, Topuria amenazó a su rival, a la cara, con "arrancarle la puta cabeza a hostias", no sin antes recordarle que es "un paleto" que solo sabe hablar inglés.

El hombre del momento

Hay algo hipnótico en la personalidad de Topuria. Solo él es capaz de pronunciar frases violentísimas con el tono más conciliador que uno pueda imaginar. Te explica en bajito, con una sonrisa infantil, que planea eviscerar a Connor McGregor en mitad del Bernabéu. Empieza una frase declarando su absoluta admiración por Volkanowsky y la termina avisándole de que le va a mandar al hospital. Una suerte de peluche carnívoro que sorprende por su inteligencia fuera del octógono.

"El ascenso de Ilia Topuria solo se explica desde una combinación de factores", explica Javier Colmenero, analista de UFC en Eurosport. "El hecho de que tenga una personalidad tan carismática, tan diferente y exclusiva, le ha permitido trascender el estigma de las artes marciales mixtas y convertirse en una súperestrella dentro de nuestras fronteras. Ha trabajado muy bien el marketing y las redes sociales, gracias a esa forma de expresarse que sorprende al público, sean o no aficionados a las MMA (artes marciales mixtas). Por último, ha tejido una red de contactos con personas famosas, como Omar Montes o Sergio Ramos, que han ayudado a popularizarle".

Desde el entorno de Topuria señalan que el discurso está menos improvisado de lo que parece. "Ilia tiene una inteligencia natural para probar cosas y entender qué funciona y qué no. Dentro y fuera del ring. El Topuria de 2015 no se parece casi en nada al actual, es una versión mejorada en todos los aspectos".

"Si dices que vas a machacar a tu rival y después lo machacas, eso significa interés, dinero"

Continúa Colmenero: "Hay que adjudicarle también el mérito de haber dedicado mucho tiempo en atender a los medios de comunicación, incluso a los pódcast especializados. Pero lo que realmente le ha generado el poder llegar a gente que no sean hombre de entre 30 y 50 años ha sido su presencia en programas de televisión como El Hormiguero o La Resistencia".

Para César Alonso, peleador de MMA y comentarista en televisión, detrás de las bravatas de Topuria también hay un trasfondo económico. "Los peleadores de la UFC tienen distintos sueldos. Esto es, cada uno cobra en la medida que lo genera. Entonces, si quieres cobrar más, tienes que conseguir que cada vez más personas vean tus peleas. Si cada vez que haces una entrevista dices que vas a machacar a tu rival, y después lo machacas, eso significa interés, atención, dinero. Pero no es solo Ilia, la mayoría de los peleadores de la UFC tienden a ser arrogantes para generar morbo".

placeholder Topuria, junto a su amigo Sergio Ramos. (Instagram)
Topuria, junto a su amigo Sergio Ramos. (Instagram)

Un deporte-producto

Las artes marciales mixtas no son en sí mismas un deporte sino, como su nombre indica, la fusión de distintas artes marciales con un solo objetivo: vencer a tu rival. Un peleador puede ganar boxeando, otro haciendo jiu-jitsu en el suelo y un tercero derribar a su oponente a base de patadas de kickboxing. Incluso, como es habitual, mezclándolas todas si el combate lo demanda. La idea es simular las condiciones de una pelea callejera sin recortar demasiado las opciones de combate.

Además, como cualquier espectáculo nacido en los años 90, está diseñado para ser emitido por televisión. La UFC cuenta con su propia plataforma, que permite a los aficionados no solo ver las veladas, sino también acceder a horas de contenido sobre los peleadores y los eventos por 10 euros al mes. No obstante, la compañía tiene firmados acuerdos multimillonarios con ESPN, Eurosport o Fox para que sus espectadores puedan sumarse a la UFCmanía. Esto le ha llevado a generar un negocio de 1.700 millones de dólares al año, la tercera parte de lo que mueve LaLiga, un deporte con 160 años de historia.

"La clave es que la UFC no es una federación, sino una empresa"

El control total del espectáculo es clave en la rápida expansión de la UFC, que el año pasado adquirió la WWE (wrestling) para formar un conglomerado valorado en 21.000 millones de dólares. "Si lo comparas con el boxeo, la clave de la UFC es que no es una federación deportiva, sino una empresa, concretamente la primera que se interesó en serio por las MMA. Han trabajado para acabar con el estigma de la violencia y han visto cómo la sociedad les ha ido aceptando poco a poco. Hoy la UFC es un producto muy rentable", dice César Alonso. "Curiosamente, también han conseguido que ningún peleador de UFC termine con daños severos, algo de lo que no pueden presumir en el boxeo o el kickboxing".

"Sin lugar a dudas, el éxito de las MMA no se puede explicar sin la UFC", continúa el periodista Javier Colmenero. "La UFC cuenta con un enorme potencial audiovisual, con una comunidad de cientos de millones de personas. Además, no solo son expertos en la creación de storytelling, sino también en encontrar la forma de vender sus historias. La historia de las MMA y la UFC no puede separarse de ninguna manera".

placeholder Topuria, junto a Holloway y el presidente de la UFC, Dana White. (UFC)
Topuria, junto a Holloway y el presidente de la UFC, Dana White. (UFC)

Esto hace que los peleadores hagan suya la responsabilidad de dar espectáculo, no solo ante el micro, sino también sobre el ring. Para el combate de esta noche, Topuria ha retado a Holloway a citarse en el centro del octógono durante los diez primeros segundos de pelea para un intercambio salvaje de puñetazos. Según el hispanogeorgiano, le basta ese tiempo para ser el primero en noquear a Holloway, una leyenda de este deporte. Esto implicaría no ir al suelo, donde Topuria es muy superior al norteamericano.

Pese a que los expertos consultados confían en la victoria de Ilia, dudan de que no termine el combate con una sumisión en el suelo. "Topuria puede noquearlo boxeando porque es buenísimo, pero Holloway tiene la mandíbula muy dura. Ya veremos si es capaz de encontrar esa mano que le apague las luces. Lo que está claro es que si no funciona, siempre tiene el plan B de llevarlo al suelo", afirma Alonso. "¿Ilia es favorito? Para mí sí, porque tiene más recursos, pero en EEUU confían más en Holloway", considera Colmenero. "Creo que Topuria va a intentar noquearlo con un golpe de poder, pero, si no lo encuentra, va a empezar a acercarse más y más, a llevar la lucha al cuerpo a cuerpo, para terminarlo en el suelo, ya sea a puñetazos o con una sumisión en el segundo asalto".

No pasa un año sin que, con motivo del Día del Orgullo Gay, alguien salga en las redes sociales reclamando un Día del Orgullo Hetero. Por fin sus plegarias han sido escuchadas, porque esta noche la España hetero vive su Eurovisión, con un memorable programa doble que incluye fútbol (Madrid-Barça) y guantazos (Topuria contra Max Holloway).

Ultimate Fighting Championship (UFC) Ilia Topuria
El redactor recomienda