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El hombre más odiado de Dallas, un funeral y una lección: si Doncic es prescindible, imagina tú
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El salvaje mercado de la NBA

El hombre más odiado de Dallas, un funeral y una lección: si Doncic es prescindible, imagina tú

Nico Harrison, mánager general de los Mavericks, aseguró que el equipo necesitaba más potencia en defensa para justificar el traspaso. El sobrepeso del esloveno se señaló, pero el supercontrato al que aspiraba Doncic precipitó todo

Foto: Altar para Doncic en el pabellón de los Mavericks. (Reuters/Jerome Miron)
Altar para Doncic en el pabellón de los Mavericks. (Reuters/Jerome Miron)

El término histórico se usa con frecuencia en los ambientes deportivos. La madrugada del sábado al domingo dejó una noticia que justificaba el adjetivo: Luka Doncic ponía rumbo a Los Ángeles para ser un Laker en un traspaso ofrecido por Dallas Mavericks, que se llevó a Anthony Davis y un pick de primera ronda. Un movimiento que los analistas de la NBA señalan como dudoso para los intereses de la franquicia texana, mientras sus fans lo califican como "el peor traspaso de la historia".

Curiosamente, el traspaso más importante de la última década coincide en una crisis de consumo de la NBA. Hay informes que hablan de un 48% de bajada desde el 2021. Esto se ve reflejado a nivel doméstico, donde hay varios factores socioculturales que influyen en la pérdida de audiencia. Pero el aterrizaje de Luka Doncic en los Angeles Lakers es el fiel reflejo del trasatlántico que es la NBA. Medio mundo, incluso los que siguen de manera esporádica la mejor liga de baloncesto del mundo, se ha enterado de que el jugador esloveno abandona Dallas.

El movimiento, en concreto, se basa en que los Lakers reciben a Luka Doncic, Maxi Kleber y Markieff Morris y los Mavericks a Anthony Davis, Max Christie y la 1ª ronda del Draft de los Lakers en 2029. Hubo situaciones realmente extrañas. Como la reacción de los propios periodistas que adelantaron la noticia, asegurando que ni ellos mismos se creían que algo así podía pasar.

placeholder Un fan de los Lakers, en el homenaje a Doncic de Dallas. (Reuters)
Un fan de los Lakers, en el homenaje a Doncic de Dallas. (Reuters)

La negociación fue llevada con extremo recelo y sigilo por parte de ambos GM (General Manager), aunque está confirmado que fue Nico Harrison, de los Mavericks, quien ofreció a Doncic a unos Lakers que hicieron bueno el dicho 'a caballo regalado...'. Según medios locales de Dallas, la primera reacción de Rob Pelinka, mandamás de los Lakers, fue la de tomarse a broma la oferta.

Pelinka, acorde a la información oficialista, mantuvo distancia incluso con LeBron James, quien supuestamente no sabía nada de la operación. Se hace difícil de creer que el jugador más importante de la plantilla, y de la propia liga, que incluso ha conseguido tener a su hijo, Bronnie, en plantilla (a medio camino con la liga de desarrollo) se enterase de la noticia como el resto de los mortales. El máximo anotador histórico de la NBA despidió con cariño a su amigo Davis (incluso comparten agentes, Rich Paul amigo íntimo de LeBron) y llamó "puto mentiroso" a un periodista que aseguraba que un desencuentro entre pívot y alero había desencadenado el movimiento.

El órdago de Harrison y el peso de Doncic

"Sentimos que la defensa gana campeonatos". A Nico Harrison le vienen semanas movidas en Dallas. A sus 52 años, este exjugador profesional de baloncesto, cuya carrera se basó en experiencias no demasiado exitosas en Bélgica o Japón, se ha convertido en el enemigo número uno de su afición. Mark Cuban le otorgó los mandos de la franquicia en el 2022, después de casi dos décadas de éxito en Nike, donde sus excelentes relaciones con jugadores NBA le convirtieron en uno de los niños bonitos de la compañía.

