El precio por ser el mejor boxeador del mundo: "No oler a mi hija ni a mi novia"

“Ya fui campeón del mundo y ahora voy a intentar serlo de nuevo entregándome durante ocho o nueve semanas, aislándome del mundo y de la familia. Tengo tres entrenamientos diarios los lunes, miércoles y viernes, el resto de los días tengo dos”. El tono de voz del boxeador Kiko 'La Sensación' Martínez era sosegado porque hacía unas horas terminó una de esas sesiones. Su cuerpo había descansado aunque en unos minutos comenzaba la última del día en el campamento que estableció en la localidad grancanaria de Puerto Rico. Su cabeza, durante esta charla que tuvo lugar hace un par de semanas, ya estaba en el combate que el 27 de febrero le enfrentará en Los Ángeles al mexicano Leo Santa Cruz por los cinturones pluma de súper campeón de la AMB y diamante de la CMB, con el que podría entrar en el selecto club de los mejores guantes del mundo.

“Para mí lo más duro es estar lejos de mi novia Almudena y mi hija Adriana. No puedo sentirlas, hablamos todos los días por Skype pero no puedo olerlas. Es un precio que hay que pagar. Es lo que toca durante estas semanas. Actualmente, mis días se distribuyen en echar entre dos y dos horas y media con guantes y luego -también por la mañana- correr y trabajos funcionales de musculación. Posteriormente hago piscina… Ahora lo que estamos preparando es el físico para que llegar tres o cuatro semanas antes y volcarnos en la estrategia”. Gabi Sarmiento es la cabeza encargada de dirigir un plan que, a pinceladas gordas, explicaba Kiko Martínez a El Confidencial. Ahora mismo está ya 100% volcado en esa “estrategia” para derrocar a Santa Cruz.

Kiko es uno de los dos o tres españoles que puede decir que vive de ponerse unos guantes y pelear sobre un ring. Hacerlo por un título mundial es algo que va más allá, por ello se siente un “privilegiado” y agradece el trabajo con el teléfono hecho por “Maravillabox y su promotor norteamericano. Es una gran oportunidad. Ahora la tenemos que aprovechar”.

Su agencia -Maravillabox- tiene mucho que ver con el espejo en el que Kiko se mira, “mi referencia ha sido siempre Maravilla Martínez. Es el que me enseña que con trabajo y sacrificio se llega donde uno quiere. Es lo que he aprendido y estar en su equipo es una motivación bastante grande... Le llevo siguiendo desde que yo era niño, de toda su infancia de campeón y ahora estar al lado suya es tres veces motivador”. Además, el ilicitano nacido en Granada se ha fijado sobre todo en los argentinos Marcos 'Chino' Maidana y Luca Matthysse. Pero hay más a los que estudia apoyándose en las tecnologías, “la verdad es que constantemente me fijo de grandes campeones a través de YouTube o buscándolo en Google”. Boxeo 2.0.

“No voy a por el dinero”

A sus 29 años utiliza las herramientas que tiene a su alcance para mejorar. Todo para estar lo mejor preparado y creer que es así cuando se suba al ring, arrinconando una molesta sensación previa al combate: “Él es el favorito. Pero se le puede ganar a base de trabajar y no darle ninguna tregua en el ring. Sacrificarme en el campo de entrenamiento y ganar a un top 10 es muy difícil, pero no imposible. Tenemos que ir con mucha confianza”.

¿Y cómo saldrá Kiko el 27 de febrero? “Mi manera de pelear, gane o pierda, es dar el 100%. No voy a por el dinero ni a verlas pasar. Voy a por la oportunidad que significa. Trabajo por el sueño de un título mundial en EEUU y ante una gran televisión”.

Hay un lema que lleva tatuado: “Matar o morir”, y Kiko es en lo único que piensa. “Subo al ring a eso, no con otras ideas. No voy a guardar nada para el regreso a casa...”. Quizás un hueco en la maleta sí, por si caben un par de cinturones.