Conor McGregor es detenido y acusado de robo a mano armada y actitud criminal

Conor Mcgregor ha vuelto a hacer de las suyas. El luchador irlandés es noticia de nuevo por sus comportamientos fuera de lugar, en vez de por sus habilidades dentro del octógono. En esta ocasión, ha sido detenido en Miami (Florida, EEUU) después de un nuevo altercado, esta vez en un una zona muy turística: un aficionado que le reconoció decidió hacerle una fotografía, ante lo que el deportista decidió robarle y destrozarle el móvil sin mediar palabra.

Todo sucedió este lunes a última hora, cuando McGregor se encontraba paseando por Miami Beach, tras salir del Hotel Fontainebleau. Un viandante quiso tomar un recuerdo del deportista, por lo que sacó su 'smartphone' del bolsillo y decidió hacerle una fotografía. McGregor se percató de esta situación y, sin mediar palabra, decidió acercarse hasta esa persona, a quien le arrebató el móvil por la fuerza. Ante su mirada atónita, lo estampó contra el suelo, lo pisoteó y se lo llevó en su bolsillo.

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Ni la protesta ante McGregor ni las suplicas sirvieron de nada, pues 'The Notorious' decidió tomarse la justicia por su mano, llevándose el teléfono que previamente había destrozado contra el suelo. Esa situación provocó que el sujeto en cuestión interpusiera una denuncia por lo ocurrido y, solo un par de horas después, las autoridades detenían a McGregor, según confirmó el informe policial que anunciaba la detención del deportista.

Tal y como confirmaron las autoridades de Florida, el deportista fue detenido bajo una fianza de 12.500 dólares en el Centro Correccional Turner Guilford Knight, tras destrozar un teléfono cuyo coste era de 1.000 dólares. Pese a que su abogado asegura que se trata de "un pequeño altercado" en el que "promete su plena cooperación", las autoridades le detuvieron por estar acusado de robo a mano armada y por actitud criminal.

Este no es el primer lío en el que se mete Conor McGregor en los últimos años. En noviembre de 2017, solo tres meses después de la millonaria pelea contra Floyd Mayweather, el luchador irlandés era multado con 400 euros por exceso de velocidad. Un radar le cazó a 160 kilómetros por hora en una zona de 100 km/h, una infracción cuyo coste era de 80 euros. Sin embargo no la pagó, lo que le costó un castigo mayor: después, aseguró que no desembolsó el dinero por un error burocrático.

Nurmagomedov y sus altercados

Sin embargo, los verdaderos problemas llegaron antes de la pelea contra Khabib Nurmagomedov. Pocos meses antes, la relación entre ambos luchadores era buena, pero un enfrentamiento en un bar de Rusia entre amigos de ambos, con puñetazos y armas de por medio, provocaron que la corcordia se rompiese. Eso es lo que dio lugar a que McGregor, unas semanas más tarde, intentará agredir al daguestaní tras cargar contra su autobús.

El irlandés lanzó una valla, un carro de carga y un cubo de basura contra el transporte en el que se encontraba Nurmagomedov y otros compañeros de la UFC, rompiendo algunas lunas del vehículo e hiriendo en la ceja a uno de los luchadores. Fue detenido por la policía de Brooklyn (Nueva York, EEUU) por tres cargos de agresión y uno de vandalismo, y terminó siendo condenado a pagar 50.000 dólares de multa.

Poco después, tras producirse la esperada pelea ante el ruso, es de sobra conocido lo que ocurrió en el exterior del octógono, que también le costó una sanción de 50.000 dólares y medio año de suspensión en la UFC. Ahora, ha sido detenido nuevamente, en este caso por destrozar y robar el teléfono móvil de un seguidor de las artes marciales mixtas que intentó tomarle una fotografía en la calle. Un nuevo lío para 'The Notorious'.