UFC Vegas 38: Santos vence a Walker en una decepcionante pelea que prometía más

Nadie intuía pronosticar lo que ha sucedido hoy en la pelea estelar de UFC Vegas 38. El combate con más posibilidades de terminar antes de tiempo de toda la velada fue a la postre decidido por los jueces, en una cartelera repleta de finalizaciones, un símil aunque algo más moderado del soporífero pleito que enfrentó a dos reconocidos noqueadores, como Francis Ngannou y Derrick Lewis, que también prometía por anticipado fuegos artificiales y luego resultó ser un espectáculo lamentable por la inactividad de los dos protagonistas.

Ganó el exretador al título de los semipesados Thiago ‘Marreta’ Santos a Johnny Walker en la decisión unánime de los jueces por un triple 48-47, con lo que rompe su racha de tres peleas consecutivas perdidas en contra. Los jueces valoraron el mayor empuje de Santos, fue un impulso prácticamente unidireccional salvo en el primer asalto, y los golpes de poder, ya que en los exiguos disparos significativos conectados, Walker recolectó más en la mayoría de los asaltos.

Santos, clasificado el número 5 en la división del peso semipesado, quería demostrar que todavía podía competir contra los mejores, ya que no había ganado desde su pelea en febrero de 2019 contra el ahora campeón Jan Blachowicz. Después, se había enfrentado a Jon Jones, Glover Teixeira y Aleksandar Rakic, perdiendo en los tres combates. Walker, por su parte, había peleado muy poco en el último año, aunque su último combate fue ganado por KO contra Ryan Spann en septiembre de 2020.

A pesar de ser un consumado luchador en el octágono, Santos no llegaba tan afilado como antes, especialmente después de sufrir una lesión de rodilla contra Jon Jones que parece haberle pasado factura desde entonces. A sus 37 años, no es el mismo luchador que fue, a pesar de la experiencia que ha acumulado. Si nos retrotraemos a su situación anterior a la lesión, sufrir la presión del contrario siempre había representado tener las peleas más difíciles en su carrera. Y eso hoy no sucedió, excepto en el primer asalto. Walker en esa ronda fue el que más buscó las acciones. Ejecutó abundantes patadas a la piernas aprovechando su mayor alcance, desde su efímero dominio del centro del octágono. Aunque hubo pocas ofensivas, los dos luchadores estaban estudiándose, Walker en esta primera ronda fue el protagonista de la mayoría de las acciones.

Los dos brasileños se guardaban mucho respeto. No es para menos. Entre los dos acumulaban en sus carreras más de 30 KO. La mayoría de las victorias de Walker habían llegado por KO/TKO en el primer asalto y si hubiese sido capaz de aterrizar disparos con eficacia en la primera ronda puede que éste hubiera sido el destino de Santos. Pero para ello debía sortear el tremendo poder noqueador de 'Marreta'. Así de divertida se prometía la pelea.

Walker es un 'striker' reconocido por su creatividad salvaje y su largo alcance. Intentó no cometer el error de ser demasiado agresivo como fue contra Corey Anderson, pero se quedó demasiado corto tanto para agradar al espectador como para optimizar los resultados de las puntuaciones. Y es que el estilo de Santos funciona muy bien manteniendo a su oponente intimidado y a distancia. Con espacio para operar, el brasileño es un excelente ‘striker’ con un arsenal impresionante repleto de brutales patadas. Si los oponentes respetan su poder y se mantienen cautelosos en la distancia, Santos tiene el tiempo y el espacio necesario para preparar y ejecutar sus patadas. Sin embargo, cuando los oponentes aceptan el hecho de que van a sufrir daños en el proceso, muchas veces han sido capaces de hacer que retroceda y disminuirlo, sin que pueda accionar sus mejores armas. En este combate, excepto en ciertas fases de la primera ronda, 'Marreta' siempre operó con libertad, resguardado desde su infranqueable distancia.

La primera ronda fue un espejismo. A partir de entonces irremisiblemente cambiaron las tornas. Ya en el segundo asalto Santos incrustó tres solidas patadas al cuerpo de su rival. Quería presionar a Walker contra la reja para buscar un derribo. Pero tenía que eludir la mayor distancia de su rival y no se arriesgó, salvo contadas ocasiones, a encajar un golpe de encuentro durante el proceso de sus intentonas. Y eso de que a pesar de tener mayor alcance, Walker nunca supo encontrar la distancia de Santos. Los dos luchadores, especialmente Walker, se iban para atrás ante cualquier amenaza de ofensiva. Sus intentos de entrar en ángulos no funcionaron porque nunca atinaba con el momento concreto para poder conectar. Y en algunas de esas aproximaciones cató por contra sólidas izquierdas de Santos, especialmente reseñable un croché en el último asalto. Johnny, cuyas fintas resultaron inicuas, utilizó mucho patadas laterales a la rodilla para mantener a distancia a su oponente. Recursos insuficientes para vencer en una cerrada pelea donde las acciones finalizadoras que se prometían desde el inicio quedaron por desgracia diluidas en agua de borrajas.

En el resto de la velada sucedieron las siguientes finalizaciones:

En la pelea de semifondo, Kyle Daukaus finalizó a Kevin Holland en el primer asalto con una estrangulación por la espada ejecutada de pie. Fue la guinda a varias secuencias de lucha e intentos de sumisión que comenzó después de quedar aturdido Holland por un choque fortuito de cabezas. Después de revisar las imágenes el combate se declaró 'sin decisión'. Habrá revancha directa.

Alexander Hernández noqueó a Mike Breeden en la primera ronda con un volado de derechas, disparo que fue el último de una ráfaga continuada de golpes. KO impresionante.

En los preliminares, Casey O'Neil terminó a Antonina Shevchenko, la hermana de la campeona del peso mosca de UFC, después de posicionarse en la montada en el segundo asalto e infligir desde allí un castigo sin pausa hasta la intervención arbitral.

Jamie Mullarkey desarmó a Devonte Smith desatando en el segundo asalto una tormenta de golpes que no escampó hasta que el árbitro detuvo el combate.

Douglas Silva de Andrade noqueó a Gaetano Pirrello en el primer asalto con un croché rotundo de izquierda que postró a su rival sin defensas en el suelo. KO espectacular.

Con un codo poderoso ejecutado desde el ground and pound, Stephanie Egger finalizó la pelea con Shanna Young en la segunda ronda.

Y Alejandro Pérez sometió a Johnny Eduardo con una llave de brazo ejecutada con sus piernas desde posición lateral en el segundo asalto.