UFC 269: Charles Oliveira consolida su reinado sometiendo a Dustin Poirier

Charles Oliveira es el mayor artista de la sumisión en la historia de la UFC. Es un mago absoluto. Oliveira defendió su recién ganada corona de peso ligero contra Dustin Poirier en una excelente pelea en el evento principal de UFC 269, celebrado en Las Vegas, sometiendo al norteamericano con una mataleón al comienzo del tercer asalto, cuando previamente tenía todas las apuestas en contra.

Y es que muchos veían a Poirier como el campeón no coronado. Poirier debería haber disputado la pelea por el título en mayo. Sin embargo, eligió voluntariamente no seguir esa vía, para cerrar la trilogía con Conor McGregor y aumentar así su cuenta bancaria. Había sido un año tremendo para Poirier ya que finiquitó a McGregor en dos peleas consecutivas. Pero Oliveira está entre los mejores finalizadores de la UFC y, a diferencia de McGregor, estaba inmerso en una trayectoria ascendente.

En este combate no hubo prolegómenos, ni ningún estudio previo. Salieron con todo, aunque Poirier es propenso a comenzar los combates lento. Oliveira intentaba mantener la pelea a distancia en un esfuerzo por estar fuera del alcance del boxeo del retador. Las patadas a la pierna, las patadas frontales al cuerpo y los jabs largos fueron las principales armas del brasileño, que disparaba continuamente para frenar el astuto juego de piernas de su rival. Cuando llegaba al ‘clinch’, con su agarre de Muay Thai, castigaba con serios rodillazos. Dueño de una estructura longilínea, Oliveira se permitía el lujo de ser más arriesgado en los pies, ya que no le importaba que su oponente lo llevara al suelo. Mientras, Poirier buscaba establecer su jab y lanzar potentes combinaciones utilizando sus ganchos para dañar a Oliveira y conseguir el nocaut. A pesar de su lentitud, Poirier ha afinado su técnica hasta el punto de que hay muchos que afirman que es el mejor boxeador de la UFC. El retador tiene un alcance ligeramente inferior pero lo compensaba lanzando sus golpes desde la guardia zurda. Al final de la ronda, postró al campeón con un volado de derecha para llevarse un disputado primer asalto.

Desde la segunda ronda, el combate cambió inexorablemente hacia el brasileño. A la primera oportunidad que se le presentó, proyectó a su rival al suelo. Oliveira perdió el amarre y cayó con la espalda en el suelo. Pero un intento de sumisión de omoplata le permitió establecerse encima de su oponente para castigarle con buenos codos en el 'ground and pound' durante todo el recorrido del asalto, para desgastar así la condición física de Poirier.

El retador salió cansado al tercer asalto pero no sé si hay un luchador en el peso ligero (o en cualquier otra división) que pueda sudar, sufrir y sangrar como Poirier, y ser más peligroso a medida que la pelea avanza. Así que todavía podía voltearse la situación. Poirier no es un mal luchador de suelo, pero tiene tendencia a ceder su espalda y si hay alguien que podía hacérselo pagar, ese es Oliveira. Otra vez, a su primera chance, el campeón buscó el derribo. No logró proyectarle pero fue capaz de tomarle la espalda desde una posición erguida y finalizarle con un mataleón de pie a un luchador que sólo había sido sometido una vez en la última década y fue contra Khabib Nurmagomedov. Tremenda victoria del brasileño.

Peña protagoniza una de las mayores sorpresas de la historia

Julianna Peña es la nueva campeona del peso gallo tras protagonizar una de las sorpresas mayores de la historia de la UFC. Amanda Nunes que buscaba mantener el estatus de ser la luchadora mejor de todos los tiempos, defendiendo su cinturón de peso gallo, cayó contra todo pronóstico contra la norteamericana de orígenes venezolanos en el combate de semifondo.

Nunes había superado al resto de retadoras hasta el punto de reinar en dos divisiones sin que se atisbara ninguna aspirante con posibilidades reales de destronarla. Pero ‘La Zorra Venezolana’ ha demostrado ser una luchadora tenaz que ha sido capaz de conseguir la victoria con su agresividad, a pesar de haber ganado dos de sus últimos tres combates desde su baja por embarazo. Si hay una preocupación para Nunes es su deficitaria resistencia, sobre todo en la división gallo.

La pelea comenzó con un estudio previó que rompió la campeona con sólidas patadas a las piernas a las que respondía la retadora con fuertes disparos. Nunes es la mejor atacante de la división con las manos más pesadas. Con uno de sus disparos postró a Peña en el suelo. Después de un castigo continuado sobre el firme pudo cogerle la espalda e intentar una sumisión. Nunes es una formidable luchadora de jiu jitsu que ejecuta sumisiones furtivas, pero sus intenciones fueron abortadas. Peña se defendía con la espalda apoyada en el suelo agarrando el brazo con la posibilidad de ejecutar una llave de kimura ante el menor descuido. Terminó un asalto con claro dominio de la campeona. Nadie podía predecir lo que ocurriría en el siguiente.

Peña es una luchadora que ha abrumado a muchas oponentes con su capacidad atlética y su agresividad. Salió al segundo asalto sin respetar a la campeona, dispuesta a jugárselo todo en los intercambios y lo increíble es que acertó. Con su jab incisivo fue mermando la resistencia de la campeona que estaba perdiendo los intercambios de golpes de manera paulatina, mientras avanzaba la ronda, a pesar de que Nunes es un camaleón en los pies capaz de adaptarse a lo que su oponente traiga. La campeona ante su increíble inferioridad en los intercambios no buscó exponer la falta de defensa de Peña en los derribos y sumisiones. Es más, a falta de dos minutos para terminar el asalto, Peña es la que proyectó a una fatigada Nunes, y la sometió enseguida, con una facilidad pasmosa, mediante una estrangulación por la espalda en el suelo, a pesar de que no tenía metido los dos ganchos.

En el resto de la velada hubo las siguientes finalizaciones:

En el cartel principal, Kai Kara-France noqueó al ex campeón Cody Garbrandt con una ráfaga de golpes en la primera ronda.

Sean O'Malley finalizó a Raulian Paiva en el primer asalto con un continuo castigo de certeros golpes hasta que dejó a su rival sin defensas.

En los preliminares, Tai Tuivasa noqueó a Augusto Sakai en el segundo asalto y sigue con su racha ganadora.

Bruno Silva destruyó a Jordan Wright en el primer asalto con un castigo continuado que empezó arriba y terminó con su rival defendiéndose sin éxito desde el suelo.

André Muniz sometió a Eryk Anders con una llave de brazo en la primera ronda.

Tony Kelley finalizó a Randy Costa tras un duro castigo en el suelo durante el segundo asalto.

Y Gillian Robertson sometió a Priscila Cachoeira con una estrangulación por la espalda.