Estos años, que coinciden con Jason Kidd en los banquillos, fueron exitosos para los Mavericks, llegando incluso a disputar una final de la NBA la pasada temporada. La franquicia texana solo cuenta con un campeonato en su haber, el que consiguió Dirk Nowitzki, junto a Kidd, Jason Terry y compañía, en el curso 2010-11. Pero todo cambió en este inicio de febrero, siendo el artífice del traspaso más importante de la historia del equipo... y siendo señalado como perdedor del movimiento. La afición culpa al GM de dejar marchar a su mayor estrella en años, llegando a organizar un funeral simbólico a las afueras del pabellón antes de que su equipo fuese vapuleado por los Cleveland Cavaliers por 144 a 101.

placeholder Nico Harrison, a la derecha, GM de Dallas Mavericks. (Reuters/Jerome Miron)
Nico Harrison, a la derecha, GM de Dallas Mavericks. (Reuters/Jerome Miron)

Harrison defendió públicamente que la idea de incorporar a Anthony Davis a la plantilla de los Mavericks era necesaria para aspirar al título. Pero dejó una pincelada que apunta al verdadero motivo: el supercontrato al que aspiraba Luka Doncic. "Realmente sentimos que nos adelantamos a lo que iba a ser un verano tumultuoso, con Luka pudieron firmar el contrato supermax y también a un año de poder optar a no negociar", explicó el GM.

En total, Doncic iba a poder firmar por 340 millones de dólares en cinco temporadas, el mayor contrato de la historia de la NBA. ¿Cómo iba Dallas a no ofrecer el máximo a su jugador franquicia? Hablamos de una estrella que, si las lesiones no se oponen, estará entre los tres candidatos a ser MVP de la temporada regular durante los próximos años. Pero la realidad es que el sistema de contrato de la liga pone en un serio aprieto a las franquicias potentes, obligadas a hipotecar todas sus esperanzas en la salud de sus grandes estrellas... y ahí es donde entra en juego el físico de Doncic.

Foto: Imagen de archivo de Doncic, LeBron y Davis, en un Mavs-Lakers. (Reuters/Gary A.Vasquez)

El sobrepeso del esloveno se ha convertido en el argumento extraoficial para explicar la decisión. Es de sobra conocido que Doncic llegó a presentarse a inicios de temporadas con hasta 15 kilos de más después de vacaciones. Pero también es cierto que esto no le ha impedido disputar seis temporadas a un altísimo nivel, ganar el premio a Rookie del año, ser cinco veces All-Star, MVP de Finales de Conferencia o estar promediando, esta misma temporada, 28,1 puntos, 8,3 rebotes y 7,3 asistencias por encuentro.

Su padre, Saša, se mostró dolido y crítico con la organización: "Jugó 100 partidos la temporada pasada, promediando casi 40 minutos por partido… Hablar del acondicionamiento de Luka después de eso es simplemente injusto". Fueron varios los jugadores de la NBA, como por ejemplo Kevin Durant, los que compartieron su frustración con el salvaje mercado de la NBA con los baloncestistas. Si hasta Luka era traspasable, ¿qué sería del resto?

placeholder Doncic, un icono para la franquicia. (Reuters/Jerome Miron)
Doncic, un icono para la franquicia. (Reuters/Jerome Miron)

En la despedida de Luka hacia el equipo, el jugador tuvo emotivas palabras para la ciudad, fans y comunidad, pero dejó entrever su disgusto con la franquicia, al asegurar que esperaba "estar toda su carrera" defendiendo la camiseta. El esloveno ya se encuentra en Los Ángeles, donde coincidirá con uno de sus ídolos, LeBron James, algo que entusiasma a los fans del púrpura y el dorado.

Otros, como el ex-NBA y actual jugador del Real Madrid, Ibaka, señalaron que la ética de trabajo de James debe ayudar a mejorar a Doncic, a raíz de sus problemas de peso: "Lo interesante será ver si la influencia de LeBron ayudará a Luka a estar en la mejor forma física de su vida y para el resto de su carrera. Por la forma en que LeBron cuida su cuerpo, Luka puede aprender mucho de eso". El tiempo dirá quién gana en el movimiento que ha vuelto loca a la NBA. Expectación no va a faltar.

El término histórico se usa con frecuencia en los ambientes deportivos. La madrugada del sábado al domingo dejó una noticia que justificaba el adjetivo: Luka Doncic ponía rumbo a Los Ángeles para ser un Laker en un traspaso ofrecido por Dallas Mavericks, que se llevó a Anthony Davis y un pick de primera ronda. Un movimiento que los analistas de la NBA señalan como dudoso para los intereses de la franquicia texana, mientras sus fans lo califican como "el peor traspaso de la historia".

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